La vuelta al mundo en 40.000 estampas
En el corto espacio de tiempo que va desde los primeros impresos de Gutemberg, a mediados del siglo XV, hasta el año 1500, inclusive, período denominado como incunable, el arte de la ilustración xilográfica alcanzó su completa madurez y produjo algunas de las que son hoy las grandes joyas de los coleccionistas.
En 2019 se habilitaba en el Museo del Grabado de Ribeira un espacio específico para la colección de libros ilustrados. Se llamó Biblioteca Ilustrada (se inaugurará oficialmente en breve) y abrió una nueva etapa en el ya asentado proyecto de ofrecer, en el museo, la consulta de la riquísima colección con que cuenta de estampas (sueltas, en carpetas o como ilustraciones de libros).
Hoy, ese tesoro forma una selecta y extensa colección de más de 40.000 estampas, y de alrededor de 4.000 libros, que recorre el arte del grabado, desde las técnicas clásicas de la xilografía, la calcografía o la litografía, hasta las más modernas técnicas utilizadas en el rico abanico de posibilidades que los desarrollos de la tecnología y del ingenio de los artistas abrieron a este arte.
Desde los grandes clásicos del grabado, como Rembrandt o Piranese, o talleres como los de Van Dick o de Rubens, (pasando por las corrientes innovadoras de los siglos XIX y XX, con Goya, Picasso, Dalí, Seoane, Toulouse-Lautrec, Saura, Ricardo Baroja, Guayasamil o Eberhard Schlotter) hasta la más reciente producción de artistas noveles o autores de ya adquirido prestigio aún activos.
La colección nació en una vieja librería de París, donde Javier Expósito, que con el tiempo se convertirá en el mecenas, mentor y entusiasta impulsor de dicho museo, descubre, con sorpresa y emoción, una riquísima colección privada, apenas accesible en aquel momento, que el librero guardaba, con las más antiguas y hermosas obras ilustradas.
En las estanterías de la Biblioteca Ilustrada de Ribeira destacan, por ejemplo, una edición impresa en la Imprenta Real de Madrid en 1805, con grabados de José Assensio; la historia impresa en Venecia de los emperadores romanos, de 1610, adornada con sus efigies; o la de los reyes de Francia, hasta Luis XIV, con el texto que acompaña a las efigies grabado en la plancha al tiempo que el retrato. Viajar por este espacio permite descubrir el arte del grabado en obras de ciencia, botánica o zoología, como Le spectade de la nature, editada en París por los hermanos Estienne en 1764, de la que dicha biblioteca cuenta con una completa colección de sus ocho tomos.
Pueden verse también varias ediciones de El Quijote profusamente ilustradas, como la impresa por la Imprenta Real de Madrid en 1797 o la edición francesa de 1738, junto a otros títulos como Robinson Crusoe (una traducción francesa de 1811).
Un apartado especial está dedicado a libros ilustrado de autores gallegos. Desde Castelao (que introdujo en nuestro país la técnica del linóleo), hasta la cantera de jóvenes promesas, pasando por los maestros Alfonso Costa, Luís Seoane, Leopoldo Nóvoa, Jorge Castillo, Manuel Facal, Manuel Dimas, Eugenio F. Granell, Manuel Ayaso o Virxilio.
El viaje es gratis. De martes a sábado, de 09.00 a 16.00 horas.