Atascos desesperantes en el centro por el aluvión de turistas ‘playeros’
Los accesos y el entorno de la ‘almendra’ estuvieron colapsados ayer durante buena parte de la mañana // También en la Catedral se registraron largas colas
El mal tiempo sigue dando quebraderos de cabeza a los veraneantes que disfrutan sus vacaciones en Galicia. Y cuando el día amanece nublado y lluvioso en la costa e impide disfrutar de la playa, una opción para distraerse siempre es venir a Compostela y más aún si como ahora se está en pleno Año Santo.
Por esta razón, desde la mañana tanto los accesos como el centro de la capital gallega registraron una alta densidad de tráfico, puesto que fueron muchos los turistas que decidieron tirar de coche desde las playas para pasar la jornada en Compostela. Eso sí, tuvieron que armarse de paciencia y sufrir algún que otro embotellamiento, debido al gran número de visitantes que tuvieron la misma idea. Así, durante toda la jornada, y sobre todo el casco viejo, se registró una gran actividad y un abarrote de turistas y peregrinos que aprovecharon para ver de cerca los principales monumentos de la capital gallega.
Como siempre el más solicitado fue la Catedral, donde como viene siendo habitual, se produjeron colas, tanto para acceder al templo por su acceso principal, en la plaza de Platerías, como para hacerlo por la Puerta Santa, en la Quintana. Eso sí, todo el mundo lo hizo respetando la distancia de seguridad y con la mascarilla puesta, tal y como marca la normativa antiCOVID vigente.
También la plaza del Obradoiro estuvo muy animada, principalmente, por la llegada de numerosos peregrinos, tras recorrer el Camino de Santiago a pie o en bicicleta. Y es que este lugar es la ansiada meta para todos ellos y el punto donde celebran el fin de su periplo jacobeo, donde dejan constancia de su aventura con numerosos selfies con el fondo de las torres de la Catedral.
Según los datos de la Oficina de Acogida de Carretas, ayer llegaron a la capital gallega por la mañana 765 peregrinos. De hecho, en la inmediaciones de la instalación también hubo las correspondientes colas para poder recoger la Compostela, el certificado que acredita que se ha hecho la Ruta Jacobea.
Así, en las calles y plazas de la almendra hubo un gran ambiente y zonas como la rúa del Franco, A Raíña, la Rúa Nova o la Rúa do Vilar estuvieron repletas, sobre todo, a la hora del vermú y la comida, donde los visitantes quisieron probar los manjares típicos de Galicia en los negocios de hostelería de Santiago.
También las terrazas de Porta Faxeira, de las favoritas de los compostelanos, tuvieron una gran afluencia de público, así como las de la plaza de San Agustín, próximas a la Mercado de Abastos, muy de moda entre los santiagueses para tomar el vermú.
COMPRAS EN LA PLAZA Y EN EL ENSANCHE. Asimismo, el Mercado de Abastos gozó de una gran actividad y de la visita de muchos viajeros, que no quisieron dejar de conocer este lugar tan emblemático de Compostela y hacerse con productos tradicionales. Otro punto muy visitado fue la Alameda, que también tiene un gran tirón entre los turistas, que no quieren marcharse de la ciudad sin hacerse la tradicional foto con la estatua de las Marías.
También el Ensanche y sus establecimientos comerciales estuvieron muy concurridos durante toda la jornada.
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··· La llegada de turistas contribuye a la dinamización de la actividad comercial y hostelera de la ciudad, que lo ha pasado muy mal en los meses pasados. Y es que los visitantes quieren probar los tradicionales manjares gallegos, como el marisco, el pulpo o los pimientos de Padrón. A pesar de las restricciones vigentes, son muchos los que se animan a disfrutar de las viandas y caldos que ofrece la comunidad gallega.
··· Otros viajeros no quieren marcharse de la capital gallega sin llevarse un recuerdo de la misma, bien sea en forma de una concha de peregrino, una joya con azabache y plata, o una prenda de ropa o un bolso comprado en una tienda compostelana.