El nuevo carril-bici salvará las barreras físicas entre O Milladoiro y Compostela

Los alcaldes de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; y de Ames, Blas García; presentaron ayer el anteproyecto del carril bici de la SC-20 entre la rotonda de O Milladoiro y la de Volta do Castro. Los dos regidores, junto al concejal de Barrios y Obras de Compostela, Javier Fernández; y la concejala de Tráfico y Movilidad de Ames, Beatriz Martínez; destacaron que se trata de un proyecto necesario, que tiene como objetivo humanizar y mejorar la movilidad entre ambos muncipios.

La actuación afecta a un tramo de 1,8 kilómetros, que discurren por el término municipal de Santiago, y que busca facilitar la comunicación entre O Milladoiro y Santiago en bicicleta. Tras el análisis de alternativas y las reuniones de trabajo con diferentes agrupaciones ciclistas, se acordó no secretar el trazado de los sentidos de circulación del itinerario ciclista, con el objeto de generar un espacio con cierta entidad que aumente la seguridad de los mismos y facilite los cambios de sentido de manera directa.

El proyecto propone, para ello, una plataforma de uso ciclista de doble sentido con un ancho mínimo de 2,5 metros. Para llevarla a cabo sería necesario, como se hizo en la avenida de Asturias, reducir el ancho de los carriles destinados a los vehículos.

La senda ciclista iría paralela a la SC-20 en el tramo comprendido entre la rotonda de Vidán y el Ponte da Rocha. En el puente se bifurcaría en dos itinerarios, uno por el lado derecho de la carretera (en sentido O Milladoiro), más largo, pensado para las familias o para momentos de ocio; y el otro por el lado izquierdo, más corto, pero más rápido. El proyecto también contempla un desvío hacia el barrio de Conxo.

En este momento, la zona afectada por el proyecto solo dispone de aceras en una parte del trazado. Carecen de continuidad, por lo que es imposible realizar este tramo a pie o en bicicleta. La causa, el enlace de la AG-56, a lo que, con esta actuación, se pretende dar solución.

Para abordarlo, se proponen distintas soluciones, coincidiendo con los trazados proyectados. Una de ellas es elevar el carril bici sobre los ramales del enlace de la AG-56 aprovechando la orografía. Esta opción obliga la ejecución de estructuras auxiliares, muros de sostenimiento y pasarela, para alcanzar cuotas de rasante que garanticen el cumplimiento del gálibo de vehículos en el enlace de la autovía.

La otra alternativa pasa por emplear un viario municipal paralelo al oeste de la SC-20 hasta el paso superior de la AG-56. Este cruce se podría realizar a nivel de la calzada con una regulación semafórica o creando un paso superior a la misma que evite aficiones al tráfico. En cualquier caso, se entiende que las dos alternativas son totalmente compatibles.

Con respecto al inicio y fin del carril bici, el proyecto contempla crear zonas de transición que den coherencia al trazado facilitando su integración en los viales adyacentes y permitiendo los movimientos de incorporación y salida del itinerario ciclista de manera segura y clara.

En la glorieta de O Milladoiro la propuesta pasa por crear, del lado del núcleo urbano, un espacio compartido de grandes dimensiones que permita el paso de los peones entre las aceras existentes y facilite las conexiones de las dos alternativas de trazado. Al mismo tiempo serviría para calmar el tráfico, eliminando la necesidad de la actual pasarela.

En la glorieta de Volta do Castro, la conexión con el núcleo urbano pasa por el aprovechamiento de los viales municipales existentes creando una derivación cara el barrio de Conxo por la rúa da Escurridia y hacia A Choupana atravesando la propia SC-20 a la altura de la glorieta. Esta última opción se llevaría a cabo mediante la creación de una pasarela anexa, mediante la supresión de uno de los carriles de la glorieta, o con el aprovechamiento del paso superior existente al este.

El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, subrayó que para financiar este proyecto se buscarían fondos europeos. También mostró no tener “inconveniente” en que la obra la haga la Xunta de Galicia. Sería, añadió, una forma de sumar esfuerzos entre todos, para eliminar los problemas de movilidad en el que calificó como “la gran barrera con O Milladoiro”, que supuso la construcción del periférico. Para el regidor, se trata de un proyecto necesario, pero complejo, que habría que tratar con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, y con la Xunta.

Por su parte, Blas García señaló que este carril bici es, sobre todo, un servicio para el vecindario de O Milladoiro. “Lo llevan reclamando hace muchos años”, añadió. Y recordó que, aunque las obras se van a ejecutar íntegramente en Santiago, supondrán un beneficio para el ayuntamiento de Ames, por la posibilidad de llegar hasta Compostela “sin necesidad de coger el coche”. Serán también, continuó, “un gran avance en movilidad sostenible”.

“Para el concejal Javier Fernández, con este carril bici, “se da respuesta a una demanda que mejorará la movilidad del vecindario, y que humanizará la zona”.