Caen un 25% las capturas de pulpo respecto al pasado año tras el levantamiento de la veda

El pesimismo comienza a adueñarse de la flota naseira ya que, tras el levantamiento de la veda el pasado 3 de julio, el pulpo no entra en sus nasas. La capturas han caído un 25% respecto al mismo período del año 2022, según datos de Pesca de Galicia, cuando lo habitual era que al inicio de la campaña, al menos en los primeros quince días, se capturasen los topes permitidos. “Este ano, nin de lonxe, pero xa desde o primeiro día”, afirmó el patrón mayor de Fisterra, Manuel Martínez. Y lo que más preocupa al sector es que “tampouco se ve cría”, afirma Primitivo Pedrosa, marinero dedicado a la pesquería del pulpo adscrito a la cofradía de Muros.

Esto es la prueba, añade, “de que a xestión desta especie non está sendo todo o boa que debera ser, pois aínda que hai anos, como 2022, no que houbo abundancia de polbo, a tendencia no tempo é a baixa”. Además, “hai moitos exemplares ovados”, dice, lo cual achaca a la escasez del tiempo de veda que, según defienden Pedrosa y la cofradía de Fisterra, debería ser “como mínimo de dous meses e medio, e tres sería o ideal”.

El pulpo regresa este lunes a las lonjas de Área, que subastan el 50% de las capturas de Galicia

Pedrosa considera asimismo que antes de levantar una veda “debería facerse unha mostraxe do recurso para avaliar o estado real, pois o polbo non le e, polo tanto, non se adapta ao que di unha normativa escrita”.

El responsable de la lonja de Corcubión, Diego Lojo, destaca que el hecho de que escasee también la cría “non é un bo sinal, e todo apunta a que vai ser un verán duro”. Reconoce que esta época nunca fue la mejor para el pulpo, “pero tan pouca cantidade como este ano había tempo que non se vía”, explica. El puerto corcubionés es uno de los principales comercializadores de esta especie, y desde el levantamiento de la veda “os primeiros días da semana poxamos entre 400 e 500 quilos diarios, pero despois xa baixou a 300”.

La lonja corcubionesa realiza subastas semanales y en esta última el pulpo pequeño (un kilo) se cotizó a 8 €/kg y el grande (más de dos kilos) a 13 euros. No obstante, “ao haber tan pouco as embarcacións non cubren os gastos da carnada e do gasoil”, concluye al respecto Diego Lojo.

Ante esta situación, una parte de la flota ya optó por cambiar de arte, según indicó el patrón mayor de Fisterra, donde “varios barcos xa pediron o cambio para os miños”. Las expectativas de los profesionales se fijan ahora en la época del otoño.

El pulpo entra en veda tras una campaña en la que generó 10,3 millones en las lonjas de Área

REGISTROS

Tras el reinicio de la pesquería el pasado 3 de julio, en las lonjas gallegas se subastaron 96.110 kilos, el 47% de los cuales fueron comercializados en las rulas de Área, cuyo litoral abarca desde Caión hasta Rianxo. Unas capturas que generaron unos ingresos de 953.935 euros (el 47% en Área) situándose el precio medio por encima de los diez euros el kilo, una cotización alta pero que no basta para compensar la escasez del recurso.

Un precio que se justifica además por coincidir con una época en la que se dispara la demanda de pulpo debido al turismo. Todo apunta, según explica Diego Lojo, responsable de la lonja corcubionesa, a que “o prezo seguirá subindo, porque a demanda esta aí, e, se temos pouco polbo, o normal é que se pague máis”.

LAS CIFRAS

Un 17% menos de ingresos

La alta cotización del pulpo en lonja, que se situó en torno a los 10 euros por kilo de media, no compensa la merma de capturas y, por ello, los ingresos por la venta de esta especie cayeron en el inicio de esta campaña un 17% respecto a 2022, según Pesca de Galicia.

Desde el pasado día 3 de julio, la facturación de las rulas gallegas por esta especie ascendió a un total de 953.935 euros, cifra que contrasta con los 1.144.371 euros de ingresos contabilizados en el inicio de la campaña del pasado año.

La lonja de Ribeira sigue siendo la que más pulpo comercializa. Por sus instalaciones pasaron este mes de julio más de 30 toneladas de esta especie, las cuales supusieron unos ingresos de 296.399 €.