La lucha por la inclusión de la diversidad desde la Asociación Aspamite

La defensa de la dignidad y derechos de las personas con diversidad funcional es el objetivo de la asociación Aspamite, creada por un grupo de padres y madres de Teo en noviembre del año 1994. Con la ayuda del Concello y el trabajo de sus fundadores, y otros colaboradores que se fueron sumando progresivamente, son ya veintisiete años trabajando para lograr una atención especializada para sus hijos/as u hermanos. Ahora son más de 200 socios que con su aportación anual hacen que el proyecto Aspamite continúe con su labor.

Desde prácticamente sus inicios, la Asociación de Padres con Diversidad Funcional de Teo pertenece a Cogami (Confederación Gallega de Personas con Discapacidad), la cual se encarga de informarles sobre cualquier tema que les pueda afectar así como ayudar en las tareas que llevan a cabo.

En un principio la idea de Aspamite era centrarse en la atención de usuarios del Concello teense, pero con el tiempo se fue ampliando a otros municipios. De esta manera, en la actualidad acogen usuarios de Santiago de Compostela, Boqueixón, Rois, Padrón y A Estrada.

Su domicilio social, situ en Teo, tiene capacidad para 25 usuarios. “Hoy en día el número de usuarios es de 14 en el centro Ocupacional y ocho en el centro de día “, apunta Ángel Javier Morón Pérez, presidente de Aspamite.

SERVICIOS Y ACTIVIDADES. El horario de apertura del centro es de 12:00 a 19:00, con servicio de catering para comedor. “Tenemos un servicio de autobús y furgoneta adaptada que recoge al inicio de jornada y deja a final de la misma a los usuarios en sus paradas correspondientes”, añade.

Para todos ellos ofrecen servicios de atención diurna, ocupacional y terapéutica, orientación y apoyo a las familias y actividades de intervención comunitaria. Dentro de cada uno de estos apartados se desarrollan múltiples actividades (estimulación cognitiva y sensorial, lpsicomotricidad, musicoterapia, expresión plástica, teatro) y talleres (cestería, encuadernación, cocina, alfombras o jardinería, etc.)

Para poder llevar a cabo una buena atención de estas personas cuentan con una plantilla formada por ocho profesionales. Una psicóloga, que a parte de sus funciones educativas, ejerce como directora de los Centros, dos profesoras de taller, una encargada de taller, un terapeuta ocupacional, una administrativa y una cuidadora. “A mayores, tras el reinicio de la actividad después del confinamiento, contamos con la incorporación de una enfermera que es la responsable de los temas higiénicos y sanitarios”, cuenta el presidente.

INICIATIVA “SOMOS CAPACES”. Para poner en valor y dar a conocer el trabajo que realiza la entidad, mantienen contacto con otras instituciones similares y realizan experiencias didácticas como la organización del Concurso de Relatos Curtos en Galego que lleva el lema “Somos Capaces”, dirigido a alumnos de Infantil, Primaria y Secundaria de centros de Galicia. En la entrega de premios al alumnado, los usuarios de la Asociación teense suelen estrenar obra de teatro. Además, con los relatos premiados editan un libro recopilatorio, que ya va por la tercera edición. “Este año, dada la situación que vivimos, trataremos de seguir trabajando en este sentido en las redes sociales”, comenta.

MESES DE PANDEMIA. Aspamite cerró sus puertas el 13 de marzo de 2020 y reanudó la actividad el 7 de septiembre de 2020. Para poder reiniciar y cumplir con la normativa sanitaria que se les exigió a los Centros como este fue necesaria una adaptación para así “garantizar un entorno seguro para los usuarios y el personal”. Para ello se vieron en la obligación de realizar una inversión considerable para la adquisición de mamparas transparentes y mesas individuales para cada usuario, grifos con sensor, felpudos desinfectantes, dispensadores de gel hidroalcohólico con sensor, medidores de temperatura por infrarrojos, adaptación de dos espacios para sala de aislamiento en caso necesario... “Fue complicado ya que durante el periodo de cierre no tuvimos ingresos, pero estamos satisfechos de poder mantener la actividad con la mayor seguridad posible”, confiesa.

LARGO CAMINO HACIA LA INSERCIÓN SOCIAL. Ángel Morón considera que todavía hay mucho camino por recorrer para lograr la inclusión de personas con discapacidades. A diario el equipo profesional de Aspamite trabaja en conseguir potenciar las competencias individuales y de grupo. Desde su creación hasta hoy buscan un reconocimiento a la persona, independientemente de que sus capacidades sean diferentes.