Varapalo de la Comisión Europea al arrastre
pesca. La Comisión Europea aprobó este jueves cerrar el acceso de la flota de arrastre a 87 zonas de protegidas en aguas comunitarias del Atlántico Nororiental tras adoptar una norma a la que se oponían España e Irlanda, lo que en la práctica supone vetar la captura de especies en aguas con profundidades superiores a 1.500 metros. La decisión implica prohibir el acceso a la pesca de arrastre a una superficie de 16.419 kilómetros cuadrados de reservas para la protección de ecosistemas marinos vulnerables por debajo de los 400 metros, lo que presenta el 1,16 por ciento de las aguas comunitarias en el Atlántico Nororiental. El veto afecta a los buques equipados con artes de fondo como redes de arrastre de fondo, dragas, redes de enmalle de fondo, palangres de fondo, nasas y almadrabas, y entrará en vigor veinte días tras la publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea.
La conselleira de Pesca, Rosa Quintana, criticó ayer la decisión de la Comisión
Europea que, dijo, “afecta muchísimo” a la flota gallega. A su juicio, es “un acto de mala fe”, por lo que no descarta recurrirlo ante la justicia. Así, Quintana aseguró que esta decisión es “un despropósito” e incluso “un acto de mala fe”, dado que la responsable de Asuntos Marítimos de la Comisión, Charlina Vitcheva, estuvo el pasado mes de julio en Galicia “y se comprometió a estudiar nuevos informes para valorar de nuevo esta propuesta”. Sin embargo, la “sorpresa” fue que se ha tomado esta decisión “sin evaluar las nuevas propuestas y los nuevos informes” y “sin tener en cuenta la repercusión económica que puede tener”, dijo Quintana, que calificó el afectado como “una de las artes de pesca más selectivas”. ECG