Sánchez pide al Partido Popular que no meta a Vox en Castilla y León
Insiste en un acuerdo que impida la entrada de la ultraderecha en un Ejecutivo autonómico
Madrid. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, apremió al PP a que “deje de una vez por todas de coquetear con la ultraderecha” y le reiteró su oferta de romper con Vox en todos los territorios donde tiene pactos a cambio de facilitar un gobierno en solitario de Alfonso Fernández Mañueco en Castilla y León.
A cinco días de constituirse las Cortes en Castilla y León, el líder socialista insistió en su ofrecimiento a los populares con esta solución “estructural” para llegar a un acuerdo que evite que la ultraderecha acceda por primera vez a un Gobierno en España.
Lo hizo durante su intervención ante el Comité Federal del PSOE, al afirmar que pese a que el Ejecutivo central y los socialistas han sufrido “una oposición virulenta, crispada y faltona” solos no pueden conjurar a una ultraderecha “que crece para llegar al poder”.
Y por eso, recalcó, necesitan al PP para frenar a la formación de Santiago Abascal, apoyando a su candidato en Castilla y León, Luis Tudanca, en tratar de llegar a un pacto con Mañueco que corte el paso a dicha formación.
Tudanca, por su parte, consideró que el nuevo PP de Alberto Núñez Feijóo es “prácticamente igual que el viejo pero con una cara más amable”, e instó a Feijóo a demostrar que “hace cosas diferentes” frenando el pacto de la extrema derecha.
En declaraciones a los medios previas al Comité Federal del PSOE, se mostró convencido de que esta semana “pasará lo previsible”, y es que el PP pactará con Vox porque la derecha de Castilla y León -“antaño moderada”- ha caído “en brazos de los extremismos y hará cualquier cosa por seguir en el poder”.
Se mostró dispuesto a volver a hablar con Mañueco, pero con el cordón sanitario a Vox como línea roja. efe