Educación retrasa una semana el inicio para ESO, Bachillerato y FP
Lo anunció Román Rodríguez tras consensuarlo con la Xunta Autonómica de Directores de Secundaria // Se pospone para dar tiempo a los centros a adaptarse al cambio de protocolo
Galicia retrasa una semana el comienzo de curso para la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato y Formación Profesional, que será a partir del 23 de este mes, según anunció ayer el titular de Cultura, Educación e Universidade, Román Rodríguez, tras reunirse la Xunta Autonómica de Directores y consensuarlo con los representantes de los centros de Secundaria e inspectores educativos de las cuatro provincias. El conselleiro aseguró que la noticia había sido comunicada también a los representantes de las familias y de los profesionales de los centros.
En los últimos días, todos los institutos de Santiago y de otras ciudades habían anunciado que no abrirían sus puertas a los alumnos el día 16 de este mes, sino una semana después, al no poder cumplir con los requisitos que se exigían a causa de la pandemia. Otros directores clamaban por más tiempo de preparación.
La intención es que los centros puedan convertir los espacios educativos en zonas seguros ante la covid-19, aseguró, y “poder cumplir el metro y medio de distancia que se acordó el pasado 27 de agosto” en una reunión entre el Ministerio y las comunidades autónomas.
“Galicia no es ninguna excepción”, aseguró, y señaló que se decidieron “retrasos en muchas comunidades autónomas”, además de que otras como Asturias, Madrid y Aragón plantean también la semipresencialidad.
El porqué de no retrasar el arranque en Infantil y Primaria (comenzaron este jueves y viernes, 10 y 11 de este mes) lo justificó en que en esos niveles “no se modifican las reglas del juego y sí en Secundaria, Bachillerato y FP”. El nuevo responsable de Educación de la Xunta aseguró que se trata de una decisión “meditada, compartida y ejemplo de cogobernanza” en aras de que el comienzo del curso se haga “con mayor previsión y mejor organización”.
La determinación también favorecerá la implantación de las medidas planteadas todavía este mismo martes en el Consello Escolar de Galicia, como la instalación de mamparas en las aulas y talleres o la opción de solicitar un sistema semipresencial en la enseñanza no obligatoria. Además, asegura la Xunta, esta semana se aprovechará para incrementar las acciones formativas dirigidas a profesorado y alumnado en materia higiénico-sanitaria, una medida que “servirá para mejorar el estándar de seguridad de la comunidad educativa”.
MAMPARAS En la rueda de prensa acompañaban a Román Rodríguez Isabel Ruso, presidenta de la Asociación de Directores de Institutos, que agradeció la decisión y se comprometió a poner todo de su parte “para acomodarse al nuevo sistema”, y Enrique Pazo, director del CIFP Ferrolterra, que señaló que “el problema ahora es conseguir el metacrilato” para la instalación de mamparas, de ahí que sea “fundamental” contar con una semana más de plazo.
A PARTIR DEL 23 El inicio de curso, tal y como estaba previsto, será escalonado. Así, los alumnos de 1º y 2º de ESO, 1º de Bachillerato y 1º de FP Medio y Superior, comenzarán el miércoles 23 (la previsión era el 16); 3º de ESO, 2º de Bachillerato y 2º de FP Medio y Superior, volverán a las aulas el jueves 24, mientras que los estudiantes de 4º de ESO y FP Básica lo harán el viernes 25.
DESDOBLES El conselleiro insistió este viernes en que ya se trabaja en determinar la cifra de profesores de más que será necesario contratar este curso para estas etapas, con el fin de cubrir los desdobles que haya que realizar para bajar ratios. Este refuerzo, asegura Educación, “se concretará en los próximos días, una vez se cierren definitivamente las necesidades de cada centro”. Rodríguez reiteró que se “contratará el personal que sea necesario, igual que se hizo en Infantil y Primaria, con 240 nuevas incorporaciones”.
Santiago. Después de que el secretario xeral técnico de Educación, Manuel Vila, convocase ayer de urgencia a los sindicatos y agrupaciones de ANPAs de centros públicos y concertados para tratar el retraso del calendario, el secretario nacional de la CIG, Suso Bermello, criticó “el caos organizativo” de la Xunta y reprochó que “tiren abajo la principal medida positiva” de las instrucciones de agosto (1,5 metros de separación).
Bermello se mostró preocupado porque no salga perdiendo con el retraso el profesorado sustituto e interino y exigió que se haga cuanto antes, “con todas las garantías y sin errores”, para que la toma de posesión sea con la misma fecha prevista, el día 16.
ANPE El presidente del sindicato, Julio Díaz, advirtió en la misma línea que no van a permitir “bajo ningún concepto que se sustituyan los desdobles por mamparas”. Aseguró que llevan una semana insistiendo en que no se podía empezar el curso tal y como estaba planteado, y reiteró que las garantías de seguridad pasan “en cualquier caso” por mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros, y que para eso “es necesario establecer desdobles y contratar profesorado”. Exige también la adjudicación de profesorado para el día 16.
Por su parte, Luz López, de CCOO, manifestó que la presencialidad tiene que ser “fundamental” y dijo que la Xunta toma medidas “a salto de mata”. También, desde UGT Felipe Balboa aseguró que no permitirán que se juegue con la seguridad de profesores y alumnos y advirtió de que la presencia continua en un centro, en un espacio reducido, con la separación de mamparas es “una bomba de relojería”.
ANPAS Fernando Lacaci, de ANPAS Galegas, censuró que se venda la “semipresencialidad” como algo excepcional, y que luego se llame a los centros para dar indicaciones de “todo lo contrario”. “No vamos a aceptar que se reduzca la distancia en Secundaria. Hay que buscar otras formas de mantener la seguridad. Fórmulas que deben partir del diálogo”. Todas las agrupaciones de progenitores aportaron otro problema a este retraso, la conciliación: “No se puede atrasar el inicio de un día para otro”. c.b.
Santiago. La decisión de retrasar una semana el inicio de curso en Secundaria, Bachillerato y FP fue igual de recibido en los dos partidos de la oposición, que se unen para hablar de “fracaso” de la Consellería de Educación.
El BNG cree que la medida “constata el caos, la improvisación y los bandazos” a la hora de diseñar un inicio de curso “para el que Feijóo tuvo seis meses de oro que fueron perdidos”. Esas fueron las palabras del portavoz parlamentario de Educación nacionalista, Manuel Lourenzo, poco después de conocerse la noticia, que achaca a la presión ejercida por los directores de los centros de secundaria y la comunidad educativa.
Por su parte, Pablo Arangüena, viceportavoz parlamentario socialista, aseguró que la medida de la Xunta supone “un reconocimiento de su fracaso en la planificación de la vuelta a las aulas”. “Es lo que estaban pidiendo los directores, por lo que se está plegando a sus peticiones y reconociendo su fracaso: todo el mundo estaba advirtiendo de que se podía dar un situación como ésta”, dijo.
Arangüena manifestó que la vuelta a las aulas está siendo “un descontrol” y considera que “a día de hoy no hay nadie dirigiendo la educación en Galicia” y declaró que la “cúpula de la Consellería de Educación se pasó el verano en la playa”.
El secretario general del PPdeG, Miguel Tellado, defendió, sin embargo, que la decisión de la Xunta es una determinación “prudente, dialogada y consensuada” con la comunidad educativa.
El número dos de los populares gallegos puso en valor que el nuevo conselleiro de Educación, Román Rodríguez, adoptase esta medida, “que responde a esa voluntad de consenso y dialogo” con la que el titular del ramo vuelve a la consellería.
“Es una decisión acertada porque el inicio de curso va a ser seguro en todos los niveles”, dijo el dirigente popular.
En este sentido, rechazó las críticas vertidas desde los grupos de la oposición que tildaron la medida de improvisada ya que, en opinión de Tellado, en una situación como la actual “hay que adoptar medidas durante la marcha de los acontecimientos”.
También la portavoz de Ciudadanos en Galicia, Beatriz Pino, se manifestó sobre el tema al considerar que el inicio de curso está “lleno de improvisaciones y escasa planificación” y aseguró que causará inconvenientes a muchas familias. C.B.