Irreverencias a precio de oro: 2.500 € por el pregón de Entroido y la música

La noticia sobre el polémico pregón que sirvió para dar el pistoletazo de salida a las fiestas del Entroido, y en el que Carlos Santiago habló del tamaño de los testículos del Apóstol, utilizó la palabra puta para referirse a la Virgen o hizo alusión a prácticas sexuales, como la felación, al mencionar a la Pilarica, causó ayer un gran revuelo en las redes sociales. En este sentido, cientos de internautas se mostraron indignados con la falta de educación y respeto del escritor y dramaturgo. A las muestras de enfado de los internautas se sumaron las de los grupos de la oposición, que coincidieron en el “poco gusto” del discurso y en que algunas cuestiones se deberían evitar.

Muchos de los internautas dejaron constancia de su malestar tanto en la página web de EL CORREO como en los perfiles de las redes sociales, y se preguntaban, en la mayoría de los comentarios, cuánto cobró Carlos Santiago por el monólogo. Lo cierto es que ayer el Ayuntamiento no quiso desvelar exactamente este dato, a pesar de las preguntas de este periódico. Pero la cantidad no debió de ser ni mucho menos modesta, ya que en el presupuesto aprobado en la junta de gobierno figura un gasto de 2.500 euros en el que se incluye el pregón y la actuación musical posterior. Nadie en el pazo de Raxoi quiso especificar ayer qué porcentaje de esta partida estaba destinado al grupo musical y cuánto al pregonero.

Críticas. Todos los grupos de la oposición coincidieron también ayer en que el pregón fue, cuanto menos, poco acertado. En este sentido, Alejandro Sánchez Brunete lamentaba ayer en declaraciones a este diario que algunos no entiendan que se pueda vivir el Carnaval “sin ser grosero ni ofensivo”. El concejal popular añadió además que lo que refleja el discurso pronunciado por Carlos Santiago son “unas grandes carencias para generar un pregón irónico o satírico”. “La verdad es que no es un sentido del humor muy elaborado. Se puede ser ingenioso sin ofender a nadie”, afirmó.

El portavoz del PSOE en Santiago, Paco Reyes, destacó en el programa Compostela en la Onda que “houbo expresións fóra de lugar e entendo que determinadas expresións poidan molestar”. Señaló también que el discurso “incluso foi grosero de cara as mulleres”.

Rubén Cela, portavoz de la agrupación del BNG en Compostela, manifestó, también en el espacio radiofónico de Onda Cero, que “entendo que o Entroido ten que ser un espazo de sátira, pero hai cuestións que se poden evitar”.

La concejala de Turismo, lejos de aceptar las críticas, defendió que en el Carnaval tiene cabida “toda la crítica social posible”.

Discurso reciclado. Lo cierto es que el monólogo en el que Carlos Santiago aparece caracterizado como la figura del Apóstol no es algo que el escritor y dramaturgo haya creado para la ocasión, ni mucho menos, sino un espectáculo que lleva explotando cerca de una década. El propio autor define estas actuaciones en su página web como monólogos “especialmente indicados para eventos políticamente incorrectos y todo tipo de espacios escénicos”. Además, en plataformas como Youtube se encuentran varios vídeos de la representación. Todo esto parece indicar que el espectáculo ofrecido el sábado en la plaza de O Toural no pudo coger por sorpresa a los miembros del gobierno local que, con toda probabilidad, sabían lo que contrataban cuando se pusieron en contacto con el imitador del Apóstol.