Diálogo de sordos para la colocación de Alcoa

Cinco de los seis interesados en hacerse con la planta de aluminio de Alcoa San Cibrao, en Cervo, A Mariña lucense, han pasado “la primera criba” que implica la adopción de una cláusula de confidencialidad. El sexto “todavía puede hacerlo estos días”.

De ello informó el comité de empresa al término de una nueva reunión multilateral en el eterno proceso de venta. Transcurrido ya más de un año del inicio del conflicto por la intención inicial de la multinacional de cerrar la planta, el Gobierno central le urgió a “que venda”. “Lo único que tiene que hacer Alcoa es vender, dejar paso a otro propietario que tenga licencia moral para operar en España, porque a Alcoa se le ha acabado”, afirmaba el secretario general de Industria, Raül Blanco, en declaraciones remitidas a los medios de comunicación.

Mientras, la empresa alegó que “mantiene su compromiso de avanzar en la venta a Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, SEPI, tras lo cual ésta podría transferir la planta a un tercero”.

En este escenario, y con seis potenciales compradores, cinco de ellos recibieron los términos o term sheet de Alcoa, “que es el mismo para todos”. Recibieron “informaciones genéricas y más específicas” sobre la planta, según apuntó el comité y recogía la agencia Europa Press.

“Nosotros vamos a tener reuniones con tres de los seis compradores. Conoceremos los planes industriales y sobre todo los energéticos, que nos den viabilidad a largo plazo, para funcionar durante 20-25 años. Nos queda que los otros dos compradores se pongan en contacto con nosotros”, explicó el presidente de los representantes de los trabajadores, José Antonio Zan, antes de hacer un llamamiento a “seguir unidos, luchando” por el futuro de la fábrica.

Por Industria, “ante la enésima reunión”, Blanco trasladó “varios mensajes claros”, el primero un reproche a que Alcoa “está enrocado en un proceso jurídico poniendo a SEPI y al Gobierno como excusa para no vender”. Hay “al menos seis empresas interesadas en la compra de la planta” y para que ello se materialice “no es necesario la triangulación ni la intermediación del Gobierno, se puede realizar con total normalidad dentro del marco jurídico”, sostiene el secretario general de Industria.

Al respecto, afirma que “las administraciones estarán –tanto Gobierno central como Xunta– detrás de esa operación, dando todas las garantías necesarias para que esa venta se produzca y se intervendrá con todo lo necesario si eso se requiere y posteriormente se apoyará la inversión del nuevo propietario”. Pero ve “absurdo y surrealista” y caer “nuevamente en las trampas” de Alcoa “si todo se condiciona a respuestas jurídicas, a procesos de meses anteriores, cuando ahora hay un proceso claro de seis licitantes que quieren comprar esa planta y lo único que tiene que hacer Alcoa es vender”.

“No podemos estar más tiempo aguantando las trampas en los procesos de ventea de Alcoa y sus procesos eternos de venta y diálogo. Que venda y que lo haga dentro del marco jurídico y después ese proceso industrial vaya adelante”, sentenció. Para el titular de Industria, “esa es la mejor garantía que hay” para los trabajadores y para la comarca de A Mariña. Sin aceptar “para nada esa acusación de que se está dejando a los pies de los caballos a los trabajadores”, el secretario general se comprometió a que “el Gobierno va a estar ahí igual que antes”.

Por su parte, Alcoa daba cuenta de que informó este jueves a los miembros de una mesa multilateral sobre “los avances realizados en el proceso de venta” de la planta de aluminio de San Cibrao “a SEPI”. “Alcoa ha iniciado conversaciones con los candidatos remitidos por el Ministerio de Industria que han expresado interés en adquirir la planta de aluminio una vez se complete la venta a SEPI”, resaltó. Como parte de esas conversaciones, según indica, Alcoa les ha proporcionado la propuesta de hoja de condiciones generales (el term sheet) que la multinacional, insiste, “usaría para la venta a SEPI”. “La compañía mantiene su compromiso de avanzar en la venta a SEPI, tras lo cual SEPI podría transferir la planta a un tercero”, concluyen las fuentes de la empresa.