Prevén que Lavacolla supere los tres millones de usuarios por primera vez
En abril se batieron todos los récords, con casi 300.000 pasajeros, y se espera que mayo sea mucho mejor // Repunta las operaciones y se disparan las mercancías
Se cumplen los mejores pronósticos en Lavacolla. Los datos publicados ayer por Aena confirman que el proceso de recuperación del tráfico aéreo se ha consolidado con creces en la terminal de la capital gallega. Tal y como apuntaba ayer el portal de noticias Aeronoticiario SCQ, el aeropuerto de Rosalía de Catro “dinamitó” en abril su récord histórico hasta alcanzar los 292.643 usuarios, un 15,5 % más que el mismo mes de 2019, un dato “que no hace más que confirmar la tendencia positiva y de récord tras récord que acumulará Lavacolla lo que queda de año”, como remarca el noticiario que dirige Nicolás Álvarez, antes de indicar que “abril fue un mes de transición en el que ya operaron muchas de las nuevas rutas de la low cost Ryanair – Bruselas Charleroi, Edimburgo, Dublín, París Beauvais, La Palma o Memmingen–”.
Tras los buenos resultados del pasado mes, todo apunta que mayo volverá a ser de récord, ya que se han incorporado nuevas conexiones, como la de Girona o Marsella, a la espera de que en junio se sume la de Burdeos. Un escenario, considera el Aeronoticiario SCQ, que llevará a la terminal compostelana “a registros mensuales nunca vistos en años prepandémicos y que colocarán a Santiago, seguramente, por encima de los tres millones de pasajeros al finalizar el 2022”.
Cabe señalar que si se desgranan las estadísticas del primer cuatrimestre de este año, se confirma que el aeropuerto compostelano supera ya los 750.000 pasajeros, un 7 % menos que el mismo periodo de 2019, antes de la pandemia. “El dato confirma la recuperación, ya que solo las terminales de Menorca e Ibiza registraron datos mejores que los de Lavacolla en el primer cuatrimestre”, indica el Aeronoticiario SCQ.
Por otro lado, y en lo que se refiere a operaciones, el aeropuerto Rosalía de Castro experimentó un incremento del 19 % hasta alcanzar las 2.239 despegues y aterrizajes. Asimismo, añade la fuente, la actividad de transporte de mercancías sigue marcando datos más que positivos con más de 389 toneladas que se traducen en un incremento del 43,9 % respecto a abril de 2019, según los datos de Aena.
NACIONAL. Los aeropuertos de la red de Aena cerraron el primer cuatrimestre del año con un total de 58,3 millones de pasajeros, lo que supone una recuperación del 76,8 % respecto a los datos del mismo periodo de 2019, y un aumento del 389,7 % con respecto a 2021. Según la estadística del gestor aeroportuario, durante los cuatro meses se registraron 603.149 movimientos de aeronaves, un 12 % menos que en 2019 y un 114,7 % más que en 2021, mientras que se transportaron un 1,8 % menos de toneladas de mercancías que en prepandemia y un 12,1 % más que en 2021, hasta las 330.486 toneladas. En el mes de abril, los aeropuertos de la red de Aena registraron 20.458.260 de pasajeros, lo que le sitúa a unos 12 puntos porcentuales de los niveles previos a la pandemia.
Santiago. El aeropuerto de Lavacolla se convirtió ayer en escenario de un simulacro de amenaza de artefacto explosivo, a iniciativa de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), con la activa participación del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, del Ministerio del Interior (Secretaría de Estado de Seguridad, Policía Nacional y Guardia Civil), del Ejército del Aire, de Aena, de Enaire y de la Subdelegación del Gobierno en A Coruña.
El objetivo perseguido con este tipo de ejercicios es mantener entrenado al personal involucrado en un suceso de estas características y corroborar la idónea implantación de la normativa aplicable. Además, se obtendrán conclusiones que permitan mejorar el operativo en caso de un incidente real.
Los trabajos de diseño y planificación de este simulacro, incluyendo unas jornadas técnicas formativas, se realizaron con antelación y el ejercicio se llevó a cabo en el momento en que el aeropuerto estimó que no se producirían interferencias en el normal desarrollo de las operaciones aeroportuarias.
El simulacro discurrió de la siguiente manera: a primera hora de la mañana se detectó una mochila sospechosa en la zona restringida de seguridad del aeropuerto, en la plataforma, y se efectuaron los correspondientes avisos para activar los niveles de alerta. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado confirmaron la veracidad de la amenaza y se implantaron los protocolos de seguridad en vigor, acordonándose la zona y procediéndose a la evacuación del área afectada.
Se reunió con carácter inmediato el comité de crisis local y numerosos efectivos se desplazaron hasta la zona afectada. Allí los artificieros de la Guardia Civil desactivaron el explosivo, dándose por concluido el incidente y desactivándose los dispositivos de seguridad.
Terminado el ejercicio, expertos de todas las entidades involucradas comenzaron el trabajo de evaluación para obtener conclusiones que permitan reforzar la seguridad.