La Xunta ofertará este año más de 4.300 plazas de empleo público
Unas 1.600 serán para educación, que se unen a las ya anunciadas de sanidad y Administración xeral // En el caso de las de docencia las pruebas serán en 2022
Galicia no sólo quiere seguir apostando por fomentar el empleo público y de calidad, sobre todo en tiempos de incertidumbre como los actuales, sino que pretende “rejuvenecer la Administración” autonómica.
Con este objetivo, la oferta de empleo público de la Xunta para este año volverá a ser elevada ya que contemplará 4.300 plazas entre las destinadas a personal sanitario, Administración general y educación, aunque estas últimas no serán convocadas hasta el ejercicio que viene.
Y no son más, sobre todo en sanidad y educación, “porque el Estado no lo permite”, tal y como explicó este jueves el titular del Gobierno autonómico, Alberto Núñez Feijóo, en la habitual rueda de prensa posterior al Consello.
Entrando en detalle, recordó que en la sanidad se volverá a agotar la tasa máxima de reposición autorizada por el Estado (110 %). “Queremos empleo estable, disminuir la concatenación de contratos y dar un mayor empleo con vocación de permanencia porque mejoramos el servicio público, por tanto, nos gustaría sacar más plazas, pero sacamos las que estamos habilitados para sacar”, incidió.
De las 1.215 plazas del ámbito sanitario, 1.203 corresponden a personal estatutario del Sergas: 65 son de personal licenciado sanitario, de las que 60 son de médico de familia; 686 atañen a personal sanitario diplomado, de las que 604 son de enfermería; y 452 para personal de gestión y servicios.
Además, se reservarán también de ese total de plazas 61 para personas con discapacidad física y 25 para personas con discapacidad intelectual. Las restantes 12 corresponden a la OPE de personal sanitario funcionario. “Desde 2012 ofertamos 8.112 plazas en el ámbito del Sergas, todas las que legalmente nos dejan”, esgrimió el de Os Peares.
Para la Administración xeral, el decreto de convocatoria de OPE, que tuvo el visto bueno de UGT y CCOO, asciende a 1.491 plazas, repartidas en 1.006 de libre acceso, a las que podrá acceder por la vía del concurso-oposición cualquier persona que cumpla los requisitos, y dentro de estas, 155 son para el Consorcio de Benestar.
Además, hay 322 para los procesos de promoción interna de los empleados públicos que se llevarán a cabo en convocatorias independientes de las de nuevo ingreso y se desarrollarán también a través del sistema de concurso-oposición. Finalmente, se ofertarán 163 plazas para continuar con la funcionarización del personal laboral fijo. En este caso también se agotará la tasa de reposición impuesta por el Gobierno central.
Por último, Alberto Núñez Feijóo destacó la propuesta de nuevas plazas de educación, que prevé incluir 1.604 plazas a falta de su previa aprobación en la mesa sectorial. Estas pruebas, tal y como explicó, se realizarán el próximo 2022, puesto que este año tendrán lugar los exámenes (ya convocados para junio) de las más de 3.600 aplazadas en el pasado ejercicio a causa de la pandemia.
··· Los cursos de formación para desempleados contarán este año con un presupuesto de 44,3 millones, un 23 % más que en la anterior convocatoria, que irán destinados a organizar 1.100 actividades que estarán a diposición de 16.600 gallegos.
El Consello dio luz verde a la convocatoria de este año, que se adapta a las necesidades generadas por la crisis de la COVID, según explicó Feijóo. El aumento de presupuesto, indicó, permitirá llegar a 5.800 alumnos más a través de 300 cursos adicionales.
··· Además, la Xunta sigue apoyando al sector comercial gallego por las restricciones derivadas de la pandemia y pondrá en marcha, con apertura del plazo de solicitud el 14 de abril, el nuevo Bono Energía Pyme y Comercio, que cuenta con un presupuesto de tres millones. Estos negocios, como especificó el presidente, podrán ahorrar hasta 300.000 euros al año en su factura energética.
Santiago. Los 120.000 edificios con más de 50 años de antigüedad que existen en Galicia deberán pasar una inspección técnica obligatoria con una vigencia de 10 años que, transcurrido ese tiempo, deberá renovarse para comprobar su estado de conservación, el cumplimiento de la normativa sobre accesibilidad y su grado de eficiencia energética. El informe de evaluación del edificio (IAE) funcionará como una suerte de “ITV” como la que deben pasar los coches.
La reunión semanal del Gobierno gallego dio luz verde al decreto por el que se crea el IAE, que será obligatorio para los edificios de tipo residencial de 50 años o más, que deberán figurar en el Rexistro Galego de Informes de Avaliación dos Edificios (Regiae). De cumplir este requisito, del que deberá encargarse “un técnico competente”, quedan exentos aquellos inmuebles con una declaración “firme” de ruina y los que dispongan de un certificado de inspección técnica de edificación (ITE). Estos últimos solo deberán completar la parte del estudio destinada a la accesibilidad y la eficiencia energética, según concreta el Ejecutivo autonómico.
En el caso de edificios catalogados o declarados BIC, el informe de inspección cuenta con una plantilla específica en la que figurará su fecha de inclusión en el catálogo o momento de la declaración, además de un listado sobre la conservación de los elementos protegidos.
El decreto establece seis mecanismos para fijar la edad de un inmueble, que podrá acreditarse a través del certificado final de obra, la licencia de primera ocupación, las escrituras acreditativas de final de obra, la cédula de calificación definitiva como viviendas protegidas, el certificado catastral y por “cualquier otro medio de prueba admisible en derecho o estimación técnica”.
En el caso de los edificios que fueron sometidos a rehabilitación integral, la fecha será estimada a partir del final de las obras de reforma. Para la realización de estos informes, que tendrán que elaborarse en un plazo máximo de un año desde que el edificio cumpla 50 años, el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) habilitará dos aplicaciones informáticas para facilitar estos trámites.