Santiago
+15° C
Actualizado
martes, 23 abril 2024
16:11
h

Pensiones: lo cotizado y lo cobrado de jubilación

    ES conocido el aforismo que reza que las mentiras son de tres clases: las pequeñas, las grandes y las estadísticas. Cuando alguien quiere justificar una mentira echa mano de las estadísticas en donde se relaciona falsamente dos cosas ciertas, que no tienen nada que ver entre sí, aunque ambas coincidan temporoespacialmente.

    Una que se dice todos los años es sobre las pensiones. Todos recordamos haber leído que “los gallegos reciben las pensiones más bajas del Estado”, o “las pensiones más bajas se cobran en Extremadura y Galicia”. Ambas cosas son verdad, pero no tienen relación alguna entre sí. En España la pensión que se cobra, independientemente de en donde se viva, está directamente relacionada con lo que se haya cotizado. Otra cosa es que en algunos sitios haya más jubilados, que por haber cobrado menos durante su vida laboral, hayan cotizado menos y por lo tanto perciben una pensión más baja. Pero lo cierto es que un jubilado de Santiago y otro de Barcelona, si han cotizado lo mismo y durante el mismo tiempo, cobran igual. El Estado no pretende penalizar a los gallegos y favorecer a los catalanes en esto.

    Ahora he visto otra mentira tremenda relacionada con las pensiones y que echa mano de las estadísticas. Estos días se puede leer en muchos medios que “cada pensionista recibe 1,74 euros por cada euro cotizado”. Puede que echando la media de todos los pensionistas, mezclando todas las pensiones, salga esa cifra. Vamos a darla por buena como media global. Pero para saber la realidad, hay que hacerlo por grupos. Uno de los grupos puede ser el de los que cobran la pensión mínima. A lo mejor dado que durante los últimos años se ha aumentado la pensión mínima y no la cotización (al menos proporcionalmente) puede darse que en este grupo, los pensionistas cobren incluso más de dos euros por cada uno que cotizaron.

    Si por el contrario, agrupamos a los que cobran la pensión máxima, puede ser que lo cotizado sea bastante mayor de lo que se cobra. Para los que no lo sepan, la pensión máxima está limitada a una determinada cantidad por ley, de tal manera que si aplicando la regla vigente a una persona le sale a cobrar más de la cantidad fijada como pensión máxima, pierde el excedente, que se supone va a suplementar las mínimas.

    Hay casos más claros. Hay personas que han sido obligados a cotizar dos veces, porque trabajaron simultáneamente en dos sitios. Esos cobrarán una sola pensión. Vamos a suponer que un sujeto trabaja durante 35 años en algo y simultáneamente otros 25 en otro. En ambos trabajos cotiza. Es lo mismo que si hubiera trabajado y cotizado durante 60 años en una sola ocupación. Se le cuentan solamente 35 y cobra hasta un tope independiente de lo que haya cotizado.

    Todo esto es posible por el sistema de pensiones que tenemos en España (y en otros países), que es el llamado de reparto. Consiste en que los trabajadores y las empresas cotizan, pero no para la jubilación del trabajador cotizante, si no para los que están jubilados en ese momento.

    Naturalmente con la esperanza de que cuando se jubile este trabajador haya otros que coticen para pagarle la jubilación a él. Puede darse el caso de que en un momento dado no haya bastantes personas trabajando para pagar a los jubilados. Entonces habrá que echar mano de préstamos o de los impuestos generales y por supuesto a bajar las pensiones, que es lo que –seguro– están pensando en el Gobierno.

    El sistema de pensiones de reparto está basado en la solidaridad intergeneracional, puesto que no se cotiza para uno, si no para los que ya están jubilados. El otro sistema de pensiones que hay es el llamado de capitalización, en donde el trabajador cotiza en un fondo para cobrar de él cuando se jubile según haya aportado.

    ¿Se acuerdan del tremendo lío que se montó con lo del Fórum Filatélico? Para los que no se acuerden consistía en una compañía que captaba socios para el negocio de los sellos. El problema es que los intereses que les pagaban a los primeros que se apuntaron provenía, no de las ganancias, si no de la aportación de los siguientes que se hacían socios. Llegó un momento en que se quedaron sin fondos porque captaban menos gente. Eso es lo que se llama un fraude piramidal. Las jubilaciones basadas en el sistema de reparto, es una cosa parecida. Si no hay bastantes trabajadores activos, no se recolecta lo bastante para pagar las pensiones.

    28 ago 2020 / 00:30
    • Ver comentarios
    Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
    Tema marcado como favorito