Recuperan los permisos y sus vis a vis más de tres mil presos en Galicia

Los más de tres mil reclusos que cumplen condena en las cinco cárceles gallegas, Teixeiro, A Lama, Bonxe, Monterroso y Pereiro de Aguiar, también se suman a la desescalada y, aunque para ellos el confinamiento es más que obligatorio, a partir de hoy empezarán a recuperar algunos de los derechos perdidos tras la entrada en vigor del estado de alarma por la pandemia del coronavirus.

Y es que los centros penitenciarios permitirán desde este jueves las comunicaciones ordinarias de los internos y la salidas de permiso y programadas, según una orden del Ministerio del Inte-rior que flexibiliza las restricciones de movilidad y contacto social adoptadas en las cárceles desde el 14 M.

La resolución de Interior, que publicaba ayer el Boletín Oficial del Estado (BOE), trata así de “acomodar el ámbito penitenciario a la nueva situación actual” de reducción gradual de medidas extraordinarias establecidas.

En los penales de nuestra comunidad conviven, según los datos facilitados por Instituciones Penitenciarias correspondientes a esta misma semana, 3.125 personas, de las cuales 2.756 cumplen condena y 389 están en calidad de preventivos; es decir, a la espera de ser juzgados.

En cuanto al reparto por sexo de los internos en las cárceles de Teixeiro, A Lama, Bonxe, Monterroso y Pereiro de Aguiar, los centros de Reinserción Social de Vigo y A Coruña y los de Gestión de Penas y Medidas alternativas de Lugo y Ourense, predominan los varones, que sumaban a finales de marzo 2.985 por 221 mujeres. Desde aquel momento, fueron trasladados a penales de otras comunidades o recuperaron la libertad 143 personas

Los internos clasificados en tercer grado o que tengan aplicado el régimen de flexibilidad y estén destinados en centros de inserción social, secciones abiertas o centros ordinarios, podrán seguir saliendo. También se reanudarán los traslados de los internos cuando sean solicitados por las autoridades judiciales, los traslados por razones sanitarias y los que por “circunstancias regimentales o tratamentales” se requieran.

La publicación de esta orden llega entre los recelos de las organizaciones sindicales, que se oponían a recuperar los permisos de salida y las comunicaciones en locutorio. Además, ven insuficientes los test y mascarillas facilitados y piden medidas como el control de temperatura. Fuentes penitenciarias pusieron en valor las medidas adoptadas que han permitido que se registren 60 positivos entre una población reclusa de 50.000 personas en toda España.

Los sindicatos se oponían a reanudar las comunicaciones en locutorios y restablecer los permisos de salida, tanto extraordinarios como ordinarios previamente autorizados. Temen que se produzcan rebrotes de contagios en las cárceles.

··· En las cinco cárceles gallegas apenas hubo casos positivos por covid-19. A principios de este mes no se había contabilizado ningún preso contagiado y los casos entre los funcionarios se situaban en torno a una docena. Los sindicatos de prisiones lo achacaban al control exhaustivo que se llevó a cabo desde que se declaró la pandemia y a la limitación de movimientos dentro de las propias prisiones: se suspendieron la mayor parte de las actividades comunes además de las salidas al exterior. No obstante, reclaman que se realicen tests o pruebas PCR para detectar posibles casos asintomáticos tanto al personal y a sus familiares más directos como a las personas que cumplen condena.

El Sergas estableció un protocolo de actuación por si se registraban positivos entre los prisioneros que incluía el traslado a un hospital de los casos graves.