Fuegos breves pero intensos para cerrar el Apóstol

Breves pero intensos, los fuegos artificiales pusieron el broche de oro, durante la noche de ayer, a las fiestas del Apóstol. A partir de las 23.30 horas empezaron a sonar las explosiones que alertaban a todos los vecinos del inicio del espectáculo pirotécnico.

Duró apenas cinco minutos, aunque el juego de luz y color concentró a muchos compostelanos que no quisieron perderse esta tradicional cita, pese a tener que cumplir con las normas de distanciamiento.

Hace unos días, el Concello recordaba que el espectáculo sería visible desde todos los puntos altos de la ciudad y pedía a los vecinos que se repartiesen entre las zonas del mirador de Cancelas, la Almáciga, el Monte de Deus o el Pedroso, de forma que evitasen las aglomeraciones propias de este acontecimiento. Finalmente, la mayoría de vecinos cumplieron con las recomendaciones, habiéndose registrado mucha menos gente en la calle que en años pasados.

Así, los fuegos fueron lanzados desde la escalinata del campus universitario, lo que obligó a cortar el tráfico peatonal de las zonas cercanas durante prácticamente todo el día. También se vieron afectados el parque infantil de la avenida de Compostela, que se mantuvo cerrado, y las avenidas de A Coruña y Compostela, que a partir de las 22.00 horas estuvieron cortadas al tráfico en el tramo comprendido entre la avenida das Ciencias y la avenida das Burgas.

Finalizan así unas fiestas insólitas, sin atracciones de feria, puestos de dulces ni grandes actuaciones musicales, pero que, en la medida de lo posible, se pudieron adaptar a la nueva realidad vigente a raíz de la crisis del covid.