El ‘comité de sabios’ quiere cambiar el nombre de la Cidade da Cultura

El complejo del monte Gaiás dejará de llamarse Cidade da Cultura. Aunque la propuesta de rebautizar el proyecto, con la idea de incluir el topónimo del monte en su futura denominación, es sólo una de las ideas que figuran en las conclusiones del foro de personalidades del mundo cultural de Galicia que ayer y anteayer se reunieron en el Palacio de Congresos para debatir sobre el futuro del complejo, la propia conselleira, Ánxela Bugallo, cerraba el encuentro anunciando que su departamento tomará "una decisión en las próximas semanas sobre cual va a ser el proyecto global de la Cidade da Cultura, o como se denomine".

Sin querer precisar si es favorable o no al cambio de denominación, Ánxela Bugallo destacó que es necesario "crear una marca" que favorezca la proyección internacional del complejo. Para los participantes en el foro, Cidade da Cultura es un nombre con "escasa singularidad", y proponen un concurso de ideas para buscar uno más apropiado.

Tanto Bugallo como Antón Reixa, actuando como portavoz de los participantes, destacaron que las recomendaciones y propuestas elaboradas por los representantes del "tejido cultural gallego", son "complementarias" con las aportaciones que hicieron el Consello da Cultura y el Museo do Pobo Galego. Los procesos participativos de este tipo, según se comprometió la conselleira, "van a continuar", tal como reclamaron ayer los agentes culturales reunidos en el foro.

Antón Reixa insistió en que los representantes del tejido cultural no son "expertos", y que se función no es elaborar una relación detallada de usos para la Cidade da Cultura, sino que será necesario hacer "un estudio comparativo de experiencias similares en el mundo", para buscar ejemplos tanto para la gestión como para la programación, y convocar a profesionales, gallegos e internacionales, para que elaboren sus propuestas.

Mientras tanto, Cultura mantiene al cien por cien su plan de trabajo: el "proyecto global" estará listo en octubre, las obras de los dos últimos edificios se retomarán en abril de 2007, y a finales de ese año se terminarán los dos primeros edificios, bilbioteca y archivo, que entrarán en servicio en 2008. El conjunto estará terminado en 2012, y habrá consumido 338 millones de euros.