La Fundación Jove culmina un año lleno de solidaridad

Priorizar el cuidado y la ayuda a los colectivos más vulnerables resultó ser el objetivo principal de la Fundación Jove a lo largo del pasado año 2020, un período en el que la pandemia cambió los estilos de vida, empeorando los de los sectores en riesgo de exclusión social.

Desde la Fundación María José Jove, como afirman en su Memoria anual con el balance social del pasado año, fueron conscientes de que los destinatarios de sus programas necesitaban una ayuda mayor por las circunstancias que envolvieron a la sociedad.

Desde el ámbito de la salud, la fundación continuó respaldando diferentes proyectos de investigación para mejorar la calidad de vida en la infancia, además de buscar e impulsar la humanización de la atención hospitalaria tanto para menores como familias.

Además, según afirma su presidenta, desde el área de educación seguirá insistiendo en la necesidad de promover en Galicia una educación de carácter inclusivo. Desde la entidad continúan impartiendo talleres para jóvenes con diversidad funcional con el objetivo de dotarles de las herramientas necesarias para una mejor inserción laboral a través de un programa didáctico y completo.

Por otra parte, desde su servicio ocio y tiempo libre saludable y con el objetivo de usar el deporte como una herramienta terapéutica, se volvió a impulsar un año más el programa Esfuerza con el fin de poner en primer plano el deporte adaptado y establecer una alianza necesaria y mejorar la condición física de los participantes.

En esta línea destaca Esfuerza, pionero en España y único en Galicia creado hace once años por la Fundación María José Jove. Desde 2014 cuenta con el apoyo de la fundación La Caixa. Su objetivo es contribuir al desarrollo personal y social de las personas con diversidad funcional para mejorar su autoestima y autosuperación además de crear hábitos saludables.

Así, a raíz de la pandemia, y aunque con un importante bagaje, desde la Fundación Jove aseguran que este pasado año establecieron el arte como otra herramienta terapéutica, bien mediante el fomento de investigaciones en este campo, o bien a través del impulso de programas destinados a personas en riesgo de exclusión social de Galicia, aquellas que están convencidas de que el arte, puede ser un apoyo excepcional para su salud física y mental.

La fundación cuenta con una colección de arte en una Exposición Permanente que alberga 120 obras con las que pretende hacer reflexionar sobre aspectos vinculados al territorio como un espacio a través del que se construye una identidad cultural de pertenencia a un colectivo diferenciado. Además, las nuevas tecnologías también se adentran en el mundo del arte para ofrecer nuevas experiencias sensoriales a través de formatos totalmente nuevos.

En esta línea, destaca el proyecto artístico Mirar ConTacto, la única sala accesible en Galicia que se basa en una propuesta divulgativa destinada a entender el arte desde el ámbito sensorial. Relacionado con el ámbito divulgativo, la educación para la entidad juega un papel determinante al buscar y una formación inclusiva ya que, convencida de que además de niños y jóvenes competentes se necesitan ciudadanos emocionalmente sanos.

Otra de sus áreas, la médica y sanitaria mantuvo entre sus prioridades la prevención e investigación de enfermedades, especialmente aquellas dolencias que afectan a los menores de edad, así como la estancia de éstos en los hospitales.

La Fundación María José Jove continuó este año sus alianzas con otras entidades como la Consellería de Sanidade, la Universidade da Coruña. La Fundación Galega de Medicina Xenómica o el Ayuntamiento de A Coruña en torno siempre a proyectos destinados a mejorar la atención sanitaria de los menores y adolescentes.