La exposición ‘Luz na Terra’ se despide de la Cidade da Cultura con más de 22.000 visitantes

La muestra, inaugurada el pasado mes de julio en el Gaiás, conmemoró el centenario de la fundación del Seminario de Estudos Galegos

El Museo Gaiás acogió la exposición ‘Luz na Terra. O Seminario de Estudos Galegos: unha institución de alta cultura’

El Museo Gaiás acogió la exposición ‘Luz na Terra. O Seminario de Estudos Galegos: unha institución de alta cultura’

La exposición Luz na Terra. O Seminario de Estudos Galegos: unha institución de alta cultura se despidió este domingo del Museo Centro Gaiás. La inauguración tuvo lugar a comienzos del pasado mes de julio. La muestra, que se encuadró en los actos con los que en este año que viene de finalizar se conmemoró el centenario de la fundación del Seminario, recibió hasta el 2 de enero a más de 22.000 visitantes, a la espera de que sumen los recibidos en los últimos cinco días. Además, 700 niños participaron en las visitas didácticas.

Comisariada por el historiador Ramón Villares, la exposición se concibió como una puesta en valor de una obra colectiva que, a comienzos del pasado siglo, impulsó de manera decisiva la modernización cultural y científica de Galicia y también la proyección exterior de nuestra cultura, conectando con instituciones análogas de España, Portugal, Bretaña, Irlanda, Reino Unido, Alemania o diversos países del continente americano.

Recoge fotografías, publicaciones, manuscritos, bosquejos, dibujos..., así como una antología de piezas singulares que permiten trazar la historia del Seminario de Estudos Galegos desde su misma acta fundacional, obra con la que, precisamente, arrancaba este recorrido expositivo.

Luz na Terra está comisariada por Ramón Villares, catedrático emérito de Historia Contemporánea de la Universidad de Santiago de Compostela, institución de la que fue decano y rector. Fue miembro fundador y presidente de la Asociación Española de Historia Contemporánea, es miembro numerario de la Real Academia Galega y fue presidente del Consello da Cultura Galega. Además, con motivo de la exposición, se editó una completa publicación, llamada a convertirse en una obra de referencia para ahondar en el estudio e historia de la creación del Seminario de Estudos Galegos. La autoría de sus textos compone una galería de figuras protagonistas de la comunidad científica y cultural de la Galicia de las últimas décadas, voces herederas y continuadoras de la misión del Seminario. El catálogo puede adquirirse en la tienda del Museo Centro Gaiás y también en la Librería Institucional de la Xunta de Galicia.

Una institución de “alta cultura”

El centenario de la fundación del Seminario de Estudos Galegos (SEG) conmemora una institución que el fundador de las Irmandades da Fala, Antón Villar Ponte, calificó de “alta cultura”. El SEG fue fundado en 1923, a iniciativa de un grupo de estudiantes universitarios en Compostela -entre los que se contaban nombres como Fermín Bouza Brey, Xosé F. Filgueira Valverde, Lois Tobío o Ramón Martínez López- animados por profesores como Armando Cotarelo o Cabeza de León, que serían el primer y segundo de los presidentes con los que contó la institución.

Así, el 12 de octubre de 1923 nueve jóvenes universitarios caminaron a la Casa Grande de Ortoño, donde Rosalía de Castro pasó su infancia, en la que sería la excursión fundacional del Seminario. Esta iniciativa juvenil, amparada por la universidad, finalizaría por convertirse en una de las grandes protagonistas del galleguismo y de la propia historia de Galicia. Precisamente, el Seminario llegaría a integrar entre sus miembros a los propios padres de la Xeración Nós, como Risco, López-Cuevillas y Otero Pedrayo.

El legado del Seminario

Llegó a contar con más de doscientos miembros propuestos y admitidos y una amplia red de socios protectores. Fomentaron la integración de disciplinas, trabajaron en equipo, hicieron del uso de la lengua gallega un estandarte y contribuyeron a construir el proyecto autonomista de la II República.

Su trabajo fue reconocido de modo unánime, pero la Guerra Civil se llevó por delante la institución y algunas de sus iniciativas singulares. Su patrimonio y sus proyectos inacabados tuvieron continuidad en el Instituto de Estudios Gallegos Padre Sarmiento y, posteriormente, en el Museo do Pobo Galego o en el renacido Seminario de Estudos Galegos impulsado por Isaac Díaz Pardo y el grupo Sargadelos.