Protesta ante el Congreso de siete hosteleros gallegos tras caminar 15 días hasta Madrid

Por fin llegaron a su meta ayer, tras 15 días de intensa caminata, los hosteleros pontevedreses que el pasado 7 de diciembre emprendían, desde Lérez hasta Madrid, una movilización a pie demandando “el rescate del sector”. Esta exigencia fue trasladada al Congreso de los Diputados la pasada jornada. Allí se manifestaron, tanto trabajadores como propietarios, con motivo de las medidas impuestas por el coronavirus, viendo como se ha “desangrado” su economía ante la pasividad política.

Antonio Fernández, componente de esta agrupación llamada “Equipo rescate hostelería”, reivindicó en la capital española que nuestros mandatarios están obligados a impulsar el conjunto de establecimientos que prestan servicio en este ámbito, después de haber sido víctima de distintas restricciones por “culpabilizarlo de los contagios” de COVID.

En este sentido, este colectivo hostelero buscó reunirse con los representantes de las diferentes formaciones que forman la Cámara Baja (entre las que se incluyen PSOE, PP, Vox, Podemos, Ciudadanos y BNG, entre otras) para trasladar su demanda, después de finalizar el último tramo del recorrido, donde unieron sus fuerzas para manifestarse con delegados autonómicos de La Rioja o Euskadi.

Ante la situación que ha propiciado el cierre forzoso de sus negocios, Fernández criticó que, frente al apoyo económico y la recepción de ayudas óptimas, sea la hostelería quién a nivel fiscal “financia al Estado”. “Tenemos que pagar todo, no nos dan nada, y las ayudas tienen tanta letra pequeña que cumplirla es inviable”, señaló indignado el portavoz, quien destacó además que los hosteleros han tenido que “tirar de los recursos propios” y aportaciones de “familiares o allegados” en medio del crítico panorama que aún afrontan.

“Se debería declarar al propio sector como zona catastrófica pero, a diferencia de eso, se nos está criminalizando”, lamentó Fernández, remarcando que su manera de ganarse la vida “no ha creado el virus” y que los “estudios de Sanidad” hacen ver que la incidencia del SARS-Cov-2 es “mucho mayor” en otros espacios menos perjudicados.

“Se está criminalizando a la hostelería de forma institucionalizada”, aseguró asimismo el hostelero, recordando que las normas y protocolos higiénicos que prevalecen en estos lugares no existen, sin embargo, en ningún domicilio particular: “En Pontevedra, cada vez que se cierra, a las dos semanas se incrementan los contagios”.

UN OBJETIVO DE 14 ETAPAS. Del mismo modo, Rafael Rúa, otro de los miembros del equipo que realizó la caminata desde Pontevedra hasta Madrid evidenció la colaboración de sus compañeros, que se solidarizaron mostrando un apoyo constante durante las 14 etapas que han ido realizando: un promedio de 45 kilómetros caminados diariamente.

Con los pies dolientes ante las ampollas causadas por la larga caminata, como “símbolo de la crucifixión” hostelera, matizó también el relevante papel de todos los políticos a la hora de paliar este conflicto, atendiendo su reclamación y garantizando “el rescate del sector”.

TODOS UNIDOS en esta lucha. Son muchos los respaldos que ha recibido este conjunto conformado por siete integrantes desde que dio comienzo su protesta en Pontevedra, entre ellos Cheché Real, presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Lugo, quien viajó hasta Madrid con el propósito de acompañar al grupo.

Bajo estas circunstancias, Real incidió en que actualmente están en la capital “pidiendo el rescate, indemnizaciones y ayudas” dentro de una iniciativa con la que pretenden a mayores “dar visibilidad a la situación que tiene la hostelería y el turismo a nivel nacional”.

“Todo el canal de hostelería está en una situación absolutamente al límite”, reconoció el dirigente de la Apehl. Además, aprovechó para informar sobre la nueva campaña de su organización “Regálale, regálate”. Mediante esta “las empresas podrán regalar a sus empleados tiques de estancia en hoteles, casas rurales o cenas y comidas en diferentes establecimientos de la provincia”.

“No queremos que este año haya en nuestros establecimientos esas cenas masivas de empresas, celebraciones navideñas, que sabemos que lo vamos a pagar nosotros”, afirmó Real, alertando nuevamente que son “el único sector que está aquí sacrificado” en relación a la pandemia: “Si esto sucediese, luego acarrearía unos nuevos cierres”.

la MANIFESTACIÓN. Una vez llegaron al edificio que alberga la Cámara Baja, los siete protagonistas fueron recibidos por decenas de trabajadores y propietarios, compañeros de Leganés o Fuenlabrada que se sumaron a la manifestación al grito de “Salvemos la hostelería”.

Otros lemas empleados en la protesta que partió desde Moncloa fueron “Si no nos mata la COVID, nos mata el Gobierno” o “Si me obligas a abrir con un tercio de aforo, cóbrame un tercio de impuestos”, carteles con reivindicaciones que se alzaron hasta las puertas del Congreso.

UN NUEVO PASO. Con esta situación por delante, el Consejo de Ministros da luz verde hoy al plan de choque destinado a la hostelería y el comercio, unos de los mayores damnificados por el coronavirus, que recortará la mitad del alquiler de todos los locales de “grandes dueños” con más de 10 propiedades.

Esta rebaja podrá solicitarse antes del 31 de enero y abarcará los períodos del estado de alarma, sus prórrogas y hasta los cuatro meses posteriores. Además, también contemplan beneficios fiscales para los que sean “pequeños” empresarios.