El arzobispo pone a una madre de familia al frente de la antigua Vicaría de Enseñanza

Monseñor Francisco Prieto continúa con su plan para renovar la Curia Diocesana. Tal y como adelantó en exclusiva EL CORREO, el nuevo arzobispo de Santiago quiere regenerar el órgano de gobierno de la Iglesia compostelana con perfiles más pastorales e incorporando a laicos a puestos de mando. Después de nombrar al nuevo equipo de vicarios, el prelado sigue adelante con la reforma. Este viernes tomaba posesión la nueva delegada de Enseñanza. Se trata de un cargo de nueva creación que empleará las competencias de la antigua Vicaría de Enseñanza, cuyo último vicario fue el canónigo Luis Otero Outes. Begoña Díaz García asumirá a partir de ahora esta responsabilidad que antes ejercía un clérigo, y que consiste básicamente en la coordinación de la asignatura de Religión en los centros educativos tanto públicos como privados. Además, la nueva delegada de Enseñanza también gestionará las relaciones entre el Arzobispado y las administraciones públicas, principalmente la Xunta, en todo lo que se refiere a materia educativa.

Begoña Díaz valoró como un “gran reto” lo que este nombramiento supone tanto en lo profesional como en lo laboral, y que compaginará con su labor como docente de Religión en el IES de Milladoiro, en Ames. La nueva delegada de Enseñanza, que asegura estar “ilusionada”, asume la “gran responsabilidad de seguir trabajando de la mano del profesorado de Religión, que en la Diócesis realiza una indispensable tarea en la formación religiosa, intelectual y humana del alumnado que elige esta asignatura”.

Natural de Ferrol, Díaz García, casada y madre de tres hijos, es licenciada en Ciencias Químicas por la USC y graduada en Ciencias Religiosas por el Instituto Teológico Compostelano. Su experiencia como docente se ha desarrollado en los últimos años en el IES Poeta Díaz Castro de Guitiriz, en el IES Río Miño de Rábade, en el IES As Insuas de Muros, el IES A Guía de Vigo, IES Castelao de Vigo, el IES Alexandre Bóveda de la misma ciudad, el IES Universidad Laboral de Ourense, y el IES Otero Pedrayo, situado en la ciudad de las Burgas.

Nueva hoja de ruta de la Archidiócesis de Santiago

Por otro lado, el arzobispo presidió también este viernes en la sala de juntas de la Curia diocesana la primera reunión del Consejo Episcopal, órgano consultivo y de gobierno del obispo. El Consejo Episcopal está formado por el vicario general, José Andrés Fernández Farto; el vicario episcopal de Pastoral, Francisco Javier Porro Martínez, y los vicarios episcopales territoriales, Jesús Andrés López Calvo, Luis Seoane Ares y Juan González-Redondo Neira. En la reunión, según indican desde el Arzobispado, se pusieron sobre la mesa algunos asuntos que, a consideración del equipo de gobierno, son prioritarios en el quehacer pastoral diocesano. En línea de continuidad con las conclusiones del Sínodo diocesano 2016-2017 se estudió la situación de la Iglesia particular de Santiago de Compostela y se definieron los retos que se deben afrontar en el futuro inmediato.

El Consejo concluye que “debemos responder a grandes y urgentes desafíos, en el marco de un anuncio renovado del Evangelio y de una verdadera renovación pastoral: la iniciación cristiana, el estilo y la actitud pastoral o la creación de una nueva presencia territorial de la Iglesia”. Sostiene que “la condición inicial para comenzar esta nueva etapa evangelizadora es la conversión pastoral tanto del agente evangelizador (pastores, consagrados y laicos) como de la misma acción pastoral, permeada de una espiritualidad de comunión y participación, en la que debemos saber conjugar, sin exclusiones ni prejuicios, como dones del mismo Espíritu, la unidad y la diversidad de nuestra Iglesia diocesana”.

José Andrés Fernández Farto será el nuevo vicario general de la Diócesis y Javier Porro, de Pastoral

Cambio de métodos y estructuras pastorales

Monseñor Francisco Prieto y sus vicarios indican en sus conclusiones de la primera reunión del Consejo Episcopal que “la situación actual es tan distinta a la de hace unos pocos años que nuestra Diócesis debe emprender sin demora un cambio de sus métodos y estructuras pastorales para revitalizar la tarea evangelizadora”. Con la creación de la nueva Vicaría episcopal de Pastoral se pretende “potenciar la acción pastoral de toda la Diócesis, siguiendo las orientaciones y líneas de acción inspiradas en el magisterio del papa Francisco y en las normas, directrices, criterios y pautas de actuación señalados por el obispo, en coordinación con los vicarios territoriales”.