Juan Álvarez y Ana Naya, Gallegos de Diciembre
Un carácter afable y mucha paciencia son algunas de las claves para tratar con los más pequeños. Sin embargo, con eso sólo no basta y buena cuenta de ello pueden dar Juan Álvarez y Ana Naya, que han sido elegidos por las redacciones de EL CORREO GALLEGO, Galicia Hoxe y Radio Obradoiro como Gallegos del Mes de Diciembre por su dedicación a los más pequeños de la casa.
Su red de escuelas infantiles Cativos posee un método que ya se está exportando más allá de las fronteras gallegas.
La suya se podría considerar como de esas historias que se le cuentan a los niños antes de ir a dormir: a pesar de las dificultades han tenido un final feliz. Y es que después de tres lustros en el mundo de la educación infantil, este joven matrimonio ha logrado regentar un total de catorce centros en toda España.
Esta realidad es fruto de mucho esfuerzo y mucha dedicación y nació como un sueño de juventud. En la Facultad de Pedagogía de la USC fue donde se conocieron y desde entonces no se han vuelto a separar. Ya en quinto de carrera -comenta Juan- empezamos a pensar en este proyecto, porque también vimos que en Santiago había una carencia del tipo de escuela que nosotros queremos.
Formación especializada
Ambos realizaron cursos de especialización en educación infantil y, tras completar su formación, decidieron casarse. Utilizamos algo del dinero de la boda para poder abrir la primera guardería, recuerda Álvarez al hablar sobre sus comienzos en el mundo laboral. Para nosotros fueron tiempos muy duros porque este tipo de centros van de boca en boca y nosotros éramos foráneos. No había un pasado familiar, sólo los conocidos de la facultad y que, lógicamente, aún no tenían hijos, añade.
Además, hace tres lustros nadie se planteaba enseñarles a los niños pequeños inglés, algo que hoy en día es una de las asignaturas primordiales. Detalles como éstos son los que hacen diferente a Cativos de otras guarderías.
Era una apuesta personal muy arriesgada basada en el trabajo y en el esfuerzo. Y ahí los ven con un emporio de escuelas infantiles que sirven como referente de la educación no sólo en la comunidad, sino también en el resto de España. Empezando tan sólo con cuatro niños, Santi, Javi, Martín y Mario, este matrimonio no se imaginaría que años después, concretamente en 2000, abrirían su segundo centro en la capital gallega, que serviría como complemento al inaugural, ya que se dedica a los niños de tres a seis años.
A partir de entonces, se sumaron a esta iniciativa diversos centros por toda Galicia e incluso por el resto de la geografía española. Hoy en día, este matrimonio regenta un total de catorce centros de educación infantil y la cifra irá en aumento.
Verdadera vocación
El impecable trabajo que están realizando tanto Ana como Juan se debe, también, a su verdadera devoción por los más pequeños. Por ello, esta elección como Gallegos del Mes de Diciembre supone para ellos un premio muy importante porque hasta ahora no hay nadie del sector de la educación infantil al que se le haya reconocido su trabajo, asegura Álvarez.
Éste es un reconocimiento a todas las personas que trabajamos en condiciones muy duras, porque los padres siempre tienen el temor de dejar a sus hijos pequeños en una escuela infantil, añade Juan.
Apertura de un nuevo colegio
Aunque las navidades son una época para el descanso y para disfrutar de unas pequeñas vacaciones, Ana Naya y Juan Álvarez no paran. De hecho, celebraron el Fin de Año a caballo entre Madrid y Murcia. Aprovecharon, pues, para visitar una de sus escuelas infantiles situada en la capital española y, a continuación, se desplazaron a Murcia para supervisar la obra del que será un nuevo colegio Cativos.
Entre otros planes de futuro, este joven matrimonio tiene en mente la construcción de una escuela infantil diferente y pionera en la capital gallega. Aunque no adelantaron demasiados detalles, sí aseguraron que sería mucho más moderna. Conociendo la trayectoria de esta pareja, seguro que sorprenderán con algo novedoso y que supondrá todo un éxito en Compostela.