Persiste la brecha salarial: una mujer cobra hasta 5.000 euros menos al año

El 22 de febrero está marcado en el calendario de ‘celebraciones’ como el Día de la Igualdad Salarial, una efeméride que sirve para denunciar que, por ahora, la equidad en los sueldos es todavía una quimera. En Galicia, la brecha salarial entre hombres y mujeres alcanza el 19,3 % de media, lo que significa una diferencia de casi 5.000 euros al año en favor de los trabajadores y en detrimento de las trabajadoras. Pero el dato todavía es peor si se atiende exclusivamente a la empresa privada, donde alcanza el 30,4 %. En el sector público, baja hasta el 6,6 %.

UGT adelantó a este martes su análisis sobre los datos de la “persistente” brecha salarial que, asegura, siguen siendo malos, a pesar de una “pequeña mejora” que el sindicato también pone el valor. Tomando como referencia el año 2019, el último ejercicio con cifras oficiales, la diferencia entre salarios bajó dos puntos (del 21,3 se pasó al 19,3) y es la más baja de los últimos diez años. Una mejoría que el sindicato achaca en parte a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (de un 22,3 % en diciembre de 2018, la mayor en cuatro años) y que, según su análisis, podría continuar gracias a la incidencia en la contratación temporal que tendrá la recién aprobada reforma laboral.

“Las razones detrás de la brecha salarial son múltiples y contundentes, está relacionada con factores más allá de la propia remuneración por el mismo trabajo, aunque este es uno de los fundamentales”, explica el sindicato, que añade otras cuestiones a tener en cuenta: la representación del mercado laboral, el modelo de contratación que soportan las mujeres, que sufren más parcialidad involuntaria, carreras voluntarias menos estables por tener que asumir en muchas ocasiones la conciliación al cien por cien o una mayor representación en sectores más precarizados.

Hay algunos datos incontestables sobre la discriminación. Por ejemplo, el de la retribución por hora trabajada. En este caso, la brecha en Galicia es de 10,1 puntos, 13,40 euros para ellas, frente a 14,91 para ellos, según se refleja en la encuesta anual de estructura salarial del INE de 2019. “Estos datos son muy significativos porque eliminan cualquier distorsión, en relación al modelo de contratación, que se podría utilizar como excusa para justificar salarios más bajos, porque aquí lo que se valora es el pago por hora de trabajo, independientemente de si se está hablando de un contrato a tiempo completo o parcial”, explica UGT.

VIGO REGISTRA LA DIFERENCIA MÁS ACUSADA POR HORA TRABAJADA. El sindicato recoge también datos del Instituto Galego de Estadística (IGE) respecto a la brecha salarial por hora trabajada en las siete grandes ciudades gallegas. La más acusada se registra en Vigo, con un 17,1 %, y le seguirían A Coruña (15,3 %), Santiago (11,2 %), Ferrol (11 %), Pontevedra (8,5 %), Ourense (8 %) y Lugo (2,4 %).

Teniendo en cuenta las retribuciones medias anuales, las mujeres gallegas cobran 4.724 euros menos que los hombres, según el INE, y su salario medio en 2019 fue similar al que percibían los hombres en los años 2007/2008, más de una década atrás, “lo que pone de manifiesto la lenta revalorización del salario femenino”. Pero las mujeres gallegas aún sufren en otras comparativas salariales. Si se compara con el salario medio de España, el suyo es un 8,6 % inferior (19.818 euros frente a 21.682). La diferencia supera el 24 % respecto al País Vasco.

Por modalidad de contratación, en el caso de la indefinida, la brecha es de 20,4 puntos y de 12 en la contratación temporal. En el caso de la jornada a tiempo completo, destaca también UGT, la diferencia se sitúa en el 11,4 y es del 16,5 si es a tiempo parcial. La diferencia salarial entre hombres y mujeres no tiene edad y se registra en todos los tramos, aunque es mayor de 45 años en adelante, llegando al 21 %.

Por nivel de estudios, las mayores brechas se dan en el nivel de educación primaria y en el nivel de licenciaturas o doctorados. En concreto, las mujeres siempre perciben menos salario, superando el 25 % de diferencia, en todos los niveles analizados, salvo en el caso de la diplomatura universitaria o similar, donde la brecha es del 17 %. Aún así, este porcentaje se traduce en 5.451 euros menos al año. En el caso de los estudios primarios, la brecha se dispara al 36,3 % y también es elevada en el caso de licenciaturas, del 28,6 %.

Por otra parte, las estadísticas muestran que el 46,8 % de las mujeres asalariadas tienen ingresos menores o iguales al Salario Mínimo Interprofesional, frente al 32,5 % de los hombres. Si se analizan los salarios más elevados, la situación es inversa: 13.725 hombres tuvieron salarios cinco veces superiores al SMI, frente a 6.506 mujeres.