Movilización en Pelamios para liberar un piso okupado en las últimas horas

Dos comunidades de propietarios, las de los números 12 y 14 de la rúa Pelamios, se han movilizado para conseguir liberar una vivienda que ha sido okupada en las últimas horas en el segundo de los bloques. Los vecinos se percataron a primera hora de este sábado de que uno de los pisos del número 14 había sido víctima de una okupación, por lo que procedieron a poner los hechos inmediatamente en conocimiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y también del Concello de Santiago. Se trata de un piso que estaba vacío y contiguo a otra vivienda que lleva tiempo con intrusos.

“Estamos tratando de contactar con el propietario del piso para que autorice el desalojo, porque este solo puede producirse sin necesidad de la intervención del juez durante las primeras 48 horas después de que se produce la okupación”, explicaba ayer por la tarde un representante vecinal, poco antes de dirigirse a la Comisaría para presentar una denuncia.

Se trata de dos bloques que llevan tiempo con problemas de okupación. El número 14 contaría ahora con dos pisos okupados; y en el 12 también fueron desalojadas recientemente varias personas de una vivienda que “dejaron en una situación lamentable, completamente destrozada”.

De hecho, apunta la fuente, quienes entraron ilegalmente la noche del viernes en este piso estarían relacionados con los desalojados del edificio de enfrente. “El problema es que aquí la mayoría de los pisos son de alquiler y cuando alguno se queda vacío, se lo comunican de unos a otros y proceden a la okupación”.

La sensación de inseguridad en el barrio va a más. Y el hartazgo también. Muchos residentes de la zona están ya “desesperados” y aseguran que “con esta gente es imposible la convivencia”.

Tras la llamada de alerta de los vecinos, hasta la rúa Pelamios se desplazaron este sábado efectivos del Cuerpo Nacional y también de la Policía Local de Santiago, que procedieron a inspeccionar la zona. Los hechos, según el portavoz vecinal, también fueron puestos en conocimiento del concejal de Seguridad, Gonzalo Muíños. El objetivo de las comunidades de propietarios es que se proceda al desalojo de la vivienda okupada antes de que se cumplan 48 horas desde la entrada de los intrusos.

Quienes también se desplazaron este sábado hasta la zona fueron las empresas de instalación de sistemas de alarma. El temor a nuevas okupaciones lleva a no pocos propietarios a la contratación de estos servicios para evitar ya no robos sino la entrada de personas de forma ilegal en las fincas. Cabe recordar que una vez que discurren los dos primeros días dentro de la casa, los okupas adquieren una serie de privilegios y el proceso de desalojo se complica. En necesario acudir al juzgado y el procedimiento se puede demorar hasta meses. Además, cuando el propietario recupera la vivienda habitualmente se encuentra con una casa completamente destartalada y en la que es necesario invertir mucho dinero para adecentarla de nuevo.

El problema de la okupación no es nuevo en Compostela y, por desgracia, afecta a varios barrios de la ciudad, donde los vecinos permanecen en pie de guerra contra los okupas y sobre todo contra la actitud poco cívica que manifiestan habitualmente. Conxo, Belvís, San Pedro, San Lourenzo, Carmen de Abaixo... son algunas de las zonas afectadas.