Contas mirará este año con lupa los ingresos del fondo COVID para la gestión de la pandemia en 2020

Santiago. El combate del coronavirus centró en 2020 la atención de las administraciones. Y en consonancia, el Consello de Contas fiscalizará este año la aplicación y suficiencia de los ingresos del fondo COVID para la gestión de la pandemia en Galicia durante el ejercicio pasado, el del estallido de la crisis sanitaria.

Además, el ente fiscalizador también evaluará el impacto de la crisis del coronavirus en el ámbito de la contratación del Sergas, según destacó este jueves el conselleiro maior, José Antonio Redondo, en una comparecencia en el Parlamento.

En la comisión permanente no legislativa para las relaciones con el Consello de Contas, Redondo presentó el plan de trabajo de 2021 y también dio cuenta de la memoria anual de actividades de 2019 y los informes del sector público de Galicia que contienen la fiscalización de la cuenta general de la comunidad autónoma de 2018.

Por su parte, los grupos de la oposición lamentaron el funcionamiento de esta comisión, puesto que hace “muy limitado” el impacto de los informes en la realidad gallega, en palabras de la socialista Begoña Rodríguez Rumbo.

Una tercera comparecencia del conselleiro maior prevista para la misma sesión del jueves, para presentar el informe de fiscalización de las contabilidades electorales correspondientes a los comicios gallegos del pasado 12 de julio, fue retrasada por encontrarse el ente “analizando la pertinencia” de efectuar “un ajuste técnico” en el mismo.

Dentro del plan de este año, el Consello de Contas incluye un informe de fiscalización sobre los ingresos del fondo COVID para gestionar la pandemia en Galicia durante el pasado ejercicio.

Evaluará el destino de los ingresos extraordinarios recibidos del Estado para sanidad y educación y se centrará en la verificación de que se dedicasen “a financiar las necesidades presupuestarias derivadas de la crisis sanitaria”.

En concreto, José Antonio Redondo apuntó a la más alta inversión derivada de la lucha contra la pandemia, la aplicación de los fondos finalistas transferidos con cargo a los tramos 1 y 2 para la apoyar un mayor gasto sanitario y el tramo 3 para afrontar un desembolso educativo más elevado. Asimismo, resaltó que se tratará de determinar “el grado de suficiencia” de los fondos estatales asignados en relación con el volumen “real” de los gastos sanitario y educativo extraordinarios asumidos por la comunidad.

En cuanto al impacto de la pandemia en la contratación del Sergas, explicó que se fiscalizará el cumplimiento para “comprobar la adecuación a la normativa de contratación pública de los contratos realizados durante la vigencia de la pandemia”. Contas analizará su impacto financiero en las cuentas del Sergas.

En el turno de los grupos, la nacionalista Noa Presas aplaudió un plan “importante y ambicioso”, si bien precisó que el BNG “añadiría algunas cuestiones que no aparecen recogidas”. De hecho, una vez concluida la comisión, los grupos tienen de plazo tres días hábiles, hasta el lunes 15, para formular recomendaciones a este plan de trabajo.

Presas apuntado a algunos ámbitos como el de las residencias de mayores, otros aspectos sobre la sanidad gallega y cuestiones como los incentivos fiscales.

Mientras, Rodríguez Rumbo señaló que el plan de trabajo “se puede hacer con mayor consenso con los grupos de la oposición” y criticó el “rodillo” del grupo mayoritario que “no permite introducir determinados informes de fiscalización”.

El popular José Manuel Rey Varela valoró que es un plan de trabajo “muy intenso” y que supone “todo un reto” para el organismo.

Redondo, que había reivindicado el “gran trabajo y esfuerzo” del Consello “a pesar de la pandemia”, apuntó a las “circunstancias muy especiales” en que se desarrollará el nuevo plan de trabajo, pero comprometió entregar cuanto “antes” los informes. ecg