De las estaciones suizas de esquí a las playas de Acapulco

El 25 de agosto de 1930 nació Sir Sean Connery en Edimburgo (Escocia). El actor debutó en la gran pantalla en los años 50 pero pasó a la historia como el primer James Bond en Agente 007 contra el Dr. No. El británico cumplió el pasado martes 90 años, alejado de los focos desde 2012.

Con más de 90 títulos en su filmografía, el intérprete se hizo con el premio Oscar a mejor actor de reparto por Los intocables de Eliot Ness. Al margen de su carrera cinematográfica, la reina Isabel II lo nombró Caballero en el año 2000.

Con motivo de esta fecha, proponemos una ruta tras los pasos del Agente 007, por ciudades que fueron escenario de rodaje de algunas de sus películas.

¿Fan de James Bond? Te llevamos, de la mano a descubrir destinos convertidos en set de rodaje de la saga protagonizada por el Agente 007. Unas vacaciones de cine que pueden comenzar ya y terminar justo a tiempo para asistir al estreno de Spectre, el último filme de James Bond que llegará a nuestro país el próximo 6 de noviembre.

Londres.

Nuestra ruta comienza en la capital inglesa, sede por excelencia de las aventuras de este personaje. Aquí, sus fans pueden descubrir la Oficina de Guerra –Old War Office–, una construcción neobarroca perteneciente al Ministerio de Defensa, que ha servido como oficina de Bond en varias de sus películas.

También el río Támesis recibe a los amantes de la saga con una interesante propuesta: simular, en una lancha de alta velocidad, la espectacular carrera que aparece en El mundo nunca es suficiente, protagonizada por Pierce Brosnan. Un escenario al que, por cierto, también se recurre en la nueva entrega.

Otra parada es el Dukes Hotel, donde los turistas pueden saborear el cóctel Vesper que toma el famoso espía en Casino Royale. Además, este bar era frecuentado por el autor de los libros, Ian Fleming, y, según cuentan, le sirvió de inspiración para crear la famosa frase “mezclado, no agitado”.

Interesante resulta también el London Film Museum, que alberga la exposición ‘Bond in motion’, la colección oficial más amplia de coches originales utilizados en las películas y que, recientemente, ha incorporado los que se muestran en la última entrega.

Películas de James Bond rodadas en Londres: Dr. No (1962), Al servicio secreto de su Majestad (1969), Octopussy (1983), Panorama para matar (1985), Licencia para matar (1989), Goldeneye (1995) y Quantum of Solace (2008).

Venecia.

La siguiente parada nos lleva hasta Venecia, por cuyos canales navegó Bond por primera vez en Desde Rusia con amor y, posteriormente, en Moonraker, donde participó en una persecución en una góndola motorizada.

La ciudad también invita a disfrutar de un paseo a pie hasta la Plaza de San Marcos, una de las visitas de rigor, junto a la que se encuentra la fábrica de vidrio del malvado Drax en Moonraker. También aquí, en la parte norte de la plaza, se puede contemplar el reloj tras el que tiene lugar la pelea cuerpo a cuerpo entre Bond y Chang, el secuaz de Drax.

Además, gran parte de las escenas finales de Casino Royale se desarrollan en Venecia, como la escena en la que el palacio se derrumba en el agua, rodada en el Gran Canal, frente al mercado de Rialto.

Películas de James Bond rodadas en Venecia: Desde Rusia con amor (1963), Moonraker (1979), Casino Royale (2006).

Tailandia.

Próxima parada: Tailandia. Viajamos hasta aquí para descubrir el famoso islote Ko Tapu, conocido como la “isla de James Bond” desde el estreno, en 1974, de El hombre de la pistola de oro. Este enclave, integrado en un conjunto de pequeñas islas de piedra caliza en la bahía de Phang Nga -al noreste de Phuket-, pasó de ser un destino remoto a convertirse en un paraíso muy demandado por los turistas. Tan desconocido era entonces, que fue la guarida perfecta de Scaramanga, el enemigo de Bond.

También Bangkok resulta interesante para los seguidores de la película. Concretamente, los Klongs –canales que recorren la ciudad– llevan a los visitantes a revivir la persecución en lancha de este filme protagonizado por Roger Moore.

El itinerario incluye una parada en el edificio Muang Boang, el museo al aire libre más grande del mundo, transformado en la escuela de kárate en la que Bond amanece después de ser capturado por sus enemigos. Su interior alberga miniaturas a escala de los monumentos y edificios más representativos de Bangkok. Por último, el Estadio Ratchdamnoen, escenario del partido de kickboxing donde Bond se encuentra por primera vez con Scaramanga.

Película de James Bond rodada en Tailandia: El hombre de la pistola de oro (1974).

Estambul.

Desde Rusia con amor, protagonizada por Sean Connery, lleva por primera vez al personaje hasta Estambul. Tras esa visita, el espía volvió a la ciudad turca en 1999 con El mundo nunca es suficiente y, en 2012, con Skyfall.

Uno de los principales escenarios del filme Desde Rusia con amor lo constituye el Gran Bazar, uno de los mercados cubiertos más antiguos del mundo, que le sirvió como lugar de reuniones confidenciales. También cobra protagonismo la popular mezquita de Santa Sofía, joya de la arquitectura bizantina; y la Cisterna Basílica, construida en el siglo VI.

Terminamos a bordo de un ferry a través del Bósforo, en el que tiene lugar la escena en la que Bond intenta seducir a la agente rusa Tatiana Romanova.

Películas de James Bond rodadas en Estambul: Desde Rusia con amor (1963), Skyfall (2012), El mundo nunca es suficiente (1999).

Japón.

La ruta por el país nipón arranca en Tokio, donde el Agente 007 tiene que rastrear el origen de una misteriosa nave espacial en la película Sólo se vive dos veces.

En este destino, los visitantes pueden alojarse en el hotel New Otani, un complejo de lujo que en la película se convierte en las oficinas centrales de la compañía Osato Chemichals and Engineering.

Tampoco puede faltar una parada en los muelles del puerto de Kobe, donde Bond debe librarse de numerosos agentes de la organización Spectre; o el castillo de Himeji, donde el espía muestra sus habilidades en la escuela de entrenamiento ninja. Además, aquí los turistas pueden contemplar una panorámica de la ciudad de Himeji, a 53 kilómetros de Kobe.

Y vale la pena acercarse a la ciudad de Elbino, donde tienen lugar las escenas de helicóptero; y el pueblo pesquero de Akime, también presente en la película.

Brasil.

Río de Janeiro fue el lugar elegido para rodar algunas escenas de la película Moonraker, donde destaca la lucha entre Bond y Jaws –el malvado de dientes metálicos– en el teleférico que lleva a la montaña Pan de Azúcar. También aquí, los que viajen en pareja pueden revivir el momento en que el agente se desliza cable abajo con la astrofísica Holly Goodhead, la chica bond interpretada por Lois Chiles.

Y una curiosidad: la persecución en lancha, supuestamente rodada en el Amazonas, se rodó en realidad en el río Santa Lucía, en Jupiter (Palm Beach, Florida). Pero termina en Brasil, concretamente en las cataratas de Iguazú, situadas en el límite entre el estado brasileño de Paraná y la provincia argentina de Misiones.

Película de James Bond rodada en Brasil: Moonraker (1979).

Alpes Suizos.

Suiza fue el escenario elegido para rodar las escenas más glamurosas de la película 007 al servicio de Su Majestad. En Berna, la capital, se encuentra la oficina del procurador Gumpold, concretamente en el hotel Shweizerhof.

Especial mención merece también la cima de la montaña Schilthorn, en Müren, alojamiento en la película del archienemigo de Bond, Ernst Stavro Blofeld, jefe de la organización criminal Spectre. Y aquí, en Mürren, también recomendamos disfrutar de un desayuno bufé al más puro estilo Bond en el restaurante giratorio Piz Gloria, con vista panorámica de 360 grados; y disfrutar de la proyección de los mejores momentos de la película.

A poco más de tres kilómetros de aquí se ubica el pueblo de Lauterbrunnen, donde se rodó la carrera de rally, y también Grindelwald, la localización de la popular pista de hielo.

Película de James Bond rodada en los Alpes Suizos: Al servicio secreto de su Majestad (1969).

España.

Nuestro país también ha servido de escenario de la secuencia de inicio de El mundo nunca es suficiente, donde el agente secreto roba una maleta de un sospechoso y salta por la ventana de un bloque de apartamentos en Bilbao. La escena muestra también el famoso Museo Guggenheim al fondo.

De camino al sur, en Cádiz, la película Muere otro día muestra a Bond intentando acceder al castillo de San Sebastián, donde descubre unos diamantes que le llevan hasta el malvado Gustav Graves. En el Peñón de Gibraltar, el agente, interpretado por primera vez por Timothy Dalton, participa en un entrenamiento militar de la OTAN en 007: Alta tensión.

Películas de James Bond rodadas en España: El mundo nunca es suficiente (1999), Muere otro día (2002), 007: Alta tensión (1987).

Las Vegas.

Nuestra penúltima parada nos lleva hasta Las Vegas, donde Sean Connery interpreta a Bond por última vez en Diamantes para la eternidad, el filme en el que se ve involucrado en una trama de tráfico de diamantes.

Los casinos de esta ciudad sirvieron como decorado de la película en numerosas escenas como cuando Bond conoce a la bella Tiffany Case en el Circus Circus; cuando gana 50.000 dólares en el Hotel Casino Riviera; o el momento en el que conoce a Willard Whyte en su casa, que en realidad es el hotel Hilton de Las Vegas.

Tres kilómetros al sur de la ciudad, los fans pueden visitar el cementerio Palm Henderson Mortuary, donde se incinera a Bond. Y para finalizar, un tranquilo paseo por la calle Fremont, donde se rodó una persecución de coches tan complicada que obligó a los productores a acordonar la calle principal de la ciudad durante tres noches.

Película de James Bond rodada en Las Vegas: Diamantes para la eternidad (1971).

Cerdeña.

Terminamos en Cerdeña, lugar elegido para rodar algunas escenas de la película La espía que me amó. Aquí, proponemos disfrutar de una noche en el hotel Cala Di Volpe, en Costa Esmeralda, donde el agente secreto y la bella Amasova protagonizan una romántica escena antes de partir hacia la guarida submarina de Stromberg. En la película, la escena simula una habitación de hotel pero en realidad se rodó en el Piano Bar.

Los más atrevidos pueden experimentar un subidón de adrenalina en un recorrido por la estrecha carretera de costa que arranca a un kilómetro y medio del hotel, y en la que se rodó la persecución de coches. La famosa escena en la que el coche sumergible Lotus Esprit de Bond cae al agua y se convierte en un submarino fue rodada en la playa de Romazzina, en la costa este de Cala Di Volpe.