Televisión de calidad con el espía natural
El documentalista Federico de la Peña pone su cuño a la primera serie gallega sobre la naturaleza en profundidad//Calidad, rigor y contenido didáctico priman en los cinco capítulos iniciales pensados para cadenas locales
Los documentales brillantes no vienen sólo de fuera. También hay producción solvente made in Galicia. El documentalista pontevedrés Federico de la Peña Santos así lo acaba de atestiguar con la factura de la serie O espía da natureza, uno de los escasísimos trabajos hechos dentro de la comunidad autónoma "en profundidad y con calidad, rigor y contenido didáctico".
Los primeros cinco capítulos de la serie, pensados para las televisiones locales, van más allá de los enfoques "superficiales" que nutren el género en Galicia, basados en la utilización de la mera imagen paisajística o en la práctica del senderismo.
Con una duración de 15 minutos, los episodios están pensados para encajarse en medio del típico magazine televisivo, pero su filosofía parte de la base de que es un material que puede utilizarse como recurso didáctico en colegios o centros culturales.
La serie arranca con el capítulo titulado En busca do mexilón de río. Filmado en el Lérez, uno de los escasos cauces gallegos y de la península ibérica que todavía conserva ejemplares de mejillón autóctono (Margaritífera margaritífera), el documental se adentra en la vida de este invertebrado acuático con gran protección internacional porque sus reducidísimas poblaciones están en vías de extinción. "La captura de un solo ejemplar lleva aparejadas multas de miles de euros", explica De la Peña.
Pero, el trabajo no acaba ahí, sino que da un giro para contrastar esta realidad con la que presenta el río Verdugo, en Pontesampaio, donde está asentado el mejillón invasor Xenostrobus securis. Convertido ya en una auténtica plaga, el naturalista pontevedrés profundiza en el conocimiento de esta especie procedente de Nueva Zelanda, que pudo llegar a Arcade mezclada con crías de ostras, que de forma masiva se cultivan en la ría de Vigo y que tanta fama otorgan a esta localidad costera.
La Serra do Candán centra la segunda entrega. Las Neveiras, antiguas construcciones en las que se acumulaba nieve y cuyo peso la iba transformando en hielo para su distribución posterior en verano en las ciudades gallegas y incluso de Castilla y León, sitúan esta zona como la "principal" fábrica de hielo del noroeste peninsular de hace varios siglos.Su uso médico y para enfriar las bebibas de la gente adinerada marcaban la explotación que tenían en exclusiva lo monjes del monasterio de Aciveiro.
Cando baixa a marea marca otra entrega y explica como sobreviven organismos marinos como mejillones, caracoles o estrellas durante esas seis horas que están expuestos al sol, temperaturas altas, sin agua, o en pozas con agua caliente y muy salada por la evaporación. Al documental filmado en A Costa da Vela y Bueu, le dan continuidad los últimos: uno de molinos de viento y otro de monumentos megalíticos.
Federico de la Peña, documentalista y naturalista pontevedrés
"Más que para vivir, da para sobrevivir""En Galicia el documentalismo tiene poco apoyo", dice Federico de la Peña, prácticamente el único documentalista de naturaleza que vive de su profesión en la comunidad. "Desde hace 18 años hice de mi pasión mi profesión. Yo voy tirando. Más que para vivir da para sobrevivir", apostilla con 49 años, casado y con dos hijos. En esta serie, De la Peña agradece la "suerte" de haber contado con la ayuda del servicio editorial de la Diputación de Pontevedra, que tiene los derechos de emisión para la provincia. Pero, remarca que el compromiso del organismo que preside el popular Rafael Louzán "podrían y deberían" adquirirlo también otras instituciones con más medios. "Galicia tiene una enorme riqueza natural que hoy en día, por desgracia, desconocen la mayoría de los gallegos", apunta en todo caso feliz por haber visto realizado su sueño de una serie de televisión. "Espero que tenga continuidad", suspira.