Galicia

El incendio de Lobios en el que murió un piloto afecta ya a 400 hectáreas

El terreno escarpado dificulta el trabajo de los bomberos en la parte portuguesa // Extinguidos dos fuegos en Lobeira y Navia de Suarna tras arrasar 120 ha

  • 09 ago 2020 / 21:48
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Portugal continúa combatiendo el incendio forestal que afecta desde el sábado al transfronterizo Parque del Gerês-Xurés, donde el terreno escarpado dificulta el trabajo de los bomberos y en el que un piloto murió al estrellarse su hidroavión.

La extinción de las llamas, que afectan a territorio portugués y español, se está haciendo con equipos a pie, informaron a Efe desde Protección Civil de Portugal, que señalaron que durante la mañana no fue posible utilizar medios aéreos debido a la neblina que cubría la zona.

Con la mejora de las condiciones meteorológicas, en torno al mediodía se unió una aeronave para combatir las llamas y otra está en camino, que se suman a otro avión que realiza labores de reconocimiento y monitorización. Sobre el terreno trabajan también más de 150 bomberos y 46 vehículos de extinción terrestre.

Las autoridades lusas todavía no tienen datos de las hectáreas que ya arrasó el fuego, aunque señalaron que ya se trata de un “área considerable”. El incendio afecta en la parte lusa al Parque Nacional Peneda-Gerês y de momento quemó una zona principalmente integrada por arbustos, pero está próximo a una masa forestal, por lo que los bomberos se centran en evitar que se extienda hasta ahí.

Las labores están siendo dificultadas por el terreno escarpado, con muchas rocas que impiden el acceso de los efectivos, que trabajan en una zona que está a entre 800 y 1.000 metros de altitud.

“No hay previsión” de cuándo podrá ser controlado el fuego, precisó Protección Civil. El incendio se inició en la madrugada del sábado y afecta a las localidades de Lindoso, en Portugal, y de Lobios, en España. En la parte española, según los últimos datos facilitados por la Xunta de Galicia, ardieron 400 hectáreas.

El Parque transfronterizo del Gerês-Xurés, con un área aproximada de 100.000 hectáreas, está localizado en la región Norte de Portugal y en Galicia, y está declarado reserva de la biosfera. Portugal está hasta esta madrugada en situación de alerta por riesgo de incendio, declarada por el Gobierno luso debido a las previsiones meteorológicas para este fin de semana.

Mejores noticias llegan de los fuegos localizados en Lobeira (Ourense) y de Navia de Suarna (Lugo), que quedaron extinguidos durante la mañana de ayer tras haber calcinado, entre ambos, 120 hectáreas, señala la Consellería de Medio Rural.

El incendio de Lobeira comenzó el viernes y quemó 30 hectáreas de monte raso en el Parque Natural da Baixa Limia-Serra do Gerês-Xurés; mientras que el Navia de Suarna (Lugo), que también comenzó la noche del viernes, calcinó 92 hectáreas; 60 arboladas y 32 de monte raso.

Además, la Xunta informa de un incendio activo que supera las 20 hectáreas en Chandrexa de Queixa (Ourense) y de otros dos fuegos estabilizados, también en la provincia de Ourense; uno en Toén, con 250 hectáreas afectadas, y otro en Muíños, con 50 hectáreas quemadas en el Parque Natural da Baixa Limia-Serra do Gerês-Xurés.

Los técnicos convierten en un reconocimiento a los tripulantes del avión siniestrado su protesta
Ayer se cumplían 8 días de su huelga indefinida // Piden a la Xunta retomar el contacto

Santiago. Los técnicos de incendios forestales convirtieron la protesta que tenían convocada ayer, cuando se cumplían ocho días de su huelga indefinida, en un acto de “reconocimiento y condolencias” por el accidente de un hidroavión que participaba este sábado en las labores de extinción del incendio de Lobios (Ourense) y que provocó la muerte de uno de los tripulantes y heridas al otro.

Xabier Bruña, de la CIG, explicó que la concentración d fue silenciosa por el accidente. Dado que todavía no tuvieron contactos con Medio Rural para negociar una salida al conflicto, avanzó que seguirán con la huelga y con las protestas. Estos días, en los que se suceden incendios, se constata que se “recrudecen” las condiciones de trabajo de los miembros del dispositivo de extinción, integrado por casi 6.000 personas en Galicia, a las que los técnicos de incendios coordinan, indicó.

Cuando se dan situaciones como esta, con varios fuegos grandes activos y con un accidente con un fallecido y un herido, “hay que recordar que hay un equipo humano detrás de las labores para parar esta lacra”, destacó Bruña. Además, pidió retomar el contacto con la Xunta para buscar una solución a su conflicto. “Esperemos que la reticencia de no llamar sea porque no está conformado todavía el Gobierno”, indicó.

En cualquier caso, defendió que el dispositivo de extinción de incendios “tiene que funcionar con independencia de si el Gobierno está constituido o no”. Desde la negociación de los servicios mínimos para la huelga, que superan el 90 % y garantizan el funcionamiento del servicio, no volvieron a tener contacto con la Xunta, explicó.

Manifestó que llevan 27 meses intentando encontrar una solución y que lo que reclaman “entronca con las cuestiones de seguridad” y con un aumento de personal. Estos técnicos, que son unos 120, se encargan de coordinar los medios de extinción y también de tareas de gestión forestal. El 15 % del territorio gallego, indicó el sindicalista, se gestionan a través de contratos de la administración, que no es propietaria, pero administra los terrenos. E.P.

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