Fuegos para un máximo de 800 personas en la plaza do Obradoiro

El alcalde de Santiago, Sánchez Bugallo, destacó ayer la necesidad de planificar algún tipo de celebración ciudadana para las Festas do Apóstolo, sobre todo con el objetivo de levantar el ánimo a los vecinos, bastante bajo después de todo el tiempo de confinamiento y por el miedo a la evolución de la situación económica tras la crisis.

Después de que la suspensión de la Semana Santa, del puente del 1 de mayo y la casi segura supresión de las fiestas de la Ascensión, además del perjuicio económico que supone para el turismo, la hostería y el comercio, los ánimos no están precisamente en una fase álgida, independientemente de en la que se encuentre la de desescalada en cada punto.

Así, después de muchos debates sobre la oportunidad de organizar unas fiestas con las calles vacías y los fuegos casi a puerta cerrada, ayer el alcalde declaró en Onda Cero la intención del gobierno local de organizar algún festejo que se adapte a las normas de seguridad, pero que permita que la convocatoria, sobre todo ahora que estamos en vísperas de un Xacobeo, no pase de vacío.

En este sentido, no dudó en afirmar en la entrevista que “sería un disgusto moi grande” que no se pudiera celebrar el Apóstol, y que es necesario “facer algo que reactive a moral dos composteláns” en esas fechas. Con todo, destacó que a pesar de la importancia de estas fiestas para la ciudad, lo prioritario sigue siendo garantizar al máximo la seguridad de todos los asistentes con el cumplimiento de la normativa.

De esta forma, de la misma manera que en otras ciudades costeras se están planteando la compartimentación de las playas para poder disfrutar del próximo verano, también planteó la posibilidad de acotar espacio en el entorno de la Catedral con el objetivo de que algunas personas pudieran verlo en directo y que quienes lo sigan por televisión no se lleven la imagen desoladora de una plaza desierta.

Eso sí, calculó que en el Obradoiro, respetando las distancias establecidas para garantizar la seguridad sanitaria de los asistentes, supondría que solo podría entrar un máximo de 800 personas, un número muy inferior a los 15.000 que se reúnen habitualmente en la noche del 24 de julio.

Estas limitaciones también afectarían a otra de las tradiciones más asentadas durante las fiestas, como son las actuaciones que se desarrollan al otro lado de la Basílica, en la plaza da Quintana, y que suelen contar con una nutrida afluencia de público todos los años.

En este caso, señaló el regidor, en lugar de los espectadores de pie habría que colocar asientos para garantizar la separación de dos metros entre los mismos, lo que calculó que supondría reducir el aforo a un máximo de seiscientos asistentes.

grupos locales. De esta forma, como ya había adelantado hace días, se optará por reformular la programación que se había previsto inicialmente, optando por actuaciones más minoritarias, dando prioridad a grupos locales en lugar de grandes estrellas, algo que también había solicitado esta semana la portavoz del BNG, Goretti Sanmartín.

En días pasados también había anunciado que se planteaban reducir el presupuesto para los actos del mes de julio, que tendrán que ser más limitados, para destinar parte de esos fondos a suplementar la programación de fin de año, cuando se espera que ya se haya superado la situación de crisis.

También recordó que está pendiente la celebración de una Festa da Primavera, para la que afirmó que ya tenían previsto alguna fecha, que se dará a conocer en función de la evolución de la pandemia, aunque destacó que será necesario buscarle también otro nombre, ya que actualmente existe una celebración que se denomina así en el barrio de San Pedro, al igual que un formato que resulte distinto.

··· Uno de los temas importantes que quedan por decidir es el de los fuegos de la noche del día 24. El gobierno local tenía previsto tomar una decisión sobre dónde lanzarlos, después de desechar tanto las cubiertas de la Catedral como las de Raxoi por los daños en el patrimonio.

··· Estaba previsto que para estas fechas se conociera ya la ubicación definitiva de los mismos, y el alcalde había anunciado que barajaban varias opciones y que en torno a la primavera anunciarían la decisión, algo que quedó aplazado por la crisis del covid-19.

··· Ayer explicó también que en los próximos días tiene previsto entrevistarse con los grupos de la oposición para alcanzar con ellos un acuerdo “o máis consensuado posible”, y también tratar de acertar al máximo, a la hora de elegir el nuevo emplazamiento de este espectáculo. La decisión definitiva se conocerá previsiblemente a comienzos de la próxima semana, pues el tiempo se echa encima.