Moncloa anima a los partidos catalanes a conseguir un Govern “cuanto antes”

La ministra portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, aseguró ayer que “respetarán y trabajarán” con el Ejecutivo que surja en Cataluña y animó a los partidos a que lleguen a un acuerdo cuanto antes, para resolver con “lealtad institucional” los problemas que tiene la comunidad.

Apuntó que ahora es el turno de las diferentes formaciones catalanas, a las que corresponde la constitución del nuevo Gobierno, y que el Ejecutivo del que ella forma parte “respetará cualquier acuerdo”, ya que su propósito es “mantener una relación de lealtad, desde el diálogo y el reencuentro”, para que Cataluña “supere el conflicto de convivencia que perdura desde hace ya bastante tiempo”.

Se mostró dispuesta a abordar los otros retos que también tiene la comunidad, con “independencia del color político” del Gobierno que resulte de los posibles pactos.

Respecto a si el resultado electoral iba a cambiar las relaciones con ERC, la vicepresidenta explicó que serán sus “compañeros” catalanes, el partido ganador de las elecciones autonómicas, los que establecerán “las líneas de trabajo”.

“A nosotros –continuó– nos toca trabajar por las relaciones reales entre el Gobierno de España y el de Cataluña, intentar que la comunidad salga de una situación de desencuentro en el espacio interior de la convivencia en Cataluña”, porque “las urnas han hablado” y hay que “respetar los tiempo”.

Reconoció que ERC es un grupo parlamentario que “habitualmente nos apoya y acompaña y trataremos de cuidar nuestras relaciones”, al contar solo con 155 escaños en el Congreso, por lo que su trabajo es el “diálogo y escuchar”, para sacar adelante la agenda.

Precisamente, y en relación con la formación de un nuevo Govern, el equipo negociador designado por ERC para recabar los apoyos necesarios que permitan a Pere Aragonès convertirse en el nuevo presidente de la Generalitat, empezará próximamente las reuniones con CUP, JxCat y comunes en busca de una investidura “rápida”, a la que tampoco renuncia el socialista Salvador Illa, ganador del 14-F.

Socialistas y republicanos, que empataron a 33 escaños con una diferencia de casi 50.000 votos en favor del PSC, defienden públicamente su derecho a postularse para la investidura: Illa por ser vencedor y Aragonès por tener más posibilidades de lograr una mayoría absoluta gracias a los votos de los independentistas de Junts y CUP, a los que quiere sumar los comunes.

ERC designó el lunes a última hora a su equipo negociador, formado por Sergi Sabrià, Marta Vilalta, Josep Maria Jové y Laura Vilagrà.

Aunque aún está por concretar dónde y cuándo, ya se sabe que la primera reunión de los republicanos será con la CUP, cuyos nueve escaños son decisivos para sumar una mayoría independentista.

Los número uno y dos de los cuperos, Dolors Sabater y Carles Riera, han abierto la puerta a entrar en el Govern, pero lo han ligado a cuatro compromisos: “amnistía y fin de la represión”, “autodeterminación vinculante”, “plan de choque de rescate social” y “transición ecológica”.

En paralelo a la negociación con ERC, la formación anticapitalista contactará con entidades y movimientos sociales para incorporar algunas de sus demandas, y también celebrarán un consejo político el 27 de febrero para “hacer balance”.

Una vez se haya reunido con la CUP, Aragonès se citará por separado con Junts y con los comunes para tratar de deshacer los vetos cruzados entre Laura Borràs, que quiere un Govern netamente independentista, y Jèssica Albiach, que se niega a pactar con la “derecha” y aboga por un tripartito de izquierdas que incluya al PSC.

Un PSC que insiste en que luchará por la presidencia ajeno a la aritmética parlamentaria, que dice que eso es harto improbable sin el apoyo o abstención de alguna de las fuerzas independentistas.

Illa culminó ayer una primera ronda de contactos telefónica –a la que seguirá otra presencial y discreta– con todos los partidos catalanes, excepto Vox, para informarles de que se postulará a la investidura.

Según fuentes socialistas, Illa ha trasladado al resto de dirigentes que, a su juicio, los resultados del 14F son “claros”, con el PSC como el primer partido de Cataluña, y que “ha habido un voto a favor del diálogo y el reencuentro”.

Sin embargo, el presidente de ERC, Oriol Junqueras, instó ayer a JxCat y a los comunes a que “dejen de pelearse y den apoyo al president Pere Aragonès”, puesto que dijo que Cataluña necesita de una “presidencia efectiva” lo más pronto posible.

En declaraciones a RAC1 recogidas por Efe, Junqueras remarcó la “voluntad” de ERC de pactar el próximo gobierno catalán con JxCat, CUP y comunes, si bien los primeros y los terceros se siguen descartando entre sí como socios.

“Compartimos la amnistía y el referéndum y la voluntad de salir de la crisis económica y la pandemia”, dijo Junqueras, quien defendió que el resultado de las elecciones “exige mayorías amplias” que encaren la legislatura que ahora comienza.

Por otra parte, sostuvo que en el eventual acuerdo de gobierno que se alcance se deberán consensuar ya “unos principios básicos de política presupuestaria”.

Insistió en afirmar que ERC es “incompatible” con el PSC: “Son los dos partidos más antagónicos que hay en Cataluña”, aseveró.

Como diferencia respecto a los tripartitos habidos entre 2003 y 2010, en los que ERC compartió Govern con los socialistas, indicó que en aquel momento el PSC no se había “manifestado con la extrema derecha” ni había “aplaudido” la cárcel de los líderes independentistas.

Añadió que “los socialistas de buena fe y comprometidos de verdad con el país, sus ideas y su acción política” abandonaron el PSC y ahora están en ERC, como es el caso de Ernest Maragall o de Carles Castillo.

Respecto al recurso de la Fiscalía contra la concesión del tercer grado penitenciario a los presos independentistas, entre quienes se cuenta él mismo, apuntó: “Cada vez que ganamos en las urnas la Fiscalía, que tiene sus opciones políticas que pierden, nos encierra en la cárcel”.

Por su parte, la CUP dejó ayer todas las puertas abiertas de cara a eventuales pactos poselectorales con ERC, JxCat o los comunes, siempre que estos pivoten sobre cuatro ejes: “amnistía y fin de la represión”; “autodeterminación vinculante”; “plan de choque de rescate social”; y transición ecológica.

Desde la sede de la candidatura anticapitalista comparecieron en rueda de prensa la cabeza de cartel del 14F, Dolors Sabater, y su número dos, Carles Riera.

“No nos preocupa tanto el quién, sino el para hacer qué y de qué manera. Lo que condicionará nuestra decisión es para hacer qué y cómo hacerlo: es la clave”, dijo Sabater.

Así, confirmó que ERC les había propuesto mantener una reunión, todavía no concretada pero que se celebrará “próximamente”, al tiempo que dijo que ha “dejado claro” al PSC que en ningún caso investiría como president a Salvador Illa.

También mostró la voluntad de la CUP de abrir una ronda de consultas con entidades sociales para “recoger propuestas y planteamientos”, puesto que el objetivo es “condicionar la legislatura para que haya un cambio de rumbo”.