Apuesta por la arquitectura fabril e industrial del entorno del río Sarela

El presidente de los populares compostelanos, Borja Verea, y el concejal José Antonio Constenla se reunieron con la Asociación de Vecinos Río Sarela, representada por su presidente Jon Brokenbrow y su secretario Ángel Lado, con el objetivo de conocer de primera mano las demandas y sugerencias de los vecinos de San Lourenzo, Pombal y Carme de Abaixo.

En el encuentro analizaron la situación del derribo del muro del Pombal, y los representantes vecinales mostraron su malestar por el retraso en el arreglo y “por el peligro que supone seguir en esta situación provisional tras más de un año”, escenario que el diputado compostelano calificó “de un ejemplo a la vista de toda la ciudad de la incapacidad del ayuntamiento para atender asuntos importantes”. Añadió, además, que “no hay justificación para que casi catorce meses después el muro siga en ese estado”.

Tanto Verea como Jon Brokenbrow coincidieron en las posibilidades de crecimiento sostenible que tienen estos barrios y pusieron de ejemplo toda la arquitectura fabril e industrial que rodea al río Sarela, en total estado de abandono cuando podría ser, según Borja Verea, “un reclamo no solo para el turismo responsable que vendrá después de la pandemia por coronavirus, sino también para continuar con la revitalización de esta zona de ciudad”.

Y es que, en palabras de Brokenbrow, “éste siempre fue un barrio histórico tradicional, que en los últimos años está teniendo un cambio demográfico a barrio de clase media pero que sigue arrastrando daños estructurales” que no se corresponden con su avance a nivel vecinal.

Otro de los asuntos que se analizaron fue la problemática generada por los ruidos como consecuencia de los botellones. Si bien con la pandemia esta problemática prácticamente desapareció, se incrementaron los puntos de consumo de estupefacientes y también la presencia de sintecho especialmente en zonas más cercanas al Pedroso, “generando en alguna ocasión conflictos con los vecinos”.

El presidente de la Asociación Río Sarela destacó que se echa en falta una mayor atención y coordinación de los responsables municipales hacia el tejido asociativo y que, en muchas ocasiones, se ven obligados a trabajar sin planificación o apoyo por parte de Raxoi. “Sería importante una mayor labor de coordinación e impulso de Concello con las AAVV, que somos las que conocemos la problemática del día a día de los vecinos y podemos solucionar muchos problemas”.

En este sentido, Verea añadió que “una queja en todas las reuniones que tenemos con las asociación de vecinos es precisamente la falta de diálogo y apoyo por parte del ayuntamiento”.