Ingreso del doctor Ponte en la Real Academia de Medicina
La sede de la Real Academia de Medicina de Galicia, en A Coruña, acogerá a las 19.00 horas de hoy el acto de recepción del doctor Fernando J. Ponte Hernando como académico numerario del sillón de Historia de la Medicina. Nacido en Logroño en 1959, Ponte Hernando es doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Santiago, capitán médico de Sanidad Militar (en la reserva honorífica desde septiembre de 2020) y profesor titular de Historia de la Ciencia en la Facultad de Medicina de la USC.
El discurso de ingreso del nuevo académico, que también fue director gerente de la Fundación Pública Sanatorio Psiquiátrico de Conxo, versará sobre el Pensamiento médico y humanístico de Domingo García Sabell. La contestación correrá a cargo, en nombre de la Corporación, del académico numerario del sillón den Radiología, el doctor Jorge Teijeiro Vidal. El presidente de la institución, el doctor Francisco Martelo Villar, impondrá la medalla al nuevo miembro y se encargará de cerrar la sesión.
Autor de numerosos artículos en EL CORREO GALLEGO sobre las figuras más sobresalientes de la Medicina, Ponte es un gran conocedor de la vida y obra de Domingo García-Sabell, doctor que protagonizará su discurso de ingreso por ser uno de los grandes abanderados del denominado humanismo médico en Galicia. En uno de de esos trabajos, el nuevo académico recordaba que García-Sabell, nacido en la compostelana plaza de Mazarelos en 1908, estudió Medicina en Santiago entre 1925 y 1931 y fue militante de la Federación Universitaria de Estudiantes, que tuvo un importante papel durante la dictadura de Primo de Rivera y la II República. En el seno de la misma conoció a importantes figuras de la intelectualidad galleguista como Ánxel Fole, Maside, Dieste, Seoane, Bal y Gay, etc...
Obtuvo el Premio Extraordinario de Licenciatura y amplió estudios en Alemania. Defendió su tesis doctoral en Madrid, en 1932, sobre El metabolismo intermediario en la obesidad, bajo la dirección del doctor Jiménez Díaz, y obtuvo el Premio Extraordinario de Doctorado.
Una de las cuestiones que más destaca Ponte Hernando de su veterano colega es su vertiente de médico humanista tras mantener un intenso contacto con escuelas médicas como la de Heidelberg, cuya principal aportación es la introducción de la patología de la persona. Estas influencias explican su adscripción, a partir de la década de los cincuenta, a la denominada Medicina Psicosomática, junto con Laín Entralgo y Rof Carballo.