Xosé Ramón Barreiro, figura indispensable en la historia reciente de Galicia

los que fueron sus alumnos destacan sus magistrales lecciones durante su etapa de catedrático de Historia de Galicia en la Universidad de Santiago de Compostela. Todo un lujo raramente alcanzable y que solamente se produce cuando personalidades como la de Xosé Ramón Barreiro confluyen en un tiempo que parece necesitarlas. Para Galicia es una figura indispensable y resulta imposible describir toda la enorme labor de una larga vida dedicada enteramente a la investigación, el estudio, el pensamiento y la escritura en todo momento con el horizonte de Galicia como destino. Una labor nunca interrumpida ni en los últimos meses, que se desarrollaba en diferentes frentes, en la actividad diaria en contacto permanente con la extraordinaria biblioteca que poseía, un universo que por sí solo bastaría para permanecer en él, en feliz aislamiento.

Barreiro trasladó al conocimiento público sus hallazgos en forma de ensayos, enseñanzas, conferencias, por medio de libros y publicaciones. En el tiempo de presidente de la RAG, entre los años 2001 y 2010, dejó sentir su impronta e ímpetu en la institución.

La extraordinaria formación que poseía: licenciatura en Filosofía y Letras, doctor en Derecho Canónico por la Universidad Gregoriana de Roma, en Historia por la Universidad de Santiago de Compostela, o la pertenencia a la Real Academia de la Historia, a la Academia de Ciencias y Bellas Artes y Nobles Artes de Córdoba, a la Fundación Rosalía de Castro o al Instituto Padre Sarmiento de Estudios Gallegos, nos conduce a resaltar su categoría intelectual, sabio historiador e investigador.

Toda una larga trayectoria que aportó a la historia moderna de nuestro país grandes descubrimientos que hicieron posible un sustancial avance, interpretados y revisados desde la posición que le otorgaba su erudición y la capacidad de análisis.

Sus investigaciones dieron lugar a libros sobre numerosas materias, por poner algunos breves ejemplos, El carlismo gallego (1976), A Historia de Galicia (1981), Temática Gallega, Historia Política, siglos XIX y XX (1982), Historia de la ciudad de A Coruña (1986), Historia social de la guerra de la Independencia (2009), Murguía (2012),e innumerables artículos en revistas especializadas en donde se podían encontrar aspectos inéditos de los temas tratados.

En esos pasajes de la historia y las ciencias sociales, la personalidad de Emilia Pardo Bazán fue asimismo objeto de su reiterado interés acometiendo desde diferentes planos, la biografía y vida de la escritora, que van desde la exploración de su árbol genealógico a la inmersión en su tiempo histórico, su pensamiento político o la evolución ideológica y amistades, que ahora cabe recordar en este año de homenaje a la autora de Los Pazos de Ulloa.

Conocí a Xosé Ramón Barreiro y a Beatriz López Morán, su mujer, hace más de veinte años y fue a través del arte. En gran manera, y como no podía ser de otro modo, el acercamiento de ellos a esa disciplina se produjo también desde el ámbito de la investigación. Esas experiencias sumadas al examen de documentos, acceso a las fuentes directas, a los libros, a los numerosos archivos, no solamente españoles sino de América del sur, sobre todo argentinos, hicieron posible hallazgos sorprendentes y valiosos.

Otra mujer, esta vez, Maruja Mallo, estaría durante unos cuantos años, como estuvo la Pardo Bazán, en el punto de mira de sus indagaciones y, debido a ese motivo, es preciso hacer mención del libro publicado por la editorial Galaxia, en el año 2016, Maruja Mallo, una memoria en construcción, fruto del trabajo en equipo de Xosé Ramón Barreiro y Beatriz López Morán, que aportó una visión renovada y ampliada aunque no del todo desconocida para unos pocos y ajustada a aspectos de la realidad de la vida de la artista en América y, en este caso, la memoria que denominaron “ en construcción”, porque una biografía para un historiador es un elemento móvil y sujeto a las variaciones que proporcionan las investigaciones y conclusiones.

Se sustentaba en las pesquisas llevadas a cabo en Buenos Aires, en circuitos reales y fidedignos, procedentes en una buena parte del círculo del exilio español y gallego, escenario que Barreiro conoció con creces a lo largo de tantos años de inmersión en aquellos núcleos .

Con Beatriz López Morán, historiadora y catedrática, Barreiro reflejó una vez más, con su proverbial sentido de la historia, un certero análisis plasmado con su acostumbrado y experimentado juicio crítico.