Curso presencial, con mascarillas, aulas burbuja y distancia personal del 1,2 metros, propuesta del Gobierno para el año próximo

El Gobierno propone a las comunidades autónomas que el próximo curso escolar sea presencial en todas las etapas educativas y que se mantengan las medidas de seguridad e higiene para frenar contagios de COVID-19, como es el uso de mascarillas, los 'grupos burbuja' y la distancia de seguridad entre alumnos y profesores, aunque en este sentido plantea que en lugar de 1,5 metros de separación, se pueda reducir a 1,2 metros en algunos cursos.

Así lo pone de manifiesto el documento 'Propuesta de medidas de prevención, higiene y promoción de la salud frente a COVID-19 para centros educativos en el curso 2021-2022', redactado por los ministerios de Educación y de Sanidad y remitido a las comunidades autónomas.

Según aseguran fuentes del Ministerio de Educación, el documento es un borrador que se analizará esta tarde en la Comisión de Salud Pública y este viernes en la Comisión de Educación. Será el miércoles de la semana que viene, día 19, cuando se aprobará en la una reunión conjunta entre Sanidad y Educación con las comunidades autónomas en una Conferencia Interterritorial.

Más ventajas que riesgos

La ministra de Educación, Isabel Celaá, apostó este jueves por volver a las clases presenciales en todos los tramos de la enseñanza porque las ventajas son “muy superiores a cualquier riesgo o eventualidad”, una cuestión que debatirá con Sanidad y las comunidades.

Durante este curso académico, muchos alumnos de 1º de Bachillerato, 2º y 4º de la ESO han seguido las lecciones de forma semipresencial, aunque ello ha dependido de su lugar de residencia.

Durante su intervención en el debate “Oportunidades para la cooperación educativa en Iberoamérica”, Celaá señaló que distintos consejeros de Educación le han pedido volver a las aulas presenciales en todos los tramos de enseñanza.

La escuela española se ha sometido “con rigor a las medidas higiénico sanitarias”, de ahí la baja incidencia de aulas en cuarentena, añadió Celaá, acompañada por el secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), Mariano Jabonero.

Durante el debate, organizado por la OEI y conducido por la presidenta de la Agencia EFE, Gabriela Cañas, la ministra destacó en particular la eficacia de dos medidas: el uso de la mascarilla a partir de los 6 años y la ventilación de las aulas.

“La vuelta a la presencialidad es insustituible, merece la pena mantenerlas abiertas (las aulas)”, también porque la incidencia “ha sido menor y ha sido muy soportable”, insistió.

Tras recordar las líneas maestras de la profunda transformación que proyecta su cartera para la Formación Profesional, la ministra ha reconocido que hay que acabar con el estigma que pesa sobre esta enseñanza “como si fuera un estigma de segunda o bien para aquellas personas más desfavorecidas o vulnerables o aquellas personas que no era tan rápidas para cursar un Bachillerato”.

“Esto –añadió– no ocurre ni en los países nórdicos, ni en Alemania ni en ningún ámbito económico, donde lo que más se valora es una persona titulada en FP”.

El secretario general de la OEI, por su parte, explicó que la pandemia ha supuesto para América Latina una vuelta a los niveles de la recesión de 1929 que ha tenido un impacto “muy fuerte tanto en el ámbito sanitario como en el social y educativo”.

En la próxima Cumbre Iberoamericana, que tendrá lugar en República Dominicana en 2022, Jabonero ha explicado que ya se está trabajando sobre prioridades tales como las competencias de los alumnos y la Formación Profesional, la agenda digital y la gobernanza del sistema educativo. Redacción ECG/Agencias