Casi setenta fuegos en solo cinco días... y veintidós de ellos nocturnos

La última ola de incendios en Ourense acumuló, entre los días 12 y 17 de septiembre, 67 fuegos, de los que 22 empezaron por la noche, cuando no podían actuar los medios aéreos. Así lo concretó el conselleiro do Medio Rural, José González, en el pleno del Parlamento gallego, donde aclaró que una docena se produjeron, además, en parroquias identificadas como de alta actividad incendiaria.

En el debate de dos preguntas acumuladas sobre incendios, formuladas por Xosé Luís Rivas (BNG) y José Antonio Armada (PPdeG), el conselleiro subrayó que estos datos ponen en evidencia la “intencionalidad” de los fuegos.

“Hablamos de una cuestión de orden pública, de delitos incendiarios, de delincuentes que ponen en peligro vidas de personas”, esgrimió antes de subrayar que los fuegos de Ourense, además, registraron en varias ocasiones distintos focos simultáneos.

Por ello agradeció la labor de los agentes que permitieron la detención de cuatro personas en el marco de la ola de incendios, “tres de ellas in situ”. “Llevamos más de 50 este año”, apostilló, trasladando a los incendiarios un mensaje: “Más pronto que tarde responderán con penas de cárcel y pagarán con su patrimonio los gastos de extinción”.

Rivas, por su parte, advertía de que pese a la “sobada cantinela” de los fuegos intencionados y de los “terroristas” incendiarios, el “problema” de los incendios reside en el “abandono” y las “culpables” son las políticas de “destrucción del rural” del PPdeG. “Llevamos 12 años perdidos “, apuntaba. “El pueblo de Ourense no es incendiario, lo que hay es un grito de atención”, dijo el nacionalista, que habló también de espurios intereses y una “mano negra” tras los fuegos.

Molesto con su intervención , el conselleiro insistía en la intencionalidad, al tiempo que aplaudía las labores de los equipos de extinción “en condiciones extremas” y llamaba al consenso a la oposición para seguir buscando “soluciones estructurales”.

Por otra parte, la asociación Amigas das Árbores advierte de la “grave” situación que registran amplias zonas de montaña de la provincia de Ourense tras los últimos incendios forestales, puesto que las lluvias provocan erosión del suelo y arrastre de cenizas a los cauces fluviales.

Ven la situación más grave en el Macizo Central, el parque natural del Xurés, la parte alta de A Mezquita y en zonas de Cualedro, según recoge Europa Press.

Casi al mismo tiempo, la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, avanzaba la puesta en marcha de un Plan de Recuperación del Parque Natural del Xurés dirigido a regenerar zonas castigadas por los fuegos y preservar espacios, después de que ardiesen más de 2.000 hectáreas de este espacio.

En una visita a las zonas afectadas por los incendios en Ourense reconoció ante los medios que existe “un problema social que se traduce también en un problema de carácter medioambiental”, con “una agresión continuada todos los años”. Este plan estudiará además el riesgo de erosión que preocupa a los ecologistas. Preguntada por la propuesta de Arco Iris para descatalogar el Xurés como Reserva de la Biosfera, opinó que “sería ilógico”, pues la parte quemada es un 7 % de sus 30.000 hectáreas.