El desacierto desde el 6,75 arrastra a un buen Obra en el Palau

Cayó el Monbus Obradoiro en el Palau. No hubo sorpresa, aunque la rozó el equipo compostelano durante 30 minutos, los que tardó el Barça en imponer su juego, su físico y su soberbia calidad individual. Tropezó una vez más el plantel santiagués en el triple y con un 5/23 en su estadística (21%) se quedó sin argumentos para resistir (83-67).

La responsabilidad pesaba en el conjunto compostelano desde el inicio de un encuentro en el que en principio tenía poco que perder -por la entidad, calidad y abolengo de su anfitrión- y mucho que ganar. La jornada del sábado pesaba con las victorias de rivales directos en la pelea por evitar el descenso como el Betis, el Andorra o el propio Zaragoza, así que la opción de dar la sorpresa en el Palau cobraba, si cabe, una dimensión mayor para sus intereses.

Y salió atento el Obra, coral y generoso en su defensa de cambios -aunque los desajustes grande/pequeño les costase más de una canasta- y templado, paciente en ataque, haciendo daño con un Ellenson activo en el uno contra uno y después con Birutis, muy bien asistido por sus compañeros bajo los aros.

El Barça tiraba de repertorio para hacer daño en el intercambio de golpes en que se convirtió el primer cuarto. Mirotic apareció, como Sanli, pero le faltaba al cuadro local la fluidez de otros envites bien por el cansancio acumulado tras el carrusel de partidos entre semana en la Euroliga, pero sobre todo maniatado por un rival que en estos primeros diez minutos exhibía piernas (19-19, min. 10).

Primera batalla. En el inicio del segundo set Beliauskas y Ellenson -con su punto número 9- llevaron la renta del Monbus hasta los 4 puntos, una primera batalla ganada en una guerra a la que le quedaba aún un largo proceso para dirimirse (19-23, min. 13).

A continuación llegó la primera señal de alerta: Fer Zurbriggen y Braydon Hobbs, los dos bases del equipo compostelano, se cargaron con dos faltas personales en un tramo de partido especialmente dañino para los de Moncho Fernández en este apartado, y el Barça hizo sangre además aprovechando el paupérrimo porcentaje de su contrario en el triple, con un 1/10 desde los 6,75 que no lograron aliviar pese a intentarlo con lanzamientos liberados tanto de Robertson como de Ellenson.

El equipo de Jasikevicius se aupó de nuevo en el electrónico con un parcial de 7-1 mientras Birutis desaprovechaba sus opciones en el tiro libre (2/6 desde los 4,60 para el lituano), pero el 26-24 del marcador quedó anulado con un 2+1 para el gigante del Obra que esta vez sí acertó (24-27, min. 26).

Echó mano de talento individual el Barcelona una vez más para recuperar la iniciativa. Ni Mirotic ni Smits lo dudaron cuando se vieron con posibilidades al triple, pero Robertson, apelando a esa confianza que deposita en él Moncho Fernández pese a su año irregular desde la distancia, cortó la sangría con una réplica en una jugada que sumó 5 por la personal de Kuric sobre Okouo en el rebote posterior.

Fue Sergi Martínez, en la jugada final del cuarto, cuando ya muchos enfilaban el vestuario con el empate en la retina, quien también de 3 devolvió la ventaja para los anfitriones (37-34, min. 20).

Aguantaba el Monbus en el Palau tras el primer acto pese al déficit en el tiro exterior (2/11, un 18%) y en el rebote (14 por 21 capturas del Barça), y las miradas del obradoirismo se centraban ya esperanzadas en un tercer cuarto clave para calcular tanto la capacidad de sostenerse de los suyos como de reaccionar con rabia de los azulgranas.

Arreón local. La diferencia se asentó en los 8 puntos con otro arreón de excelencia individual por parte del Barça. Ni Ellenson ni Scrubb lograban cortar la renta sin oposición al triple (2/13) y Laprovittola, tras una pérdida absurda en el saque de fondo, colocaba ya el +10 (48-38, min. 25).

También hizo daño Davies con 7 puntos consecutivos mientras Moncho Fernández recurría a Hobbs para poner luz a la defensa zonal de su rival, y Kass castigó como se debe a este posicionamiento, con un triple que volvía a apretar el duelo (50-47, min. 27) y que obligaba a Jasikevicius a llamar al orden a los suyos para evitar cualquier tipo de relajación.

Atento atrás, resistía el conjunto compostelano pese a su infortunio delante en el tiro, aunque el base de Indiana no se amilanó cuando tuvo su ocasión (53-50, min. 28), pese a que un error suyo en otro lanzamiento lejano en un ataque precipitado facilitó la bandeja final de Mirotic para el 57-50 con que se llegó al último cuarto.

Sentencia. Del ahogo a la euforia pasó el Obra en menos de un minuto cuando Birutis, el hombre para todo del Obra en la salida del set, fue castigado con su cuarta falta personal y a continuación Beliauskas empataba el duelo con un triple (59-59, min. 34).

Una absurda antideportiva de un bisoño Okouo dio alas de nuevo al Barça (66-59) y el 7-0 lo paró Moncho Fernández pidiendo orden de nuevo a los suyos y devolviendo a Birutis a la pista.

Pero Calathes y Kuric, con sendos triples, sentenciaron a falta aún de 3 minutos. El +11 dejaba tocado y hundido ya al Obra en el Palau.