... Cuando empezaron las actividades de baile galego y gaita en el centro cultural Casa Agraria

Hay que remontarse a finales de los años 70 para situar la construcción del local de la Casa Agraria, localizado en la rúa Tabaniscas. Este espacio común para los vecinos tuvo que esperar a los noventa para planear las primeras clases. La música tradicional se convirtió en la auténtica protagonista con lecciones de baile galego, pandereta y danza. También se celebraban reuniones para hacer una sardiñada o un magosto. De hecho, la imagen es de una de esas xuntanzas, en las que no podía faltar el baile. Esa costumbre se mantiene, con festejos de las fiestas patronales o del Carnaval. Al listado de actividades se han añadido las manualidades, las clases de acordeón, el patinaje, el pilates, la informática o las de memoria destinadas a los mayores. Del folclore galego se mantienen las horas para enseñar a tocar la gaita. El edificio, de 800 metros cuadrados, tiene tres pisos. La persona encargada del diseño fue el arquitecto José Otero Pombo. En su interior, se encuentran un salón de actos con aforo para 150 personas, biblioteca, aula de informática, otras tres aulas y jardín.