Santiago
+15° C
Actualizado
sábado, 10 febrero 2024
18:07
h

No conocen la lealtad

    LA definición del concepto lealtad es clara: “Cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien”. Sin ser leal a los valores y principios de vida personales, difícilmente se puede tener lealtad a instituciones, símbolos o personas.

    En la amistad, la lealtad no precisa un compromiso explícito; los hechos la demuestran en cada momento; sin embargo, para el ejercicio de ciertos cargos públicos se exige un compromiso categórico de lealtad, mediante una fórmula ritual clara.

    El texto para los ministros es el siguiente: “Prometo cumplir fielmente las obligaciones del cargo con lealtad al rey, de guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado y guardar secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros”.

    Esa prometida fidelidad surge de la adhesión sin condiciones a unos valores, convicciones, normas y símbolos.

    A la vista de ciertos comportamientos, es lícito pensar que algunos de los ministros del Gobierno de España no valoraron el contenido de la frase ritual que pronunciaban porque carecían del propósito de cumplirlo.

    ¿Qué denominación debería recibir quien promete en falso? Seguramente que la primera palabra que nos viene a la mente es perjuro; sin embargo, dado que no juraron, no sería aplicable, aunque sí las de infiel, desleal o felón.

    Resulta imposible aventurar la intencionalidad de las personas, pero a través de su comportamiento sí podemos vislumbrarla: no hacer guardar la Constitución a quienes profanan símbolos e instituciones, hasta el punto de promover la despenalización de las injurias a la Corona y los ultrajes a España; ataques al poder judicial con una clara intencionalidad de condicionar sus decisiones; tibia defensa de la unidad de España, al apoyar la petición de referéndum sobre el derecho a decidir; campaña pertinaz contra la Monarquía, atribuyendo al rey falta de neutralidad. Seguro lector, que usted puede añadir otras deslealtades a esta lista.

    Las manifestaciones a las que me he referido han sido hechas por miembros del Gobierno, actuando como miembros del Gobierno, que prometieron “...cumplir y hacer cumplir....”.

    Hablan siempre como si estuvieran en un mitin dirigiéndose a los suyos –con el entrecejo y la frente arrugada, manos en los bolsillos, mangas remangadas y gesto altivo–, con olvido de que forman parte del Gobierno de España.

    Les viene al pelo la frase de Raimundo Lulio “El que es leal eleva su mira-
    da con humildad, y el que es desleal,
    con soberbia”.

    24 oct 2020 / 00:10
    • Ver comentarios
    Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
    TEMAS
    Tema marcado como favorito
    Selecciona los que más te interesen y verás todas las noticias relacionadas con ellos en Mi Correo Gallego.