La soprano Leonor Bonilla, “Premio Ópera XXI”, en la ópera de José de Nebra:”Vendado es amor, no es ciego”
Soprano recientemente galardonada en el “Premio Ópera XXI”, como mejor cantante joven, la sevillana Leonor Bonilla, ocupó el rol de “Anquises” de la zarzuela barroca “Vendado es amor, no es ciego” de José de Nebra, que se ofreció este fin de semana, bajo la dirección renovadora con instrumentos de época de Alberto Miguélez Rouco. Un premio que también compartieron la soprano Sondra Radvanovsky por su interpretación de “Luisa Miller”, de G.Verdi; el director Nicola Luisotti, por “Turandot”, de G.Puccini; Cristof Loy, en la dirección escénica de “Capriccio”, de Richard Strauss, en una convocatoria firmada por la “Asociación de Teatros, Festivales y Temporadas Estables de Óperas de España”. Un jurado que estuvo integrado por Eva Sandoval-“RNE”-; Jesús Ruíz Mantilla- “El País”-; Maricel Chavarría- “La Vanguardia”-; Gonzalo Alonso- “La Razón”-; José Luís Jiménez-“ABC”- y por el especialista de la publicación especializada “Platea Magazine” , Alejandro Martínez , además del director de la revista “Ópera Actual, Fernando Sans Rivière. En la relación, se incluyeron críticos internacionales de prestigio: Richard Martet- “Ópera Magazine”- , Victoria Stapells, compañera de labores de Arturo Reverter, quien representaba a “Ópera Magazine UK.”; las deliberaciones de Oriol Aguilè, Presidente de “Ópera XXI” y director del Festival Castell de Peralada; Andrés Rodríguez- Vicepresidente de la “OLA”, Ópera Latinoamericana; José Monforte- Secretario de la As. y director del Palau de les Arts Reina Sofía, de Valencia. Nieves Pascual, comparecía como coordinadora de los premios.
Los méritos adquiridos por la soprano Leonor Bonilla, en calidad de mejor cantante joven, venían avalados por su interpretación en “Lucia di Lamermoor”, de G.Donizetti, título que inauguraba le temporada de 2018/9 el Teatro de la Maestranza, de su Sevilla natal, dirigida entonces por Renato Balsadonna, sobre una puesta escénica de Filippo Sanjust. En diciembre de 2018, se presentaría en la temporada de ópera de Tenerife, en el apetecible papel de la “Contessa Foleville”, propio para el despliegue de recursos humorísticos, de la curiosa cantata escénica/opera “”Il Viaggio de Reims”, del insigne “Cisne de Pesaro”, Gioacchino Rossini. A la batuta, Stefania Bonfadelli y en el medio escénico, Yi Chen Lin. En enero de 2019, fue “Euridice”, rol de suma exigencia del “Orfeo ed Euridice” de C.W.Gluck, para el Teatro Villamarta de Jerez (Cádiz), dirigido por Carlos Aragón, quien fue asistido en la parte escénica por Rafael Rodríguez Villalobos.. El paso siguiente, será con “Capriccio”, de Richard Strauss, su presentación en el Teatro Real de Madrid.
La tendremos pues en el rol de “Anquises” de “Vendado es amor, no es ciego”, de José de Nebra, compositor que dedicó su vida a los géneros sacros, la música instrumental para la corte y ya en su madurez, a estas formas de la zarzuela barroca, que poco a poco, comienzan a recuperarse y para ejemplo, el registro para “Glossa”, dirigido por Alberto Miguélez Rouco y el grupo especializado “Los Elementos”, con excelente acogida por la crítica especializada. La soprano, participará en las próximas convocatorias del Teatre del Liceu, de Barcelona, concretamente en el “Don Giovanni” mozartiano. La cantante en sus años de tanteo, había probado la posibilidad de probar con la danza, en el “Conservatorio Profesional de Sevilla Cristóbal de Morales”, asistiendo al aula de Esperanza Melguizo. La voz pudo en este reto desde pronto, y para ello resulto fundamental el “Primer Premio Especial del Público”, en el Certamen de Nuevas Voces Ciudad de Sevilla; un Tercer Premio, en el “Concurso Internacional Flaviano Labò”, de Piacenza; el Premio del Público del “Concurso Montserrat Caballé”; el Primero del “Concurso Ciudad de Logroño”; el Tercero, con el añadido dl concedido del público en el “VI Concurso Internacional de Canto Alfredo Kraus y el recibido en el “LV del Concurso Internacional de Canto Tenor Viñes” . También destacan los dedicados a la zarzuela, bajo la égida de Plácido Domingo, con un segundo a la mejor cantante española.
En su carrera profesional, interpretó roles diverso en cuanto a óperas, oratorios o zarzuelas: “Salomon”, de G.F.Haendel; la “Misa Brevis”, de J.Haydn; la mentada “Contessa Foleville”, de “Il Viaggio a Reims”; “Iza”, de la opereta “La Grande Duchesse de Geroldstein”, de Jacques Offenbach; “Nanetta”, del Falstaff” y “Gilda”, de “Rigoletto”, de G. Verdi, en Génova; “Capriccio”, de Richard Strauss, en el Teatro Real, de Madrid; “Marina”, de Arrieta, en el Teatro de La Zarzuela; “Mussetta” , de “La Bohème”, de Puccini, en Tenerife; “Fiorella”, de “Il turco in Italia”, de Rossini, entre Piacenza, Ravena y Modena; “Clorinda”, de “La Cenerentola” o “Servilia”, de “Laclemenza di Tito”, de Mozart, en Valladolid. La infrecuente “Le Nozze di Teti y di Peleo”, un curioso Rossini, para el “Festival Rossini in Wildbad”, en Alemania; “Francesca da Rimini”, en el Festival Giglio Sohowa” de Kawaski; y como embajada cultural, una “Doña Francisquita”, de Amadeo Vives, en el Teatro de Ópera de Lausanne. Puestos en zarzuela, otros títulos como “Agua, azucarillos y aguardiente”, en el papel coqueto de “Asia”. También para el Teatro de La Maestranza, la cantata “Carmina Burana”, de Karl Orff.