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Banda Municipal: “Gala do Libro”/ Christoph Prégardien: “Winterreise D. 911” de Schubert, en la Catedral de Mondoñedo

    • 15 may 2021 / 10:56
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    Concierto de la Banda Municipal en el Teatro Principal- 19´00 h.-, con un programa dedicado al “Día das Letras Galegas” –(Gala do Libro)-, y en clave jazzística, en la que destacará la cuerda de saxos, Rocío Hermida-saxo soprano-; Álvaro Iglesias- saxo alto-; Santiago Vidal-saxo tenor- y el saxo barítono Diego García. Woody Herman, entusiasta y seguidor de J.Hodges, había creado un primer grupo conocido como “The First Herd”, en 1939, al que seguirá años después el “Second Herd”, en el que colaborarían los llamados “Four Brothers”, cuyo título dará el tema a la pieza que se interpretará esta tarde y que suponía una sonoridad renovada precisamente en la sección de saxos. El tema había sido compuesto y arreglado por Jimmy Giuffre y el nombre fue idea de Herman en atención a los principales solistas, Stan Getz, Zoot Sims, Herbie Steward y Serge Chaloff. Un tema que resultó una auténtica revolución.

    Gianfranco Gioa, con estudios como saxofonista en el Conservatorio Arcangelo Corelli, de Messina, realizó curiosidades como una versión a su estilo de “La ópera de tres peniques”, de K.Weill, con el saxo Gianfranco Brundo y la soprano Barbara Carreé. La pieza que se elige es “Almost tango”, una de sus composiciones de importancia en su catálogo, en que se sobresalen “Dim Lights”, “Quatour Ghotique”, “Mosaicos”, bastante como encargo de la “OMC” (Orquestra Musica Contemporánea di Palermo). Gioa se había iniciado profesionalmente en 1984 en el “Clarinette Ensemble”, destacando por sus actuaciones para la cadena de la “RAI”, y fue clarinetista al mismo tiempo de la “O.F. Franco Ferrara” y fue miembro fundador de la “O.C. de Palermo”, antes de que en 1995, se incorpore al grupo “Brass”.

    En esa agrupación colaborará con Michael Torke, en una larga gira europea, bajo la dirección de David Alan Miller, aportando el estreno de “Flint”, una experiencia en la que se verán implicados Gunther Schuller, el solista Paolo Fresu, además de una versión recuperada de Gil Evans para Miles Davis, del “Porgy and Bess”, de George Gershwin. del propio Torke, se escuchará “Mai” (Mayo), pieza dedicada a Xela Arias por el galardón literario del año, “Das Letras Galegas”, con la proyección del video que se le dedicará, con un pintura-boceto de Ángeles Garrido Comparada. Michael Torke, reparte sus oficios entre el jazz tradicional y las corrientes minimalistas, idea de un compositor con estudios en la Wilson Elementary School de Wisconsin, graduándose en la Wauwatosa East High School y en la Yale University. Para completar sesión, “Lauther´s- rag” de Christian Dauguet.

    Concierto de postín en las programaciones del “IV Festival Bal y Gay” que nos traslada a la Catedral de Mondoñedo-mañana a las 18’00 h.-, para ofrecernos el “Winterreise D.911” (Viaje de invierno), de F.Schubert, en una de las voces autorizadas, la del tenor Christoph Prégardien, acompañado por el pianista Julius Drake, con quien participó en el “Chopin and his Europe Festival” y otros recitales como ofrecidos en la “Berlin Boulez Saal”, o la “Schubertiade Schwarzenberg”. En otra perspectiva le encontramos con el “Oberon Trío” y recitales acompañado por Franziska Hölscher, Jens-Peter Maintz y Daniel Heide, en el “Festival de Schleswig-Holstein”. Curiosa experiencia es la compartida con su hijo en la serie “Padre e Hijo”, (Julien Prégardien, el pianista Lars Vogt y la “Orchestre Chamber de París”, además del coreógrafo Thieû Nang, trasmitido por “Arte Concert” y celebrado en la Filarmónica parisina. Será el preludio de proyectos compartidos por ambos en el Theâtre Royal de la Monnais, de Bruselas, y con “Anima Aeterna”, en la Kölner Philharmonie .

    El amplio repertorio del tenor, le ha convertido en referencia artística en la que destacan géneros como el oratorio y la ópera, desde el barroco al clasicismo o romanticismo. Roles como “Tamino”, “Almaviva”, “Fenton”, “Don Ottavio”, “Tito”, “Ulisse” o “Idomeneo”. Directores de primer nivel, le tuvieron en sus preferencias: Ken Nagano, R.Chailly, P.Herreweghe, Harnoncourt, Fabio Luisi o Gardiner. En este curso dirigió a “Le Concert Lorraine”, el “Nederlands Kammerkoor” y el Collegium Vocale Gant”, entre otros. Entre sus galardones, el “Clasical Award”, el “Diapason d´Or” o el “Orphée d´Or”, de la Ac. du Disque Lyrique. Grabó con Andreas Staier el “Schwanengesang” y con Michael Gees, “Die Schöne Múllerin”. Otra dimensión a tener en cuenta son las labores docentes en la “Hochschule für Musik und Theatre Zurich” y en la “Köln Ac. für Musik”

    “Winterreise D. 911”, de Schubert, sobre la poética de Wilhelm Müller, si en “Die Schöne Müllerin” la noche asistía a las penas de un joven con el ánimo dolorido, el “Winterreise”, será el símbolo de las frías tinieblas que acumula todos los horrores. Las primeras contarán una historia pero siempre con relación a varias personas (la amada, el cazador, etc..), en este viaje, el héroe sigue contando su historia con una cierta progresión, pero en ésta se sitúa en el pasado y su situación presente es absolutamente estática; el amor ha sido negado y está solo; la noche, el frío del invierno, son otros tantos símbolos de muerte repercutiendo en su amor herido; desde el comienzo de su monólogo, el héroe afirma la imposibilidad de la comunicación, su vida al margen del mundo, y es esta triste constatación, que va a mantenerse sin ningún cambio, la que va a ocupar toda la serie de poemas (los doce primeros encontrados por Schubert y a continuación, los doce siguientes). El “Die Schöne Mullerin”, representaba el drama que va de la esperanza a la desesperanza, mientras que en el “Winterreise”, no concede más que la desesperación más absoluta de un universo donde la esperanza está muerta para siempre.

    La oportunidad de los poemas de Wilhelm Müller, y la cuestión del tema literario podrá debatirse, pero la única evidencia es que el músico los aceptará como buenos y que hay una estrecha colaboración entre los temas propuestos por los poemas y la psicología del compositor, que atravesaba un nuevo período depresivo, en el que los fracasos pesaban más que los éxitos. Una situación en la que esa poética, actuará como un detonante, de la misma forma que el “Cuarteto en Sol”, que compuso en diez días. Todos los íntimos notaron esa personal situación de abatimiento. Spaun y Mayhofer, quedaron impresionados por el taciturno carácter del momento. Para su apreciado Spaun, Schubert trabajaba casi en secreto, sin mostrar a nadie su trabajo, como bajo el peso de una fuerte exigencia interior (podríamos pensar en el Beethoven del ciclo de lieder “An die ferne gelibte”).

    Cuando definitivamente sus allegados conozcan la versión acabada (posiblemente solo la primera parte), quedarán decepcionados y profundamente desorientados, por el dolor contenido en el conjunto de la obra escuchada. El autor dirá para mayor precisión: Estos lieder me han impresionado como no había hecho ninguno de mis lieder anteriores. En el aire queda la posibilidad de que no parezca evidente la intención cíclica en la arquitectura del conjunto de los 24 lieder, sin embargo, el conjunto logra una unidad de manera muy intima y densa, gracias a la voluntad del compositor de traducir ante todo esta idea; si cada lied está compuesto por separado sin un plan general preconcebido, cada uno de ellos se integra en el conjunto por su exigencia de perfección en la traducción de un estado de ánimo que es siempre el mismo. La unidad de la obra es una unidad de andadura, una unidad de clima, algo que comprendieron los fieles oyentes que comprendieron su intención y sensaciones.

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