Hallado en Madrid el primer caso de ómicron y Cataluña estudia dos más
Detectados otros 13 en Portugal, que el miércoles comenzará a exigir un test negativo para acceder a su territorio // AECT Río Miño pide excluir a los trabajadores transfronterizos
Con una incidencia muy preocupante, que rebasa los 325 casos por cada 100.000 habitantes a 14 jornadas, y un gran aumento de sus hospitalizados Covid, que se ubican por encima de los 800 infectados, la situación viral en Portugal continúa agravándose. De mal en peor, el país vecino informó ayer de 13 contagios vinculados a la cepa ómicron (todos ellos de futbolistas del Belenenses SAD) a poco de que empiecen a aplicar nuevas restricciones en su territorio. Entrarán en vigor este miércoles, obligando a cualquier individuo que traspase sus fronteras a presentar un test negativo. Aunque estén vacunados. En España, que también registró este lunes su primer positivo asociado a la variante B.1.1.529 (en Madrid) y mantiene en estudio otros dos sospechosos (en Barcelona), solicitaron que la mencionada medida no afecte a los trabajadores que se mueven entre ambos estados diariamente.
Así lo requirió el vicedirector de la Agrupación Europea de Cooperación Transfronteriza (AECT, por sus siglas) Río Miño, Uxío Benítez, reclamando que la limitación no impacte en los citados profesionales, pues entiende que esta exigencia supondrá un “perjuicio muy grande” para los cientos de personas que, a diario, cruzan a Portugal desde Galicia para prestar sus servicios. Conforme comentó, sería un “agravio terrible”.
Lo cierto es que, por ahora, el Gobierno luso no se pronunció sobre esta petición, y el contexto en el que se encuentran tampoco invita a hacerlo favorablemente. Su última incidencia acumulada a 14 días ascendió a los 325,9 casos por 100.000 habitantes(45,9 más que el viernes, 126,88 más que la española y 138,69 más que la gallega). Todo ello mientras, en paralelo, el número de hospitalizados ha aumentado a los 809 (45 más que la jornada anterior) y sigue in crescendo la cantidad de nuevos contagios (1.635 frente a los 1.475 detectados previamente).
Por lo que respecta a nuestro país, cuya tendencia parece imitar la del vecino si bien es mejor, sigue empeorando, se detectó un positivo vinculado a la variante ómicron (a diferencia de los 13 que hallaron los portugueses). Fue precisamente en la Comunidad de Madrid –que este lunes por medio de su consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, reiteró la necesidad de fijar controles de acceso a través del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas con exigencia de prueba negativa en origen– donde se descubrió el primer contagiado por la cepa.
Se trata de un hombre de 51 años que regresó de Sudáfrica el pasado 28 de noviembre con una escala en Ámsterdam (Países Bajos) y que se detectó en un cribado con test de antígenos que se realizó en la mencionada terminal. En esta línea, el paciente presenta síntomas leves y está guardando cuarentena mientras la Dirección General de Salud Pública mantiene la vigilancia epidemiológica de los contactos estrechos del vuelo que aterrizó en la capital.
A mayores de este caso, que confirmó por secuenciación el Servicio de Microbiología del Hospital público General Gregorio Marañón, otros dos casos podrían haberse detectado en Cataluña. Su conseller de Salud, Josep Maria Argimon, explicó que se están estudiando los contagios de un par de personas que dieron positivo en un test de antígenos rápido en el Aeropuerto de Barcelona procedentes de Sudáfrica.
Por ahora, el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) registró 33 infectados por la ómicron en ocho países de la Unión Europea y del Espacio Económico Europeo (UE y EEC). Estos, entre los que no está el español, pertenecen a Alemania, Austria, Bélgica, República Checa, Dinamarca, Italia, Países Bajos y Portugal.
MÁS DE UN MILLÓN DE CASOS Y 18.000 MUERTES. Entre esos 33 casos sí se encuentran, no obstante, los 13 detectados en el país luso, y que representan el 39,39 % de todas las infecciones que se han hallado vinculadas a la variante B.1.1.529. Ante esta situación, que se suma al panorama epidemiológico desfavorable en una nación que ya acumula 1.144.342 positivos confirmados y 18.430 muertes, Portugal exigirá a partir del 1 de diciembre un test negativo (que puede ser PCR con hasta 72 horas de antelación o antígeno con hasta 48 horas) a quienes lleguen al país, ya sea por los aeropuertos, por carretera o vía marítima.
La medida se integra entre otras que el Ejecutivo luso aplicará como consecuencia de su entrada en el estado de calamidad: nivel por debajo del estado de emergencia que se mantendrá en sus fronteras previsiblemente hasta el 20 de marzo. En este sentido, el vicedirector de la Agrupación Europea de Cooperación Transfronteriza (AECT) Río Miño, Uxío Benítez, se dirigió al Gobierno portugués para pedirle que se “excepcione” a los trabajadores transfronterizos de este requisito y que puedan cruzar a Portugal únicamente con el certificado europeo de vacunación. Además, la entidad mantiene contactos con la Delegación del Gobierno en Galicia para que “interceda” con Portugal para aclarar esta cuestión que, a juicio de Uxío Benítez, “no entiende la realidad transfronteriza”.
También la Diputación de Pontevedra se refirió este lunes al tema. En una nota de prensa indicó que el AECT solicitó “aclaraciones inminentes” al Ejecutivo luso por su decisión de pedir un test negativo para poder entrar en el país desde este miércoles, incluso a las personas que tengan certificado Covid de la Unión Europea. Asimismo, aseguró que el agrupamiento transfronterizo “ve que, una vez más, se ha tomado una decisión de manera unilateral sin tener en cuenta a las personas que deben cruzar la frontera todos los días para trabajar, obligándolas a un nuevo gasto”.
Para analizar conjuntamente la situación y ver cómo afecta al territorio del Miño, “se decidió remitir hoy por la mañana (por este lunes) sendas cartas al Gobierno de la República Portuguesa para que clarifique su resolución”, sentenciaron desde la Diputación de Pontevedra.
Santiago. Once españoles permanecen atrapados en República Sudafricana por la restricción de vuelos debido a la variante ómicron y han demandado ayuda al Gobierno central para poder volver a España, puesto que creen que tendrán que estar varios días más en el país africano sin recursos para seguir en el mismo.
En el grupo de afectados hay una persona de Mallorca y otra de Barcelona, cinco de Madrid, dos de Zaragoza y dos de Sevilla, según explicó el sevillano Fran Mallén, que indicó que las gestiones que realizaron a través de la embajada española no han dado resultado, y “se han limitado a decirnos qué compañías hacen vuelos en estos momentos”.
Los 11 forman parte de una excursión de varios días por destinos turísticos naturales africanos, y tenían previsto volver en un vuelo con escala en Estambul (Turquía) que ha sido suspendido. Así, han estado en el aeropuerto de Johannesburgo sobre unas 24 horas, “donde nadie nos ha ayudado por no ser suizos”, y solo han podido “prerreservar un vuelo para el 4 de diciembre con KLM”.
Por el momento, han podido conseguir una reserva en un hotel “al menos para ducharnos”, y poco después de las 13.00 les han comunicado que tendrán que quedarse al menos un día más. Ante esta situación han optado por no salir del hotel de “una ciudad muy peligrosa”, aunque sin perspectiva de cuándo podrán volver finalmente a España.
EXTERIORES FLETARÁ UN VUELO A MOZAmBIQUE. En esta línea, el Gobierno central avanzó que enviará un avión a Mozambique a fin de ayudar a repatriar a los españoles que han quedado varados por las restricciones impuestas por la nueva variante de la Covid. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, cifró en 200 los españoles que están en países del sur africano.
UN CONFINADO EN PAÍSES BAJOS. Por otro lado, las autoridades de Países Bajos han puesto este lunes bajo cuarentena obligatoria a la pareja formada por un hombre español y una mujer portuguesa infectados con la variante ómicron. ecg
Contraposición Los ministros de Sanidad del G7 destacaron este lunes que la aparición de la “muy transmisible” variante ómicron obliga a tomar “acciones urgentes” , algo que ha contrastado con las declaraciones del presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, quien si bien reconoció que “la nueva variante está preocupando a toda Europa”, indicó que a nosotros (España) “no nos lleva a la alarma excesiva”.
Acceso a vacunas Desde el G7 también reconocieron la “relevancia estratégica de garantizar el acceso a las vacunas” y elogiaron el “trabajo ejemplar” de Sudáfrica al detectar la nueva variante y alertar de ella.
Análisis a nivel nacional Por su parte, Sánchez resaltó que la celebración de dos consejos de ministros semanales no tienen que ver con una “alerta especial con esta nueva variante” pero sí servirá para “actuar muchísimo mejor ante lo que pueda acontecer”. En esta línea, según señaló, el Ejecutivo estatal irá analizando cómo evolucionan los datos de la pandemia en los próximos días para tomar decisiones, ya que es “previsor” y “quiere adelantarse a lo que pueda acontecer”.
Medidas de prevención y la inmunización Mientras tanto, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, defendió este lunes la importancia de las medidas de prevención, de vacunación y también de anticipación para contener la propagación de la Covid-19, ya que son “eficaces” ante el virus, “sea la variante con el nombre griego que sea”, ha sentenciado, en referencia a la nueva cepa ómicron.
Pinchazos adaptados Además, la directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), María Jesús Lamas, recordó que España tiene garantizadas suficientes dosis de vacunas contra la Covid-19 que estén adaptadas a nuevas variantes del virus que traigan consigo un “escape inmunológico”.
incidencia acumulada de España a 14 jornadas para el colectivo que reúne a los más pequeños: los menores de 11 años. Es la mayor del país y, en el caso de Galicia, que desea vacunar a gran parte de ellos, es mayor. Dentro de la comunidad, para este grupo, hay 342,87 casos por cada 100.000 habitantes.