La falta de chips volverá a parar el lunes la planta de Stellantis, antigua PSA
La medida afectará a todos los turnos del Sistema 1, que fabrica el Peugeot 2008 // La patronal europea del motor teme que la distribución de semiconductores no se normalice hasta el tercer trimestre // Augura por ello reestructuraciones de empleo
Los sindicatos que representan a los trabajadores de la planta de Stellantis en Vigo, que antes conocíamos como la factoría del grupo PSA, informaron desde esta mañana a sus afiliados que el Sistema 1 de la planta, el que se encarga de fabricar el exitoso todocamino Peugeot 2008, no operará el próximo lunes. Un comunicado de la sección sindical de CC.OO. así lo adelantaba, culpando a la falta de componentes.
No es la primera vez que esto ocurre en lo que va de año. Ya a finales del pasado mes de febrero la dirección olívica de Stellantis comunicó a su plantilla que los problemas de abastecimiento generalizados de microchips, que afectan a industrias que van desde la informática, redes, comunicaciones y a los cada vez más tecnológicos automóviles, impactaría en el ritmo de trabajo de las instalaciones. Así, se llegaron a parar entonces turnos de noche tanto del sistema que fabrica el 2008 como el que se encarga de las furgonetas comerciales. Tras el forzado parón del confinamiento total de marzo de 2020 y la reactivación posterior, el entonces todavía grupo PSA era noticia porque anunciaba que en octubre ponía en marcha un cuarto equipo de Fin de Semana en el Sistema 1 del Peugeot 2008 que, integrado por 600 personas, se sumaba al turno de fin de semana del Sistema 2, implantado en 2018. Por primera vez en su historia, la planta pasaba a funcionar con cuatro turnos en sus dos líneas de producción.
Sin embargo, ahora se enfrenta a una escasez de chips que, según teme el sector, se alargará al menos hasta el tercer trimestre, fruto en parte de la guerra comercial entre EE.UU. y China, así como de la alta demanda para dispositivos de comunicaciones portátiles, como los teléfonos inteligentes. La asociación europea de fabricantes de la automoción ACEA, que avanza que de no mejorar la situación se producirán ajustes en el empleo, demandó recientemente a la a Bruselas que intervenga para aumentar el suministro de semiconductores desde Asia, poniendo la vista en Taiwan o Corea del Sur.