SOS en Madrid de un rural maltratado por leyes urbanitas

Miles de profesionales del sector primario se manifestaron este domingo en Madrid --6.000, calculó la Delegación del Gobierno, “millares” según los organizadores– contra las leyes que ponen “zancadillas” al rural, al hacerse desde las urbes y a sus espaldas, sin contar con ellos.

La manifestación, convocada por la asociación para el Desarrollo y Defensa del Mundo Rural, Alma Rural, partió a las 12:00 horas del Ministerio para la Transición Ecológica y para el Reto Demográfico con destino al Ministerio de Agricultura. En su marcha les acompañaron 40 tractores, 50 caballos, varios carros de bueyes y burros.

Entre los participantes están sindicatos gallegos, como Unións Agrarias. “Reivindicamos poder seguir viviendo en nuestros pueblos, con rentas dignas que nos permitan abastecer a la población con productos de extrema calidad y tener unos derechos sanitarios y educativos como el resto de gallegos y españoles”, destacó el secretario xeral de UU.AA., Roberto García.

García afirmó que quieren “seguir cuidando los pueblos, el territorio y el medio ambiente”, pero apunta que para eso “es necesario reforzar la inversión en servicios públicos, recortados durante la crisis económica”, así como “evitar la criminalización de las explotaciones familiares que cuidan de los animales, garantizando su bienestar”.

El sindicato gallego pone además el foco en el cumplimiento de la ley de cadena, “que impide que ningún intermediario pague por debajo de lo que cuesta producir”. Con una labor que les obliga a “trabajar los 365 días del año”, solicitan “tener ingresos para vivir dignamente”. “Estoy seguro de que la inmensa mayoría de los españoles está convencida de que nos lo merecemos”, concluyó el líder de Unións Agrarias.

“Pedimos que se cambien las políticas agrarias, ganaderas y medioambientales que nos están perjudicando, son leyes que vienen de una ideología posiblemente radical y también orientada a un planteamiento que no tiene nada que ver con la vida en el campo. Es como si castigáramos continuamente a las personas que nos traen la comida a casa”, denunció a Europa Press el secretario general de Alma Rural, Carlos Bueno.

Precisó que después de que los ganaderos, agricultores y todos los trabajadores del mundo rural están “alimentando a la ciudad”, ahora se encuentran “zancadillas”.

Por ello, con esta marcha quieren “dar visibilidad” a los problemas del mundo rural. “La agricultura está a punto de morir, están entrando productos de otros países mientras que los nuestros se están quedando en los árboles”, lamentó el líder de Alma Rural.

La ganadería también se ve afectada por muchos problemas, según denunció, como “los ataques del lobo”. “El lobo mata diariamente 60 reses, 21.000 al año, son más de nueve millones de euros que está soportando el propio ganadero”, subrayó.

También destacó la situación de los productores de leche que “están trabajando por debajo del coste” o de la pesca de litoral que “deja de ser rentable” porque cada vez hay menos cupo y tienen que ir a pescar más lejos. Frente a estas circunstancias, Bueno pidió “proteger al productor”.

También criticaron la Ley de Bienestar Animal por“desproporcionada” y por “no tener nada que ver con la vida en el campo”. “Nosotros somos los primeros que consideramos a los animales parte de la familia pero no podemos comparar al caballo con el perro de caza o el perro pastor”, dijo, como también el presidente de la asociación gallega de Caza Mayor y miembro de Alma Rural, Francisco Chan, para quien la Ley nacional de protección animal es “una barbaridad”.

“La caza, la pesca, los agricultores, los ganaderos, los aceituneros dejaron de trabajar para que Madrid, para que el ciudadano urbano, cuyo padre hasta hace dos días era agricultor, recuerde que si el campo no produce, la ciudad no come”, alegó Chan.