El Derby sigue parado mientras se convierte en expositor publicitario

Ya han transcurrido más de dos años desde que el Derby cerrara sus puertas y el establecimiento sigue como aquel día, parado. A pesar de que en junio de 2021 Juan R. Rivera, consejero de Hijos de Rivera, cerró el contrato de alquiler del inmueble para convertir el histórico café-tertulia en uno de sus locales Morriña, la realidad es que poco se ha movido desde aquella.

En este sentido, el proyecto ha superado todos los trámites administrativos, puesto que el pasado 6 de abril, la Comisión Asesora del Patrimonio Histórico informaba favorablemente en relación a la “solicitude de licenza para a Reforma e Rehabilitación do Café Bar Derby, en Rúa das Orfas, nº 29, de Santiago”, tal y como se apuntaba por aquellas fechas en EL CORREO GALLEGO.

Con un presupuesto de ejecución material de 65.000 euros y un plazo de ocho meses, la obra está dentro de los límites marcados para llevarla a cabo, sin embargo, el tiempo pasa y no se aprecia movimiento alguno en el interior.

Asimismo, fruto de esta dejadez, el exterior de este emblema de la capital gallega se ha convertido en expositor para panfletos, dada su céntrica posición en la ciudad, en plena entrada de la zona vieja. Este hecho indigna a los residentes, puesto que no entienden cómo se puede permitir el abandono de esta joya arquitectónica, más todavía después de superar el punto más complicado, que alguien alquilase el local para mantener su esencia.

De este modo, Raxoi confesó a este periódico que se le requirió a la empresa que limpiase la fachada, dado el valor que poseen sus vidrieras, incluidas en el Plan Especial de la Ciudad Histórica. Es más, según la concejal de Ciudad Histórica, Mercedes Rosón, se le ofreció al responsable que lo ejecutase el ente municipal a través de su programa de reparación de puertas y ventanas de la Almendra. Sin embargo, a la vista está que no surtió efecto.

Por todo ello, a pesar de que el inicio o no de las actuaciones, siempre que esté dentro de los plazos, responde a una mera cuestión empresarial, lo cierto es que comienza a plantear una seria duda sobre el futuro de este emblemático espacio de Compostela.

Han pasado ya cinco meses desde que se aceptó la memoria del proyecto, pero no se ha producido movimiento alguno, a pesar de que el alquiler no resulta, sin duda, nada barato. Además, cabe tener en cuenta también todo el dinero que deja de ingresar este negocio, dada la enorme cantidad de visitantes que han pasado por Santiago en estas últimas semanas.

PROYECTO PREVISTO. El plan de apertura incluye respetar al máximo el antiguo Derby, restaurándolo y rehabilitándolo, adaptándolo a la esencia de Morriña, “un nuevo modelo de negocio en el que la cerveza fresca de bodega, sin pasteurizar, es la protagonista, y en el que se ofrece servicio de recogida y entrega a domicilio, gracias a un nuevo formato de botella de 75 centilitros reutilizable que se embotellará directamente en el local”.

La nueva cervecería se sumará a la red de locales que Juan R. Rivera posee en diferentes puntos de España, como Sevilla, Madrid y Barcelona, además de en A Coruña, donde cuenta ya con dos establecimientos adheridos a dicha campaña.

En todo caso, los trabajos de adecuación, cuando se comiencen, tendrán que cumplir los requerimientos de Patrimonio al tratarse de un local histórico (hay varias piezas catalogas que están protegidas, como las vidrieras, el zócalo y la carpintería interior, que tendrán que permanecer intactas) y al estar ubicado en la zona monumental, en una de las mejores ubicaciones de la ciudad (esquina Fonte de Santo Antonio con Orfas y ventanales para ambas calles), obligación que contrasta con el tratamiento que le están dando hasta ahora, dejando que se convierta en un expositor de panfletos.