El Gobierno quiere juzgar a Puigdemont en España
Montero se desmarca de las afirmaciones de Belarra, que aboga por que el expresidente pueda volver libre
La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, se desmarcó este jueves de las declaraciones realizadas por la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, al afirmar que “el interés del Gobierno es que Puigdemont pueda ser traído a España y pueda ser juzgado, como ha dicho siempre”.
Previamente, la ministra Belarra había defendido el regreso a España del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, huido en Bélgica, y que los independentistas puedan plantear en la mesa de diálogo el autogobierno y un referéndum pactado porque lo ve “enormemente legítimo”, según informa Europa Press.
Belarra defendió la vuelta los exconsellers Clara Ponsatí y Toni Comín, porque supondría, en su opinión, acabar con la judicialización: “Que ellos puedan regresar es normal, no es normal que no estén en España”.
A pregunta de los periodistas, Montero insistió en que el interés del Gobierno es que Puigdemont “responda ante la justicia frente a aquellos acontecimientos desgraciados que vivimos hace unos años en los que nunca respondió ante los tribunales”.
Sobre la reforma del Código Penal, manifestó que el Ministerio de Justicia “ya ha contestado en varias ocasiones que está trabajando en esa reforma, no sólo en la parte que tiene que ver con la homologación a nivel europeo de los delitos de rebelión y sedición”.
Añadió que “ya sabe que el ordenamiento jurídico español data del siglo pasado y que está absolutamente fuera del contexto de lo que son las democracias desarrolladas en el marco de los países vecinos”.
Dijo que la idea es “homologar ese delito al resto de los que existen actualmente en los códigos penales”.
La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, aseguró que Puigdemont debe responder por el procés.
Barcelona. Un documento incautado el año pasado por la Guardia Civil al exconseller de ERC Xavier Vendrell planteaba la vía unilateral para alcanzar la independencia catalana, si no hay referéndum pactado, así como aprovechar la mesa de diálogo para “enfrentar Gobierno y Estado” y “debilitar al Estado con la contracción económica”.
Así consta en un documento, al que ha tenido acceso Efe, que el instituto armado intervino en el dispositivo móvil de Vendrell cuando en octubre fue detenido en el marco de la última fase de la operación Volhov, que investiga a miembros del “estado mayor” que organizó el 1-O por tráfico de influencias y desvío de fondos al procés.
El esquema, en el que no consta fecha ni autor, resume una estrategia independentista con iniciativas divididas en tres etapas denominadas Prepararnos, Votar y Culminar, en la última de las cuales se prevé convocar un referéndum unilateral y proclamar la República si no es posible una votación pactada ni la comunidad internacional interviene para “imponerlo”.
La hoja de ruta apuesta por “acumular fuerzas” ampliando la base social de la que disponen en la actualidad ERC y JxCat, utilizando la mesa de diálogo con el Gobierno central para “abrir los ojos de más catalanes”, aprovechar la situación económica para convencerles “de los beneficios de la República” y “confrontar al Estado en la calle defendiendo el Parlament y las instituciones”. Efe