Ribeira cierra con tiritas otro pleno sobre el histórico tema de su callejero
Mariño amenazó con llevar a Cobas al juzgado por acusarle de defender el franquismo
El eterno debate en torno al cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica en Ribeira es más apasionado que apasionante. Y, lejos de servir para conciliar posturas en el marco democrático común, enfrenta del modo más tenso a algunas de sus señorías.
Volvió a ocurrir en el pleno de este lunes, al abordarse la moción con la que el BNG pretendía renombrar las calles dedicadas a Miguel Rodríguez Bautista y Diego Delicado (a quienes la formación califica de “franquistas”) y retirar los títulos de Hijos Adoptivos otorgados en 1952 a José María Rivera de Aguilar (subsecretario de Obras Públicas de 1951 a 1955) y Fernando Suárez Tangil (conde de Vallellano), a los que el Bloque considera “falanxistas” y “colaboradores da ditadura”.
Otra vez, como ocurrió hace un lustro, el PP se opuso (en esta ocasión apoyado por el PBBI), alegando que una sentencia da por cumplida en Ribeira la citada ley, y aludiendo a la “buena consideración” que tanto Delicado “que fue jefe de Correos y Aduanas antes que presidente de la Diputación y procurador en las Cortes franquistas” como Mariño de Rivera “al que muchos recuerdan como buen alcalde”, tienen “entre buena parte de la ciudadanía”.
Vicente Mariño (PBBI) defendió la labor de Rodríguez Bautista como alcalde, lo que llevó a Xosé Vázquez Cobas a acusarle de defender y blanquear el franquismo, ante lo que Mariño amenazó con llevarle a los tribunales.
La moción (apoyada por PSOE y Suma Ribeira) fue rechazada, aunque el alcalde, Manuel Ruiz, se comprometió a revisar los méritos de ambos Hijos Adoptivos. Cobas calificó la votación de “aldraxe á democracia”.
Por lo demás, heridas dialécticas al margen, Herminia Pouso (PBBI) fue objeto de una expulsión telemática, después de que el alcalde le reprochase varias veces que se desviase del debate de otro de los asuntos. Con ella se fue de la sala Mariño, y su grupo se ausentó de la votación.
El pleno aprobó pedir un crédito de 400.000 € para construir un módulo cubierto de atletismo en A Fieiteira. La Xunta aportará 600.000 €.