Borrell fija como prioridad el embargo al petróleo ruso pero sin decir cuándo será

Santiago. El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, se marcó este lunes como objetivo un embargo al petróleo ruso como próxima sanción en represalia a la guerra en Ucrania, que entró en una nueva fase con el recrudecimiento del conflicto en el Donbás. No obstante, más allá de sus intenciones y palabras, por el momento no desveló los plazos en los que se produciría esa ruptura total con Rusia con relación a esta materia energética de la que tanto dependen ciertos países europeos.

“Es importante comenzar por el petróleo, que representa una gran factura y es fácil de reemplazar”, señaló en rueda de prensa desde Luxemburgo, tras la reunión de ministros de Exteriores que sirvió para lanzar este debate. Según indicó, la UE pagó cuatro veces más el año pasado por el suministro de crudo que de gas, unos 80.000 millones frente a 20.000 millones, por lo que se fijó el petróleo como la próxima meta en la espiral de sanciones de la UE, una vez la Comisión Europea ya trabaja en otro paquete de restricciones después de las primeras sanciones al sector energético (al carbón) la pasada semana.

“De momento no hemos llegado a cerrar un método colectivo vinculante, pero cada uno está tomando medidas por su lado y tienen planes para acabar con esa dependencia”, comentó el Alto Representante, poniendo en valor el compromiso de los socios europeos para dar pasos conjuntos en esta dirección.

En todo caso, ahondó en que el golpe dentro de la UE es “asimétrico” y los Veintisiete deberán trabajar con solidaridad. “Los temas energéticos afectan más al centro de Europa que a los países más occidentales”, apuntó al respecto, diciendo que “es un ‘shock’ puramente asimétrico”. “Se tiene que combinar la solidaridad y la unidad”, agregó.

En este contexto, Borrell explicó tras el encuentro con los ministros europeos de Exteriores que “todos” los estados miembros se han concienciado del “riesgo” que entraña la dependencia del suministro ruso y de que es preciso un esfuerzo para hacer frente a esta debilidad.

LOS ATAQUES SEGUIRÁN LLEGANDO “CON O SIN SANCIONES”.

Pese al convencimiento de que el embargo europeo al petróleo ruso debe llegar, el jefe de la diplomacia europea prefirió no establecer plazos o presionar a las naciones europeas para aplicar esa medida contra Rusia, al señalar que la guerra va a seguir las próximas semanas “con o sin sanciones”.

Las mismas “tienen efecto a largo plazo”, resaltó, subrayando que la ofensiva sucederá independientemente de si la UE adquiere gas ruso. “Si cierras el grifo del gas ruso, no tiene efecto inmediato. Lo que cuenta ahora es la ayuda que prestamos a Ucrania”, añadió además.

A falta de saber cuando se aplicará esta drástica medida, los Veintisiete han abordado por primera vez la opción de ir más allá en sus castigos contra la energía rusa, un tema que en Bruselas consideran inevitable pero en el que el bloque corre riesgo de romper la unidad que se ha mantenido hasta ahora en su respuesta a la agresión rusa.

Entre los países más reticentes a llevarla a la práctica destacan Alemania y Austria, que rechazan cortar de forma inmediata el suministro, y Hungría, que ya amenazó con vetar cualquier embargo energético aduciendo su interés nacional.

LA INVASIÓN RUSA: FRACASO Y HORROR. Durante la reunión en Luxemburgo, los ministros de Exteriores analizaron la evolución del conflicto en el este de Europa, que en palabras del jefe de la diplomacia se resume en “fracaso y horror”.

A ojos de Borrell, Moscú ha fracasado en sus objetivos militares, algo que ha quedado a las claras con la retirada de Kiev y otras grandes ciudades para reagruparse y centrar sus esfuerzos al este del país.

En este contexto, denunció que las tropas rusas dejan “horror” a su paso por Ucrania y ha insistido en que la situación solo hace que la UE refuerce el apoyo a Kiev para que pueda luchar la guerra contra los invasores rusos. “Mariúpol es una ciudad mártir, pero lo va a pasar en el este de Ucrania nos hace apoyarles más”, insistió asimismo.

También subrayó que la UE se prepara para una dura ofensiva rusa en el Donbás en donde prevé que Rusia actúe “como una apisonadora causando víctimas civiles”. Sobre ello, dijo que los países del bloque apoyan el envío de material bélico y muestra de ello es la aprobación de la tercera tanda de 500 millones para subvencionar el suministro militar a Kiev a través del Mecanismo de Paz Europeo, pese a que de forma bilateral Hungría y Bulgaria no han aportado ayuda. R. P. / E. P.