Asfaltado de la avenida de Lugo para afrontar la fase final de la obra del Camino

La reforma de la avenida de Lugo para acondicionar la entrada del Camino Francés en el casco histórico está entrando ya en la última fase, con el objetivo puesto en que el paso de preferencia peatonal que sustituirá el anterior cruce pueda estar en funcionamiento en torno a las próximas fiestas del Apóstol.

Ayer se anunciaron ya las nuevas restricciones de tráfico que entrarán en vigor a partir de este viernes con motivo del inicio de las labores de asfaltado de la calzada, y que afectarán tanto a la avenida de Lugo como a la de Rodríguez de Viguri, y que se extenderán también al sábado.

En concreto, el Departamento de Tráfico del Ayuntamiento de Santiago informa que desde las tres y media de la tarde del viernes se iniciará el asfaltado de los carriles en sentido bajada, de forma que los vehículos que suban por la avenida de Lugo serán desviados en la rotonda de la rúa de Londres en dirección hacia la de Lisboa.

Asimismo, quienes desciendan por Rodríguez de Viguri en dirección a Concheiros deberán desviarse en la rotonda de la antigua estación de autobuses para circular a través de los carriles de subida entre esta rotonda y la de Concheiros, para desde ahí seguir el recorrido habitual.

Estas modificaciones, que también se repetirán el sábado doce a partir de las ocho de la mañana, supondrán también el corte de la salida de la rúa Monte dos Postes en dirección a Rodríguez de Viguri, así como el acceso desde la rúa de Berlín hacia la zona de Concheiros.

Todas estas restricciones también tendrán su repercusión en las líneas de transporte urbano, que durante la realización de los trabajos suprimirán varias paradas. Serán las líneas 6, 9, 13, C2, C5, C6, C11 y C5, que suprimirán las paradas en Rodríguez de Viguri, rúa Berlín, Monte dos Postes, para las que habrá paradas alternativas en los puntos más próximos posibles.

Los recorridos también experimentarán desvíos a través de la plaza de España y Fontiñas y avenida del Camino Francés, tal y como recoge la web de la empresa municipal Tussa.

Cabe señalar que el tramo inferior de la avenida de Lugo ya ha sido asfaltado, por lo que los trabajos han entrado ya en la recta final y se espera que para finales del próximo mes ya puedan estar terminados en su totalidad, después de los contratiempos que supusieron las restricciones provocadas por la pandemia en las obras.

Seguridad vial. La remodelación de la zona contempla una gran plaza verde de seis mil metros cuadrados de superficie, que llevará el nombre de Egeria, y sustituye al antiguo nudo de tráfico que obligaba a vecinos y peregrinos a circular en zig zag para acceder a la rúa de Concheiros y el casco histórico. De esta forma, el itinerario jacobeo será fácilmente identificable y se mejorará también la seguridad vial.

Además, se ha procedido a la reforma de todos los viales que dan acceso a este nudo, facilitando movimientos más seguros tanto para los conductores como para los peatones, de forma que contará con un nuevo pavimento para que los vehículos, aunque se conserve el mismo número de carriles, eso sí, estrechados en la zona de esta gran plaza verde, reduzcan la velocidad y den preferencia a los caminantes.

El gran espacio verde cenral, que contará con una catenaria de la que se colgará las luminarias, tendrá también su continuidad en las filas de árboles plantadas a lo largo de todo el vial. En total, en las obras de acondicionamiento de esta entrada del Camino, la Consellería de Infraestruturas ha realizado una inversión de unos tres millones de euros, a los que cabe sumar los más de dos que se están empleando en la reurbanización de la rúa de Concheiros, que promueve el Ayuntamiento, pero se financian con cargo la plan de mejora de las entradas del Camino que también se están llevando a cabo en otros puntos de la ciudad como Conxo, San Lázaro, Monte do Gozo, o el polígono del Tambre, con una inversión de más de 12 millones.