Kase.O y su banda demuestran en el SonRías Baixas de Bueu que siguen teniendo imán
BUEU (PONTEVEDRA). EP. Kase.O llegó a Bueu (Pontevedra) un año después de lo previsto y lo hizo bajo una premisa diferente a la pensada para que encabezase la edición de 2020 del festival SonRías Baixas. En lugar de cerrar 'El Círculo' con la gira final de su ansiado disco en solitario publicado cuatro años antes, aterrizó este agosto de 2021 en el sur de Galicia para conmemorar el décimo aniversario desde que elevó al rap en español a un nuevo nivel con su trabajo con una banda de músicos de jazz. Y, una década después, demostró que el del zaragozano barrio de La Jota sigue teniendo imán para continuar atrapando desde el fan que lo sigue desde los inicios al que se enganchó más recientemente. Kase confirmó sobre las tablas del escenario del SonRías Baixas, en el que se involucró, descalzo, durante unas dos horas, que peina canas pero eso no le impide conectar con todo aquel que le atienda desde la platea, aunque ahora lo haga sentado en sillas de terraza de chiringuito, obligado a contener las ganas de levantarse y bailar.
En 2021, tiempo de los festivales de la 'separación social' y los coros del público ahogados por las mascarillas que cubren las caras de un público que demostró en Bueu un comportamiento ejemplar; el emcee de Zaragoza caldeó una fría noche de sábado en las Rías Baixas con un concierto en el que repasó más de dos décadas de reinado entre los raperos en lengua castellana. Lo hizo arropado de nuevo por cinco músicos a los que, a comienzos de los años 2010, invitó a 'desaprender' sus rutinas de improvisación en el jazz para hacer algo más sencillo y a la vez muy complejo: acompañar a un rapero para llevar al hip hop a una nueva esfera. La propuesta Kase.O Jazz Magnetism abrió un nuevo abanico de sonidos al rap español y eso celebran este verano recorriendo un grupo de agraciadas localidades.
Una de ellas fue Bueu, única parada de la ronda del décimo aniversario de Kase.O Jazz Magnetism, protagonistas del penúltimo episodio del festival SonRías Baixas, que cierra su edición de 2021 este domingo con la banda catalana La Pegatina para poner la vista ya en 2022, año en el que se espera, de una vez, volver a la ansiada normalidad, también en el calendario de los certámenes musicales del verano.
Tras el lanzamiento de la noche por SonDaRúa, el de Violadores del Verso y su banda se entregaron a su cita con el público gallego para repasar desde los temas más clásicos a los más recientes, esos 'divertimentos' con los que cerró una actuación en la que Kase recordó al fallecido dj JotaMayuscula, invitó a 'guglear' a la poeta Laura Sanz y reconoció desde el escenario que el trabajo de "decirle a la gente que no puede bailar" es verdaderamente ingrato.