El frío complica las tareas e impide recuperar todavía la normalidad tras el temporal

Madrid. La nieve que ha dejado la borrasca Filomena sigue dificultando e incluso paralizando el tránsito en varios puntos de España y las tareas de limpieza se han agravado con la posterior ola de frío , con una situación bastante complicada en Madrid, que tardará varios días en recuperar la normalidad. De hecho, el Gobierno recomienda evitar en lo posible los desplazamientos y viajar prescindiendo del vehículo propio siempre que se pueda.

Grandes placas de hielo y nieve acumulada tras el paso del temporal dificultaban ayer el tráfico en 693 carreteras de la red principal y secundaria de todo el país, 138 de ellas cerradas al tránsito de vehículos, según la Dirección General de Tráfico (DGT).

Aún así, la situación va mejorando poco a poco y desde ayer se permite la entrada de camiones en Madrid para asegurar el suministro de bienes básicos, cuyo acceso estaba restringido desde hace días a causa de la borrasca Filomena, que ha puesto a la capital de España al borde de la declaración de “zona catastrófica”. Una petición que el Gobierno no descarta, aunque primero hay que evaluar los daños, según ha dicho el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos. Las previsiones de la Unidad Militar de Emergencias (UME) apuntan a “empezar a tener una situación normal” a finales de esta misma semana, aunque el alcalde madrileño, José Luis Martínez Almeida, dijo ayer que, pese a la actividad de quitanieves y saladores, “va a llevar alguna semana más” retirar toda la nieve ante el anuncio de temperaturas bajo cero durante los próximos días.

La sal es un arma fundamental para combatir la acumulación de nieve y prevenir la formación de hielo, ya que reduce el punto de fusión del agua y España cuenta con suficiente capacidad para abastecer a todo el país, según el presidente de la Asociación Española de Productores de Sal Marina (Salimar), Gonzalo Díaz Calcoya. “Hay sal de sobra” pero el bloqueo de carreteras hizo “muy difícil el suministro, pues no se podía acceder a los puntos de descarga”, aclaró. Las dificultades para el desplazamiento de los ciudadanos (en el caso de la capital, el único medio de transporte público que funciona es el Metro) ha llevado a suspender las clases en los colegios: la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, apuntó ayer que le “gustaría” retomarlas mañana miércoles, aunque no es seguro al 100 %.

Aunque la situación en Madrid es complicada, el temporal ha afectado a muchos otros puntos de la geografía española, en los que árboles caídos, coches siniestrados o directamente abandonados en la calzada y calles sepultadas aún por la nieve siguen siendo escenas corrientes.

En la provincia de Zamora, por ejemplo, el temporal obligó a ayudar a unas 900 personas afectadas por los cortes de tráfico, mientras que un centenar de viajeros procedentes de Galicia también sufrían retrasos de varias horas en la estación del AVE de Otero de Sanabria, ha explicado hoy el subdelegado del gobierno, Ángel Blanco. Precisamente Renfe anunció ayer que prevé restaurar de cara a hoy un 73 % del servicio en sus trenes, incluido el AVE Madrid-Barcelona aunque las sucesivas cancelaciones y los problemas de hielo están alterando las previsiones y penden del clima de hoy. efe