Padrón y Laza: diez días perimetrados con solo tres y cero casos en los últimos siete

Martes día 11 de mayo: Padrón, Laza y Cambados permanecen perimetrados debido a la delicada situación epidemiológica de estos ayuntamientos, con 501, 1.500 y 597 casos por cada cien mil habitantes de incidencia a catorce días, respectivamente. Viernes día 14 de mayo: se espera una reunión del Subcomité Clínico que no llega y que sigue dejando a estos tres municipios cerrados. En ese momento, Padrón ya había bajado de los 500 casos a dos semanas vista y de los 250 a siete, y tenía que mantenerse igualmente en este nivel máximo porque no hubo variaciones en el mapa de restricciones. Mientras, Laza (IA de 814) y Cambados (IA de 611), también seguían en él, pero merecidamente. Y otros, como Lobios, que ya llegaba a una incidencia de 937 a catorce días, se libraba del riesgo extremo.

En el municipio del área de Santiago, fundamentalmente, esperaban como agua de mayo la llegada de este martes para que el Comité Clínico permitiese levantar restricciones cuanto antes, pero, tras un festivo el lunes, tampoco hubo reunión. No será hasta este miércoles en que se sabrá algo. Y, en estos momentos, igual que Padrón ya se encuentra Laza. Ambos municipios registran tan solo tres casos de COVID a siete días entre sus habitantes, de modo que Padrón ya tiene menos de 25 de IA a una semana vista y está en 286 a dos; mientras Laza, directamente, se encuentra limpio a siete días y con 244 de incidencia a catorce. Aún con todo, deberán esperar hasta, previsiblemente, el viernes, para poder abrir. Y, en ese momento, tras diez días perimetrados desde la última reunión del Comité, la apertura será total: pasarán de cierre perimetral y cierre de la hostelería a tener las restricciones más laxas, en el nivel bajo de riesgo: bares y restaurantes con aforo al 75 % en exteriores y al 50 % en interiores. Mientras, les quedan aún tres días de soportar el toque de queda, los controles policiales a la entrada de los municipios y el no poder tomarse algo en los bares.

En el lado contrario, se encuentran otros municipios que, pese a encontrarse en una notable peor situación se van librando de las restricciones máximas y llevan más de siete días sin cambios en su nivel de riesgo, mientras el virus se expande por su territorio. Así, por ejemplo, están Pontedeva (con una incidencia a catorce días de 587 casos por cada cien mil habitantes) y Vilariños de Conso (con 578), que siguen en nivel medio-bajo –el mínimo– y pasarán directamente al máximo tras la reunión de este miércoles del Comité. Lo mismo sucederá con Lobios, que ya ha disparado la IA a 1.171, tras haber llevado en las últimas jornadas un crecimiento exponencial e imparable que no ha visto frenos ni normativas para que cesase.

Además, también hay otros dos ayuntamientos que se encuentran ahora mismo peor que Laza y Padrón y que siguen en nivel medio-bajo –caso de Folgoso do Courel (293)– y medio –caso de Chantada (305)–. Ambos deberían estar ya en riesgo alto. Lo mismo sucede con Vilanova, que salió en la última reunión de expertos del nivel máximo y, ahora, en el alto, sigue peor que los dos ayuntamientos perimetrados, con 301 casos. Sin duda, con lo cambiante que es la situación epidemiológica de un día para el otro, es necesario tomar decisiones con la mayor brevedad posible.